Hola a todos!
Como algunos de vosotros sabréis, acabamos de regresar de un viaje hasta Mongolia y vuelta. Total, 26.000 kms de los cuales prácticamente unos 7.000 han sido por pistas.
En resumen os dejaré aquí una frase que dijo mi compañero Victor al llegar a Ulan Bator: "Poco viaje para tanta moto".
Íbamos cargados hasta las trancas con las tres maletas llenas y el macuto con el equipo de acampada sobre el asiento del pasajero. Hemos cruzado Europa por autopista a buen ritmo, pasado por barro, arena y pistas de tierra compacta por los países de Asia Central y el resultado ha sido el siguiente:
1. No han consumido NI UNA GOTA DE ACEITE. Al final nos cansamos de mirar el nivel cada dos días, después cada semana y, al final, ni lo hacíamos. Al cambiar el aceite en Ulán Bator (mitad del viaje) éste salió con buen aspecto conservando parte del color rosado propio del Castrol.
2. Salvo el impacto de un pájaro en la parte delantera de mi moto, que dobló la "T" del cable de freno que hay justo delante del telelever, nada que destacar. Se cambió en la revisión a la vuelta y listo.
3. La moto de Víctor, al ser más bajita (es la versión baja), debió hacer algún tope de suspensión por lo que los retenes sudaban un poco. No impidó PARA NADA acabar el viaje sin incidencias y se cambiaron en la revisión.
4. Los neumáticos Michelin Pilot Road 4 se portaron magníficamente e incluso tuvimos que hacer con ellos 1.000 kms de pistas sin problemas destacables. Una maravilla.
5. Los Michelin Anakee Wild de tacos para nosotros son el nuevo referente del segmento. En carretera se portan magníficamente, previo periodo de adaptación, y en campo se lo tragan absolutamente todo sin importar el tipo de terreno, siempre teniendo en cuenta el tipo de moto que llevamos. Aguantaron también unos 2.000 kms de autopista a buen ritmo a la vuelta sin rechistar. Si pensáis hacer campo, no lo dudéis: es EL NEUMÁTICO. Y no lo he leído ni me lo han dicho, lo he comprobado yo mismo y no soy precisamente novato en el campo con 15 años de enduro y varios campeonatos a mis espaldas.
Lo dicho, tendrá sus particularidades como un cambio algo ruidoso (parce ser que solventado en el modelo 2017) pero es LA MOTO. En Mongolia encontramos a un motero con una Africa Twin y el amortiguador trasero reventado y sólo había hecho la mitad que nosotros y, en la frontera con Rusia, otro con una KTM con la dirección hecha papilla y el kit de arrastre también reventado. Salvo una Tenere 660 y algunas KTM 690 prácticamente de enduro todo lo que vimos fueron GS: hacia Magadan, hacia Kamchatka.... Hacia el fin del mundo. Cabe decir que el señor de la KTM había cruzado Mongolia por la ruta corta y fácil y nosotros lo hicimos por la larga y difícil.
Cada uno cuenta la feria según le va, obviamente, pero esta ha sido nuestra feria y así os lo contamos.
Yo siempre he dicho que más que de BMW soy de GS y este viaje no ha hecho más que reafirmarme en mi preferencia.
Por cierto, de las supuestas competidoras que le suelen salir de vez en cuando y que parece que la van a destronar en cuanto salen no vimos A NINGUNA: ni Superteneres, ni Triumph y sólo una KTM (como me dijo su dueño ni están tan ready ni son tan race aludiendo a su slogan).
Se que este post va a levantar ampollas ya que siempre he procurado ser lo más imparcial posible pero es que no me lo han contado sino que lo he vivido y visto en mis carnes.
Puedo asegurar por ello que es la mejor maxitrail que existe en este momento en el mercado así que si alguien tiene dudas, me puede preguntar lo que quiera.
Crudo, muy crudo lo tiene la competencia con las GS. Son duras como un Navy Seal.
Estamos preparando los vídeos y ya veréis por dónde nos metimos... Y las motos han regresado perfectas. Una revisión y para casa....
Como algunos de vosotros sabréis, acabamos de regresar de un viaje hasta Mongolia y vuelta. Total, 26.000 kms de los cuales prácticamente unos 7.000 han sido por pistas.
En resumen os dejaré aquí una frase que dijo mi compañero Victor al llegar a Ulan Bator: "Poco viaje para tanta moto".
Íbamos cargados hasta las trancas con las tres maletas llenas y el macuto con el equipo de acampada sobre el asiento del pasajero. Hemos cruzado Europa por autopista a buen ritmo, pasado por barro, arena y pistas de tierra compacta por los países de Asia Central y el resultado ha sido el siguiente:
1. No han consumido NI UNA GOTA DE ACEITE. Al final nos cansamos de mirar el nivel cada dos días, después cada semana y, al final, ni lo hacíamos. Al cambiar el aceite en Ulán Bator (mitad del viaje) éste salió con buen aspecto conservando parte del color rosado propio del Castrol.
2. Salvo el impacto de un pájaro en la parte delantera de mi moto, que dobló la "T" del cable de freno que hay justo delante del telelever, nada que destacar. Se cambió en la revisión a la vuelta y listo.
3. La moto de Víctor, al ser más bajita (es la versión baja), debió hacer algún tope de suspensión por lo que los retenes sudaban un poco. No impidó PARA NADA acabar el viaje sin incidencias y se cambiaron en la revisión.
4. Los neumáticos Michelin Pilot Road 4 se portaron magníficamente e incluso tuvimos que hacer con ellos 1.000 kms de pistas sin problemas destacables. Una maravilla.
5. Los Michelin Anakee Wild de tacos para nosotros son el nuevo referente del segmento. En carretera se portan magníficamente, previo periodo de adaptación, y en campo se lo tragan absolutamente todo sin importar el tipo de terreno, siempre teniendo en cuenta el tipo de moto que llevamos. Aguantaron también unos 2.000 kms de autopista a buen ritmo a la vuelta sin rechistar. Si pensáis hacer campo, no lo dudéis: es EL NEUMÁTICO. Y no lo he leído ni me lo han dicho, lo he comprobado yo mismo y no soy precisamente novato en el campo con 15 años de enduro y varios campeonatos a mis espaldas.
Lo dicho, tendrá sus particularidades como un cambio algo ruidoso (parce ser que solventado en el modelo 2017) pero es LA MOTO. En Mongolia encontramos a un motero con una Africa Twin y el amortiguador trasero reventado y sólo había hecho la mitad que nosotros y, en la frontera con Rusia, otro con una KTM con la dirección hecha papilla y el kit de arrastre también reventado. Salvo una Tenere 660 y algunas KTM 690 prácticamente de enduro todo lo que vimos fueron GS: hacia Magadan, hacia Kamchatka.... Hacia el fin del mundo. Cabe decir que el señor de la KTM había cruzado Mongolia por la ruta corta y fácil y nosotros lo hicimos por la larga y difícil.
Cada uno cuenta la feria según le va, obviamente, pero esta ha sido nuestra feria y así os lo contamos.
Yo siempre he dicho que más que de BMW soy de GS y este viaje no ha hecho más que reafirmarme en mi preferencia.
Por cierto, de las supuestas competidoras que le suelen salir de vez en cuando y que parece que la van a destronar en cuanto salen no vimos A NINGUNA: ni Superteneres, ni Triumph y sólo una KTM (como me dijo su dueño ni están tan ready ni son tan race aludiendo a su slogan).
Se que este post va a levantar ampollas ya que siempre he procurado ser lo más imparcial posible pero es que no me lo han contado sino que lo he vivido y visto en mis carnes.
Puedo asegurar por ello que es la mejor maxitrail que existe en este momento en el mercado así que si alguien tiene dudas, me puede preguntar lo que quiera.
Crudo, muy crudo lo tiene la competencia con las GS. Son duras como un Navy Seal.
Estamos preparando los vídeos y ya veréis por dónde nos metimos... Y las motos han regresado perfectas. Una revisión y para casa....