Extraido de su blog http://bultaco-dakar2011.blogspot.com/
"Hola a todos. Disculpas por el retraso en la información, pero acabo de llegar al hotel de B Aires y hasta ahora no he parado. Dejarlo todo atado y organizar la vuelta ha tenido su complicación.
Ayer, en el hotel de Arica, por primera vez desde que empezó el rally, tuve un móvil operativo y acceso a Internet.
La verdad es que pasé la tarde embobado leyendo los e.mails, los sms, los comentarios en el blog, las noticias en los medios… españoles, franceses, americanos…
Uno se mete en estos líos porque cree en ellos, porque está convencido de que valen la pena, y normalmente no haría falta ningún argumento más.
Pero cuando se trata de un proyecto como éste, que ha costado tanta dedicación y tanto sacrificio, y el resultado es el que ya conocéis, bueno, te asaltan algunas dudas.
Primero piensas si has sido demasiado pretencioso al intentar una cosa así. O demasiado inconsciente.
Pero después de leer vuestros comentarios lo primero que me quedo claro es que el resultado era triste, sin duda, pero no decepcionante.
Hubiera sido muy fácil hacer leña, soltar el típico "que se pensaba éste…", o "ya lo decía yo…". Pero creo que los comentarios de este tipo han sido los menos, o por lo menos a mi no me han llegado como mayoría.
Me ha sorprendido el respeto con el que, por lo general, se ha entendido este proyecto. Y la confianza y la ilusión que muchas personas (muchas que no me conocéis) habéis puesto en él.
Y creo que eso sólo ya ha sido un éxito. Todos nos hemos creído que es posible.
Sabíamos que no estaba garantizado terminar. De hecho, cada año se vuelven para casa la mitad de las motos (modernas) que participan. Pero aún así había ganas de creer que lo íbamos a conseguir.
Ahora puedo confesar que ese convencimiento ha supuesto una presión muy grande, pero también muy positiva. Me ha empujado mucho, me he sentido en deuda, y he sacado fuerzas y recursos de donde jamás pensé que quedarían.
Ahora voy con la explicación del abandono:
Sin entrar en detalles, el resumen que extraigo de estas 6 etapas es que, como pensábamos la mayoría, no era fácil, pero si posible.
No tanto el poder competir contra las motos actuales para obtener un resultado espectacular, pero si poder resistir en carrera hasta el final.
Y no ha sido la moto, con todas sus limitaciones, la que ha fallado.
¿Entonces ha fallado el piloto? Bueno, seguro que lo podía haber hecho mejor, pero cuando me ocupe sólo de pilotar, pude comprobar que no éramos los más lentos, ni con mucho, de la carrera. Teníamos un ritmo que nos hubiera permitido estar en el pelotón, y librarnos del hándicap de salir cada día detrás.
Entonces, ¿qué pasó?
Pues que este Dakar de hoy en día es sencillamente IMPOSIBLE hacerlo sin asistencia. Está planteado con un ritmo que "exprima" a los pilotos que sólo van a pilotar, dando por supuesto que todos llevarán su asistencia, y que descansan cuando se bajan de la moto.
En mi caso, cuando me bajé de la moto, cada día, tuve que hacer la mecánica, la logística y todo lo demás. Restándole horas al descanso, y a la planificación, e incluso no llevando a cabo un mantenimiento fiable de la moto (cuando la fui a recuperar me di cuenta que la noche anterior me dejé el freno trasero suelto, y llevaba toda la etapa así!)
Así, el día de la retirada empezó con una segunda noche consecutiva sin dormir, y sin parar un minuto a descansar.
3 días x 700 kms de rally "durísimo", encima de una Pursang 370 (…que todos nos la queremos mucho, pero es dura como la madre que la parió!), con 0 horas de descanso, es la fórmula perfecta para el desastre.
Para acabar de arreglarlo, ese día un tubo de gasolina suelto me hizo perder toda la gasolina en el desierto, y esperar 4 horas al sol hasta poder continuar.
Cuando ya se me hizo de noche, quedaban "sólo" 120 kms de fesh y dunas. Pero volví tener problemas con las luces, me desvié mucho del recorrido, y después de 2 ó 3 revolcones, decidí dejarlo.
Es muy duro tomar la decisión, pero ya estaba sentenciado ese día o el siguiente, porque me esperaba un montón de trabajo en la moto al llegar y… ¿hubiera salido el cuarto día sin dormir?
Y entonces, ¿se trató de una "machada" pretender hacer el Dakar sin asistencia? Evidentemente, no. El proyecto se planteó desde el principio, con una asistencia. Nada del otro mundo, pero sí un mínimo que permitiera que cada uno hiciera lo suyo.
Y por segundo año consecutivo no pude completar el presupuesto necesario.
Así que había que decidir: o me quedaba el segundo año en casa o lo intentaba sin asistencia. Y la decisión era complicada.
Si participaba sin asistencia podía pasar lo que ha pasado, podía dar al traste con un año de mucho trabajo y muchos gastos, para nada.
Por otro lado, dejar enfriar el proyecto un año más lo iba complicando. Porque cada vez estaba más lejos la experiencia recogida en el Rally Pirámides y en el Héroes Legend, y por tanto todo el esfuerzo hecho hasta la fecha se iba devaluando.
Debo aclarar que, como habréis observado, luzco algunos sponsors en la moto y en el equipo. Y todos se lo merecen, porque cada uno ha hecho un esfuerzo, en la medida de sus posibilidades, para estar ahí, la mayoría de ellos con ayudas técnicas para la construcción de la moto y el recambio.
Pero además para un Dakar hace falta dinero, bastante. Y los sponsors que apostaron por el proyecto de este modo, lamentablemente, fueron los que más tarde lo conocieron, cuando ya sus presupuestos 2011 estaban cerrados, y cuando tampoco hubiese dado tiempo a rehacer el proyecto, que ya desde octubre tuve que definir como "1 moto + 1 piloto", pudiendo contratar solamente el transporte de piezas en carrera.
También quiero agradecer la ayuda de todos los aficionados que compraron la camiseta, desde todas partes del mundo, porque no sólo ayudaron económicamente, sino que me transmitieron ánimos e ilusión, que también contó, y mucho. Y algunos particulares que me hicieron aportaciones económicas a cambio de NADA, sólo por su satisfacción de apoyar el proyecto.
Después de eso, ¿no me iba a quedar sin intentarlo?
Bueno, por hoy nada más. Cuando llegue a Barcelona seguimos.
En resumen:
- GRACIAS sinceras a todos los que habéis ayudado, de un modo u otro, sponsors, amigos, aficionados.
- GRACIAS a Rosa María, mi mujer, por su santa paciencia y su adhesión inquebrantable.
- GRACIAS a los que seguís creyendo que es posible, y mantenéis intacto el entusiasmo, que ya veremos que pasa al final!
- …y a los que no, ¿os dais cuenta de lo que os estáis perdiendo?
Un abrazo a todos, "piel de gallina" cuando leo vuestros mensajes !!!
(Buenos Aires, 10.01.2011 02:26 am)
Ignacio Chivite"
"Hola a todos. Disculpas por el retraso en la información, pero acabo de llegar al hotel de B Aires y hasta ahora no he parado. Dejarlo todo atado y organizar la vuelta ha tenido su complicación.
Ayer, en el hotel de Arica, por primera vez desde que empezó el rally, tuve un móvil operativo y acceso a Internet.
La verdad es que pasé la tarde embobado leyendo los e.mails, los sms, los comentarios en el blog, las noticias en los medios… españoles, franceses, americanos…
Uno se mete en estos líos porque cree en ellos, porque está convencido de que valen la pena, y normalmente no haría falta ningún argumento más.
Pero cuando se trata de un proyecto como éste, que ha costado tanta dedicación y tanto sacrificio, y el resultado es el que ya conocéis, bueno, te asaltan algunas dudas.
Primero piensas si has sido demasiado pretencioso al intentar una cosa así. O demasiado inconsciente.
Pero después de leer vuestros comentarios lo primero que me quedo claro es que el resultado era triste, sin duda, pero no decepcionante.
Hubiera sido muy fácil hacer leña, soltar el típico "que se pensaba éste…", o "ya lo decía yo…". Pero creo que los comentarios de este tipo han sido los menos, o por lo menos a mi no me han llegado como mayoría.
Me ha sorprendido el respeto con el que, por lo general, se ha entendido este proyecto. Y la confianza y la ilusión que muchas personas (muchas que no me conocéis) habéis puesto en él.
Y creo que eso sólo ya ha sido un éxito. Todos nos hemos creído que es posible.
Sabíamos que no estaba garantizado terminar. De hecho, cada año se vuelven para casa la mitad de las motos (modernas) que participan. Pero aún así había ganas de creer que lo íbamos a conseguir.
Ahora puedo confesar que ese convencimiento ha supuesto una presión muy grande, pero también muy positiva. Me ha empujado mucho, me he sentido en deuda, y he sacado fuerzas y recursos de donde jamás pensé que quedarían.
Ahora voy con la explicación del abandono:
Sin entrar en detalles, el resumen que extraigo de estas 6 etapas es que, como pensábamos la mayoría, no era fácil, pero si posible.
No tanto el poder competir contra las motos actuales para obtener un resultado espectacular, pero si poder resistir en carrera hasta el final.
Y no ha sido la moto, con todas sus limitaciones, la que ha fallado.
¿Entonces ha fallado el piloto? Bueno, seguro que lo podía haber hecho mejor, pero cuando me ocupe sólo de pilotar, pude comprobar que no éramos los más lentos, ni con mucho, de la carrera. Teníamos un ritmo que nos hubiera permitido estar en el pelotón, y librarnos del hándicap de salir cada día detrás.
Entonces, ¿qué pasó?
Pues que este Dakar de hoy en día es sencillamente IMPOSIBLE hacerlo sin asistencia. Está planteado con un ritmo que "exprima" a los pilotos que sólo van a pilotar, dando por supuesto que todos llevarán su asistencia, y que descansan cuando se bajan de la moto.
En mi caso, cuando me bajé de la moto, cada día, tuve que hacer la mecánica, la logística y todo lo demás. Restándole horas al descanso, y a la planificación, e incluso no llevando a cabo un mantenimiento fiable de la moto (cuando la fui a recuperar me di cuenta que la noche anterior me dejé el freno trasero suelto, y llevaba toda la etapa así!)
Así, el día de la retirada empezó con una segunda noche consecutiva sin dormir, y sin parar un minuto a descansar.
3 días x 700 kms de rally "durísimo", encima de una Pursang 370 (…que todos nos la queremos mucho, pero es dura como la madre que la parió!), con 0 horas de descanso, es la fórmula perfecta para el desastre.
Para acabar de arreglarlo, ese día un tubo de gasolina suelto me hizo perder toda la gasolina en el desierto, y esperar 4 horas al sol hasta poder continuar.
Cuando ya se me hizo de noche, quedaban "sólo" 120 kms de fesh y dunas. Pero volví tener problemas con las luces, me desvié mucho del recorrido, y después de 2 ó 3 revolcones, decidí dejarlo.
Es muy duro tomar la decisión, pero ya estaba sentenciado ese día o el siguiente, porque me esperaba un montón de trabajo en la moto al llegar y… ¿hubiera salido el cuarto día sin dormir?
Y entonces, ¿se trató de una "machada" pretender hacer el Dakar sin asistencia? Evidentemente, no. El proyecto se planteó desde el principio, con una asistencia. Nada del otro mundo, pero sí un mínimo que permitiera que cada uno hiciera lo suyo.
Y por segundo año consecutivo no pude completar el presupuesto necesario.
Así que había que decidir: o me quedaba el segundo año en casa o lo intentaba sin asistencia. Y la decisión era complicada.
Si participaba sin asistencia podía pasar lo que ha pasado, podía dar al traste con un año de mucho trabajo y muchos gastos, para nada.
Por otro lado, dejar enfriar el proyecto un año más lo iba complicando. Porque cada vez estaba más lejos la experiencia recogida en el Rally Pirámides y en el Héroes Legend, y por tanto todo el esfuerzo hecho hasta la fecha se iba devaluando.
Debo aclarar que, como habréis observado, luzco algunos sponsors en la moto y en el equipo. Y todos se lo merecen, porque cada uno ha hecho un esfuerzo, en la medida de sus posibilidades, para estar ahí, la mayoría de ellos con ayudas técnicas para la construcción de la moto y el recambio.
Pero además para un Dakar hace falta dinero, bastante. Y los sponsors que apostaron por el proyecto de este modo, lamentablemente, fueron los que más tarde lo conocieron, cuando ya sus presupuestos 2011 estaban cerrados, y cuando tampoco hubiese dado tiempo a rehacer el proyecto, que ya desde octubre tuve que definir como "1 moto + 1 piloto", pudiendo contratar solamente el transporte de piezas en carrera.
También quiero agradecer la ayuda de todos los aficionados que compraron la camiseta, desde todas partes del mundo, porque no sólo ayudaron económicamente, sino que me transmitieron ánimos e ilusión, que también contó, y mucho. Y algunos particulares que me hicieron aportaciones económicas a cambio de NADA, sólo por su satisfacción de apoyar el proyecto.
Después de eso, ¿no me iba a quedar sin intentarlo?
Bueno, por hoy nada más. Cuando llegue a Barcelona seguimos.
En resumen:
- GRACIAS sinceras a todos los que habéis ayudado, de un modo u otro, sponsors, amigos, aficionados.
- GRACIAS a Rosa María, mi mujer, por su santa paciencia y su adhesión inquebrantable.
- GRACIAS a los que seguís creyendo que es posible, y mantenéis intacto el entusiasmo, que ya veremos que pasa al final!
- …y a los que no, ¿os dais cuenta de lo que os estáis perdiendo?
Un abrazo a todos, "piel de gallina" cuando leo vuestros mensajes !!!
(Buenos Aires, 10.01.2011 02:26 am)
Ignacio Chivite"