Han pasado 3 años y casi 50.000km con mi RT1200.
Sin ningún ánimo de abrir polémica alguna, me atrevo a dar mi opinión sincera sobre mis sensaciones sobre esta moto.
Empezaré diciendo que no soy de nadie. Me explico. No soy de Honda, ni de Kawasaki, ni de BMW, ni de Honda… de nadie que no sea yo mismo.
Intentaré plasmar mis sensaciones sobre ella durante un buen montón de km, todo ello por partes, lo más objetivamente que pueda, y sin ánimo de crear polémica.
ESTÉTICA: qué os voy a contar? Para gustos colores, con lo que me quedaré con que es muy bonita y relativamente compacta, aunque tampoco diría que es espectacular visualmente a no ser que me refiera a su tamaño. En cualquier caso su estética es difícilmente comparable con ninguna otra marca que no sea BMW. Es “BMW style” y nada tiene que ver con el resto, ni el guardabarros delantero, ni las formas del carenado…
POSICIÓN DE CONDUCCIÓN: ergonómicamente muy buena. Casi todo está en su sitio y al alcance.
Para mi gusto la posición es demasiado erguida, teniendo la sensación de estar llevando cualquier modelo trail con carenado de carretera. Mucha gente dice que cuanto más erguido vas más cómodo, pero yo soy de los que opinan que una ligera inclinación hacia adelante evita que se sobrecargue la parte baja de la columna con los kilómetros, pero como todo, cuestión de gustos.
Si tienes los pies grandes, como es mi caso, más vale que tu acompañante no los tenga, porque con las maletas laterales puestas no es evidente encontrar una posición sin molestarse, aunque no es un tema grave.
Con las maletas laterales y el baúl trasero original, lo cierto es que tampoco es que el espacio para dos personas de tamaño estándar sea para tirar cohetes, pero bueno…
El asiento está bien pero tiene una forma un poco rara en forma de “puente”, justo al contrario de a lo que puedes estar acostumbrado si vienes de otras marcas.
El pasajero se “escurre” demasiado (sólo en frenadas fuertes o puertos de montaña en bajada) por no tener un “tope” en el acolchado entre pasajero y conductor como vemos en muchos modelos de otras marcas.
EQUIPAMIENTO:
Las piñas de los semimanillares “japan style” son perfectas. Buena calidad, buen funcionamiento, fácil accionamiento del ordenador de a bordo con un botón. Intermitentes bien, cúpula eléctrica bien, mandos de luces bien, todo bien a nivel de mandos. Acabados muy bien.
La cúpula es muy buena y ofrece una gran protección sin tenerla que subir nunca –en mi caso más de 5 cm para rodar confortable en tiradas de autopista. En carreteras viradas mucho mejor bajarla.
Cuadro de mandos bien, muy bien a pesar de lo que se diga de su visibilidad, muy bien.
Luces. Luces?
Por un lado, después de gastarme un par de veces 35 EUR en bombillas H7 Extreme power, acabé comprando las más baratas de la gasolinera de al lado de casa por la “bonita costumbre” que ha tenido mi RT (y algunas otras por lo que he leído) de fundir bombillas a su antojo cada ciertos meses al arrancar la moto. Arrancas y … puffff.
En el concesionario me dijeron que era, seguramente, por las vibraciones del boxer al arrancar..
He andado durante años haciendo el cabra por el monte con motos de enduro con unas vibraciones enormes, pegando saltos y con caídas y llevando bombillas H4 (no las que originalmente llevan muchas enduro que no lo son) y jamás he fundido una.. Lo mismo digo para todas las motos que he tenido en los últimos 25 años. N puedo recordar la última vez que se me haya fundido una bombilla.
Pero, a pesar de lo molesto que resulta ir a salir de viaje y tener que dedicar 15 minutos cuando estás ya preparado para salir para cambiar una bombilla (en mi caso mis manos no pasan por el hueco y tengo que desmontar el lateral del carenado para cambiarla), lo más grave, muy grave, es que en BMW hayan diseñado una GT con 3 faros y 3 bombillas H7 y que cuando pones las largas sólo funcione la del centro como larga y el resto sigan en posición corta. Dónde se ha visto? La luz que da en cortas es buena, nada por encima de la media, pero buena, pero en largas es absolutamente insuficiente, siendo de vital importancia para ver la salidas de las curvas en conducción nocturna cuando es posible accionarlas por no tener ningún vehículo delante o en dirección contraria.
SUSPENSIÓN:
Sólo se me ocurre calificarla como ESPECTACULAR (con ESA).
He probado otras RT sin ESA y no me gustó nada el tacto del amortiguador trasero, flojo y rebotón aún al máximo de tensión, pero el ESA es harina de otro costal.
En conducción solo siempre la he llevado en modo Sport y en pareja y con maletas cargadas Sport con “dos cascos”.
Cargado hasta los topes no experimentarás flaneos ni movimientos raros del tren trasero ni delantero. Va siempre por el sitio y no se mueve a no ser que te empeñes en buscarle las cosquillas a sus kg e inercias como si de otra moto más ligera se tratase. Porque si se las buscas al final, muy al final, se las encuentras, pero entiendo que ese no es el plan.
Hilando fino, muy fino, me atrevo a decir que en posición sport y “dos cascos” la moto se sujeta muy bien como he dicho, pero es “pelín” rebotona en baches prolongados. Para mi gusto sería conveniente una mejor progresividad en la extensión del amortiguador, aunque entonces ya estaríamos en el 10, ahora se queda en un 9,99 jejeje
Mención especial para el tren delantero y su sistema de suspensión telelever. Tengo que decir que tardé unos buenos 5000km en acostumbrarme. BMW sólo habla de las grandes ventajas de este sistema, pero parece olvidarse inocentemente de sus inconvenientes.
Las ventajas parecen muy importantes: te olvidas de la rueda delantera, básicamente, porque no la sientes. Tienes que experimentar una transformación mental que te lleva un tiempo, para que tu cerebro aprenda a aceptar que no habrá ningún problema en la curva a pesar de no sentir nada de lo que pasa por ahí delante. Y funciona, funciona muy bien. Puedes entrar pasado en las curvas ya casi como costumbre, tumbar lo que quieras, frenar lo que quieras y la moto seguirá exactamente por su sitio cambiando tantas veces de trayectoria como quieras en medio de una trazada, sin que pase nada malo. El paso por curva es espectacular, pero, repito, todo ello a pesar de no sentir nada delante…
Te acostumbras a sentir sólo la rueda trasera, la cual sí transmite una buena sensibilidad de lo que ocurre por ahí abajo. El resultado es fácil, seguro y muy efectivo, aunque una parte del trabajo y sensibilidad que debería poner el piloto la pone la moto y eso reduce las sensaciones al pilotar.
Hablando de la rueda trasera, me gustaría comentar el tema del control de tracción, No quiero pensar en que no haya actuado cuando debiera, pero no lo he notado jamás, no para bien. Me explicaré.
He provocado deslizamientos prolongados de la rueda trasera a buena velocidad tanto en suelos de cemento, otros mojados y también sobre pasos de cebra y su pintura “patinosa”. Siempre y en todos los casos la RT ha patinado como hacen todas las motos sin control de tracción. No lo entiendo, aunque quiero pensar que ha trabajado bien cuando debía en carretera y no lo he notado, pero se hace raro.
FRENOS: potentes y dosificables aunque algo bruscos en frenadas muy intensas. En todo caso muy potentes para detener los kilazos de una GT. Por encima de la media.
Sólo experimenté un fading prematuro en los primeros 1000 km por puertos de montaña en bajada. Quiero pensar que las pastillas no estaban todavía bien adaptadas a los discos, porque no me volvió a ocurrir nunca más. Excelente frenada RT !
EMBRAGUE: tacto de mantequilla aunque progresividad mejorable. Ningún problema en carretera, pero en ciudad deja algo que desear por su tacto de embrague “en seco”. Muy mejorable con un embrague bañado en aceite.
CAMBIO DE MARCHAS: muy suave y preciso, perfecto diría. No así los desarrollos empleados.
En cuanto a las relaciones de marcha, agradecería una 6ª velocidad mucho más overdrive que la actual. Mejoraría sobremanera el consumo de aceite y la sensación de motor apretado a ritmos rapidillos por autopista o nacional de buen piso.
La segunda y tercera velocidad me parecen largas para la potencia de este motor. En recuperaciones desde abajo el bóxer no sube suficientemente alegre en estas marchas cortas.
La cuarta y la quinta se me antojan las correctas.
CONSUMO: ridículo. Nunca lo he mirado mucho en una moto si no es muy anormal, pero es que el de la RT es anormal por ridículo. La diferencia entre enroscar poco o mucho el mando del gas es de décimas de consumo. He intentado superar los 6 litros a los 100 y no lo he conseguido. Ya puedes darle o ir con conducción deportiva que consume lo mismo.
Hasta aquí mi resumen iría en la linea de una moto bonita, efectiva, cómoda, ligera para su categoría, con buena capacidad de carga… pero ….
MOTOR: francamente insuficiente. Tosco, poco potente, con “tosidos” a poca velocidad callejeando por ciudad, regalando hermosas humaredas blancas al arrancarlo los primeros miles de kilómetros de vez en cuando.
La moto corre mucho, mucho más de lo que se puede y se debe correr, pero no es sólo velocidad final un motor.
Cuando lo arrancas te saluda con un SCHREEEECK que parece que se parte en dos. Al cabo de un instante ya ronronea “a lo bicilíndrico” normalmente.
No lo llamo tosco por ser un bicilíndrico, lo llamo tosco porque, en mi opinión, es muy tosco para ser un motor en una moto del siglo XXI. Aceptable en una moto de los 70, pero no mucho más.
Es poco potente en puertos de montaña, donde las curvas en subida se suceden con adormecimiento general si trabajas en marchas relativamente largas.
El plan B parece ser exprimirlo en marchas cortas no? Tiene realmente pocas vueltas buenas para exprimir y sólo conseguirás que su motor refrigerado por aire (en una moto de más de 18.000 EUR y tecnología punta en suspensiones y otros equipamientos) te ofrezca unos consumos de aceite propios de motos con 500 cc de este viscoso líquido en sus cárteres.
El consumo medio de aceite que he tenido en 50.000 km está dentro de las tolerancias de la fábrica, pero me parece escandaloso lo que llega a bajar en salidas de 500km a ritmo cuando no deberías en absoluto preocuparte por este tema en un modelo de esta cilindrada.
Nunca antes he tenido un vehículo nuevo y con pocos km de 2 o 4 ruedas por el que tuviera que preocuparme por el consumo de aceite.
Total, que en viajes largos en verano y en pareja te tienes que ir con un “potecito” de aceite en la maleta para ir añadiendo… grñññ
Otro tema que me gustaría comentar del motor es el conjunto de leyendas urbanas respecto al boxer he ido leyendo por aquí.
Antes de comprar la RT leía opiniones de bmweros aparentemente experimentados y con también aparentes conocimientos motociclísticos y de mecánica general, sobre unos temas que me asustaban y me siguen asustando ahora.
Ante las críticas parecidas a las mías al motor boxer en su configuración actual 2010-2012, estos usuarios experimentados tranqulizaban a los BMWnovatos con frases como…”el bóxer se afina con los kilómetros y gana potencia” o “el consumo de aceite baja a partir de los 20.000 km”, o “a partir de los 30.000 km alucinarás con el cambio del bóxer a mejor”.
Pues ya me perdonarán, por favor. Mi RT fue sometida a un rodaje escrupuloso con las especificaciones de fábrica, ha seguido fielmente el plan de revisiones puntualmente, ha sido cuidada al extremo y también se le ha exigido al puño (nunca en zona roja como tampoco lo he hecho con ningún vehículo) como se entiende que se debería poder hacer y por el tiempo que se entiende que se puede hacer.
Es decir, mi RT ha sido sometida a un pilotaje “normal” para un motero “normal” que ni va pisando huevos ni todo lo contrario, y no he tenido la suerte de experimentar estas sensaciones de transformación que se predecían en algunos posts. Será que he tenido mala suerte, pero después de 50.000km el bóxer me sigue pareciendo tosco y poco potente, justo lo mismo que pensaba cuando llevaba rodando con él los primeros 100 km.
Nada más lejos de mi intención que intentar desmitificar un mito ni criticar por criticar, pero las opiniones que os he dejado (las buenas y las malas) se corresponden con mi experiencia con la RT, con mis conocimientos (más bien normalitos) y con mi estilo de de conducción “del montón”.
Sólo espero que nadie se moleste por lo escrito porque no era esa mi intención, pero sí poner sobre la mesa mitos, leyendas y realidades basadas en una experiencia personal.
Dicho lo dicho agradezco sinceramente haber tenido la posibilidad de rodar con la RT estos últimos 3 años como agradezco haberlo hecho con todas las motos que he tenido la suerte de poder pilotar hasta ahora con salud. Guardaré un buen recuerdo de esta experiencia, pero ahora mismo mi cuerpo me pide un cambio de marca.
Aunque… nunca se sabe si dentro de unos años vuelvo por aquí jejeje.
Saludos de uno que no es de nadie !
V’s
Sin ningún ánimo de abrir polémica alguna, me atrevo a dar mi opinión sincera sobre mis sensaciones sobre esta moto.
Empezaré diciendo que no soy de nadie. Me explico. No soy de Honda, ni de Kawasaki, ni de BMW, ni de Honda… de nadie que no sea yo mismo.
Intentaré plasmar mis sensaciones sobre ella durante un buen montón de km, todo ello por partes, lo más objetivamente que pueda, y sin ánimo de crear polémica.
ESTÉTICA: qué os voy a contar? Para gustos colores, con lo que me quedaré con que es muy bonita y relativamente compacta, aunque tampoco diría que es espectacular visualmente a no ser que me refiera a su tamaño. En cualquier caso su estética es difícilmente comparable con ninguna otra marca que no sea BMW. Es “BMW style” y nada tiene que ver con el resto, ni el guardabarros delantero, ni las formas del carenado…
POSICIÓN DE CONDUCCIÓN: ergonómicamente muy buena. Casi todo está en su sitio y al alcance.
Para mi gusto la posición es demasiado erguida, teniendo la sensación de estar llevando cualquier modelo trail con carenado de carretera. Mucha gente dice que cuanto más erguido vas más cómodo, pero yo soy de los que opinan que una ligera inclinación hacia adelante evita que se sobrecargue la parte baja de la columna con los kilómetros, pero como todo, cuestión de gustos.
Si tienes los pies grandes, como es mi caso, más vale que tu acompañante no los tenga, porque con las maletas laterales puestas no es evidente encontrar una posición sin molestarse, aunque no es un tema grave.
Con las maletas laterales y el baúl trasero original, lo cierto es que tampoco es que el espacio para dos personas de tamaño estándar sea para tirar cohetes, pero bueno…
El asiento está bien pero tiene una forma un poco rara en forma de “puente”, justo al contrario de a lo que puedes estar acostumbrado si vienes de otras marcas.
El pasajero se “escurre” demasiado (sólo en frenadas fuertes o puertos de montaña en bajada) por no tener un “tope” en el acolchado entre pasajero y conductor como vemos en muchos modelos de otras marcas.
EQUIPAMIENTO:
Las piñas de los semimanillares “japan style” son perfectas. Buena calidad, buen funcionamiento, fácil accionamiento del ordenador de a bordo con un botón. Intermitentes bien, cúpula eléctrica bien, mandos de luces bien, todo bien a nivel de mandos. Acabados muy bien.
La cúpula es muy buena y ofrece una gran protección sin tenerla que subir nunca –en mi caso más de 5 cm para rodar confortable en tiradas de autopista. En carreteras viradas mucho mejor bajarla.
Cuadro de mandos bien, muy bien a pesar de lo que se diga de su visibilidad, muy bien.
Luces. Luces?
Por un lado, después de gastarme un par de veces 35 EUR en bombillas H7 Extreme power, acabé comprando las más baratas de la gasolinera de al lado de casa por la “bonita costumbre” que ha tenido mi RT (y algunas otras por lo que he leído) de fundir bombillas a su antojo cada ciertos meses al arrancar la moto. Arrancas y … puffff.
En el concesionario me dijeron que era, seguramente, por las vibraciones del boxer al arrancar..
He andado durante años haciendo el cabra por el monte con motos de enduro con unas vibraciones enormes, pegando saltos y con caídas y llevando bombillas H4 (no las que originalmente llevan muchas enduro que no lo son) y jamás he fundido una.. Lo mismo digo para todas las motos que he tenido en los últimos 25 años. N puedo recordar la última vez que se me haya fundido una bombilla.
Pero, a pesar de lo molesto que resulta ir a salir de viaje y tener que dedicar 15 minutos cuando estás ya preparado para salir para cambiar una bombilla (en mi caso mis manos no pasan por el hueco y tengo que desmontar el lateral del carenado para cambiarla), lo más grave, muy grave, es que en BMW hayan diseñado una GT con 3 faros y 3 bombillas H7 y que cuando pones las largas sólo funcione la del centro como larga y el resto sigan en posición corta. Dónde se ha visto? La luz que da en cortas es buena, nada por encima de la media, pero buena, pero en largas es absolutamente insuficiente, siendo de vital importancia para ver la salidas de las curvas en conducción nocturna cuando es posible accionarlas por no tener ningún vehículo delante o en dirección contraria.
SUSPENSIÓN:
Sólo se me ocurre calificarla como ESPECTACULAR (con ESA).
He probado otras RT sin ESA y no me gustó nada el tacto del amortiguador trasero, flojo y rebotón aún al máximo de tensión, pero el ESA es harina de otro costal.
En conducción solo siempre la he llevado en modo Sport y en pareja y con maletas cargadas Sport con “dos cascos”.
Cargado hasta los topes no experimentarás flaneos ni movimientos raros del tren trasero ni delantero. Va siempre por el sitio y no se mueve a no ser que te empeñes en buscarle las cosquillas a sus kg e inercias como si de otra moto más ligera se tratase. Porque si se las buscas al final, muy al final, se las encuentras, pero entiendo que ese no es el plan.
Hilando fino, muy fino, me atrevo a decir que en posición sport y “dos cascos” la moto se sujeta muy bien como he dicho, pero es “pelín” rebotona en baches prolongados. Para mi gusto sería conveniente una mejor progresividad en la extensión del amortiguador, aunque entonces ya estaríamos en el 10, ahora se queda en un 9,99 jejeje
Mención especial para el tren delantero y su sistema de suspensión telelever. Tengo que decir que tardé unos buenos 5000km en acostumbrarme. BMW sólo habla de las grandes ventajas de este sistema, pero parece olvidarse inocentemente de sus inconvenientes.
Las ventajas parecen muy importantes: te olvidas de la rueda delantera, básicamente, porque no la sientes. Tienes que experimentar una transformación mental que te lleva un tiempo, para que tu cerebro aprenda a aceptar que no habrá ningún problema en la curva a pesar de no sentir nada de lo que pasa por ahí delante. Y funciona, funciona muy bien. Puedes entrar pasado en las curvas ya casi como costumbre, tumbar lo que quieras, frenar lo que quieras y la moto seguirá exactamente por su sitio cambiando tantas veces de trayectoria como quieras en medio de una trazada, sin que pase nada malo. El paso por curva es espectacular, pero, repito, todo ello a pesar de no sentir nada delante…
Te acostumbras a sentir sólo la rueda trasera, la cual sí transmite una buena sensibilidad de lo que ocurre por ahí abajo. El resultado es fácil, seguro y muy efectivo, aunque una parte del trabajo y sensibilidad que debería poner el piloto la pone la moto y eso reduce las sensaciones al pilotar.
Hablando de la rueda trasera, me gustaría comentar el tema del control de tracción, No quiero pensar en que no haya actuado cuando debiera, pero no lo he notado jamás, no para bien. Me explicaré.
He provocado deslizamientos prolongados de la rueda trasera a buena velocidad tanto en suelos de cemento, otros mojados y también sobre pasos de cebra y su pintura “patinosa”. Siempre y en todos los casos la RT ha patinado como hacen todas las motos sin control de tracción. No lo entiendo, aunque quiero pensar que ha trabajado bien cuando debía en carretera y no lo he notado, pero se hace raro.
FRENOS: potentes y dosificables aunque algo bruscos en frenadas muy intensas. En todo caso muy potentes para detener los kilazos de una GT. Por encima de la media.
Sólo experimenté un fading prematuro en los primeros 1000 km por puertos de montaña en bajada. Quiero pensar que las pastillas no estaban todavía bien adaptadas a los discos, porque no me volvió a ocurrir nunca más. Excelente frenada RT !
EMBRAGUE: tacto de mantequilla aunque progresividad mejorable. Ningún problema en carretera, pero en ciudad deja algo que desear por su tacto de embrague “en seco”. Muy mejorable con un embrague bañado en aceite.
CAMBIO DE MARCHAS: muy suave y preciso, perfecto diría. No así los desarrollos empleados.
En cuanto a las relaciones de marcha, agradecería una 6ª velocidad mucho más overdrive que la actual. Mejoraría sobremanera el consumo de aceite y la sensación de motor apretado a ritmos rapidillos por autopista o nacional de buen piso.
La segunda y tercera velocidad me parecen largas para la potencia de este motor. En recuperaciones desde abajo el bóxer no sube suficientemente alegre en estas marchas cortas.
La cuarta y la quinta se me antojan las correctas.
CONSUMO: ridículo. Nunca lo he mirado mucho en una moto si no es muy anormal, pero es que el de la RT es anormal por ridículo. La diferencia entre enroscar poco o mucho el mando del gas es de décimas de consumo. He intentado superar los 6 litros a los 100 y no lo he conseguido. Ya puedes darle o ir con conducción deportiva que consume lo mismo.
Hasta aquí mi resumen iría en la linea de una moto bonita, efectiva, cómoda, ligera para su categoría, con buena capacidad de carga… pero ….
MOTOR: francamente insuficiente. Tosco, poco potente, con “tosidos” a poca velocidad callejeando por ciudad, regalando hermosas humaredas blancas al arrancarlo los primeros miles de kilómetros de vez en cuando.
La moto corre mucho, mucho más de lo que se puede y se debe correr, pero no es sólo velocidad final un motor.
Cuando lo arrancas te saluda con un SCHREEEECK que parece que se parte en dos. Al cabo de un instante ya ronronea “a lo bicilíndrico” normalmente.
No lo llamo tosco por ser un bicilíndrico, lo llamo tosco porque, en mi opinión, es muy tosco para ser un motor en una moto del siglo XXI. Aceptable en una moto de los 70, pero no mucho más.
Es poco potente en puertos de montaña, donde las curvas en subida se suceden con adormecimiento general si trabajas en marchas relativamente largas.
El plan B parece ser exprimirlo en marchas cortas no? Tiene realmente pocas vueltas buenas para exprimir y sólo conseguirás que su motor refrigerado por aire (en una moto de más de 18.000 EUR y tecnología punta en suspensiones y otros equipamientos) te ofrezca unos consumos de aceite propios de motos con 500 cc de este viscoso líquido en sus cárteres.
El consumo medio de aceite que he tenido en 50.000 km está dentro de las tolerancias de la fábrica, pero me parece escandaloso lo que llega a bajar en salidas de 500km a ritmo cuando no deberías en absoluto preocuparte por este tema en un modelo de esta cilindrada.
Nunca antes he tenido un vehículo nuevo y con pocos km de 2 o 4 ruedas por el que tuviera que preocuparme por el consumo de aceite.
Total, que en viajes largos en verano y en pareja te tienes que ir con un “potecito” de aceite en la maleta para ir añadiendo… grñññ
Otro tema que me gustaría comentar del motor es el conjunto de leyendas urbanas respecto al boxer he ido leyendo por aquí.
Antes de comprar la RT leía opiniones de bmweros aparentemente experimentados y con también aparentes conocimientos motociclísticos y de mecánica general, sobre unos temas que me asustaban y me siguen asustando ahora.
Ante las críticas parecidas a las mías al motor boxer en su configuración actual 2010-2012, estos usuarios experimentados tranqulizaban a los BMWnovatos con frases como…”el bóxer se afina con los kilómetros y gana potencia” o “el consumo de aceite baja a partir de los 20.000 km”, o “a partir de los 30.000 km alucinarás con el cambio del bóxer a mejor”.
Pues ya me perdonarán, por favor. Mi RT fue sometida a un rodaje escrupuloso con las especificaciones de fábrica, ha seguido fielmente el plan de revisiones puntualmente, ha sido cuidada al extremo y también se le ha exigido al puño (nunca en zona roja como tampoco lo he hecho con ningún vehículo) como se entiende que se debería poder hacer y por el tiempo que se entiende que se puede hacer.
Es decir, mi RT ha sido sometida a un pilotaje “normal” para un motero “normal” que ni va pisando huevos ni todo lo contrario, y no he tenido la suerte de experimentar estas sensaciones de transformación que se predecían en algunos posts. Será que he tenido mala suerte, pero después de 50.000km el bóxer me sigue pareciendo tosco y poco potente, justo lo mismo que pensaba cuando llevaba rodando con él los primeros 100 km.
Nada más lejos de mi intención que intentar desmitificar un mito ni criticar por criticar, pero las opiniones que os he dejado (las buenas y las malas) se corresponden con mi experiencia con la RT, con mis conocimientos (más bien normalitos) y con mi estilo de de conducción “del montón”.
Sólo espero que nadie se moleste por lo escrito porque no era esa mi intención, pero sí poner sobre la mesa mitos, leyendas y realidades basadas en una experiencia personal.
Dicho lo dicho agradezco sinceramente haber tenido la posibilidad de rodar con la RT estos últimos 3 años como agradezco haberlo hecho con todas las motos que he tenido la suerte de poder pilotar hasta ahora con salud. Guardaré un buen recuerdo de esta experiencia, pero ahora mismo mi cuerpo me pide un cambio de marca.
Aunque… nunca se sabe si dentro de unos años vuelvo por aquí jejeje.
Saludos de uno que no es de nadie !
V’s