Estimado Sr. Navarro:
Soy uno de esos ilusos conductores que, cada vez que ve nombrar a un nuevo director general de tráfico, piensa que, independientemente de su color político, será bienvenido si consigue modificar en algo tanto las conductas de los usuarios de los vehículos como el número de muertos que cada año riegan nuestras carreteras.
Llámeme iluso, pero así lo siento.
Lamentable ó afortunadamente, el tiempo pone a cada uno en su sitio, y me temo que con ud. está pasando lo mismo. Lo fácil, lo políticamente correcto, es poner radares por doquier alegando que esto disminuirá la cifra de fallecidos porque, según ud., la velocidad excesiva es la principal causa de mortandad.¿Cree ud. que la gente no corre porque ponga radares? O viaja poco por carretera ó simplemente practica la demagogia. Seguimos corriendo, pero ahora, además, se crean situaciones de peligro cada vez que el conductor que circula delante cree haber visto un radar y clava los frenos con todas sus fuerzas, aunque circule a la velocidad permitida. Sin embargo se ven cosechadoras circular por las autovías en plena salida de Agosto, ó carreteras con la señalización tapada con árboles, publicidad, farolas, puentes……
Además, ¿Porque no se atreve ud a resolver el verdadero problema de las carreteras y atajarlo desde su inicio que no es otro que las autoescuelas?. Cada vez que veo a un pobre conductor novato al volante de un coche de autoescuela, circulando, a veces en posturas inverosímiles, o por sitios que realmente no le aportan nada como conductor. (¿Quién, en una clase de autoescuela, no ha ejercido alguna vez de “chófer” del profesor, para resolver sus “asuntos” personales?), siento que están estafando al usuario y ponen una víctima más en potencia a circular por nuestras carreteras.
¿Por qué no se potencia el uso de escuelas de conducción, tipo Emilio de Villota, ó la de Pedro Martínez De La Rosa desde temprano? ¿Porque no ayuda a los moteros, en lugar de perjudicarnos cada día más?¿Por qué no se premia a aquellos que conducen bien? ¿Es que acaso pesan más los intereses partidistas y nadie nunca se va a atrever a hacer algo que beneficiaría a todo el mundo simplemente porque no es políticamente correcto?
Entiendo que es una empresa arriesgada y que proporcionará pocos amigos pero muchos enemigos, pero creo que, igual que en el resto de aspectos de la educación, nos preocupa lo que enseñan a nuestros hijos, debería ser así con la seguridad vial, porque les puede costar la vida!!
Atentamente
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Soy uno de esos ilusos conductores que, cada vez que ve nombrar a un nuevo director general de tráfico, piensa que, independientemente de su color político, será bienvenido si consigue modificar en algo tanto las conductas de los usuarios de los vehículos como el número de muertos que cada año riegan nuestras carreteras.
Llámeme iluso, pero así lo siento.
Lamentable ó afortunadamente, el tiempo pone a cada uno en su sitio, y me temo que con ud. está pasando lo mismo. Lo fácil, lo políticamente correcto, es poner radares por doquier alegando que esto disminuirá la cifra de fallecidos porque, según ud., la velocidad excesiva es la principal causa de mortandad.¿Cree ud. que la gente no corre porque ponga radares? O viaja poco por carretera ó simplemente practica la demagogia. Seguimos corriendo, pero ahora, además, se crean situaciones de peligro cada vez que el conductor que circula delante cree haber visto un radar y clava los frenos con todas sus fuerzas, aunque circule a la velocidad permitida. Sin embargo se ven cosechadoras circular por las autovías en plena salida de Agosto, ó carreteras con la señalización tapada con árboles, publicidad, farolas, puentes……
Además, ¿Porque no se atreve ud a resolver el verdadero problema de las carreteras y atajarlo desde su inicio que no es otro que las autoescuelas?. Cada vez que veo a un pobre conductor novato al volante de un coche de autoescuela, circulando, a veces en posturas inverosímiles, o por sitios que realmente no le aportan nada como conductor. (¿Quién, en una clase de autoescuela, no ha ejercido alguna vez de “chófer” del profesor, para resolver sus “asuntos” personales?), siento que están estafando al usuario y ponen una víctima más en potencia a circular por nuestras carreteras.
¿Por qué no se potencia el uso de escuelas de conducción, tipo Emilio de Villota, ó la de Pedro Martínez De La Rosa desde temprano? ¿Porque no ayuda a los moteros, en lugar de perjudicarnos cada día más?¿Por qué no se premia a aquellos que conducen bien? ¿Es que acaso pesan más los intereses partidistas y nadie nunca se va a atrever a hacer algo que beneficiaría a todo el mundo simplemente porque no es políticamente correcto?
Entiendo que es una empresa arriesgada y que proporcionará pocos amigos pero muchos enemigos, pero creo que, igual que en el resto de aspectos de la educación, nos preocupa lo que enseñan a nuestros hijos, debería ser así con la seguridad vial, porque les puede costar la vida!!
Atentamente
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