Karlos BMW
Curveando
- Registrado
- 18 Sep 2003
- Mensajes
- 13.458
- Puntos
- 113
Navegando por internet con el fin de buscar un método para endurecer la horquilla de mi K 10 RS 16 V, he encontrado este artículo bastante interesante. 
http://www.repuestosmotos.com.ar/autoreparaciones/cambio-retenes-liquido-horquilla.htm
Que trascribo.
CAMBIO DE LÍQUIDOS Y RETENES DE HORQUILLA
La suspensión delantera en las motocicletas actuales, está formada en la gran mayoría de los modelos por una horquilla telescópica, dotada de un sistema de retención hidráulico. Este tipo de horquillas, requieren un cierto mantenimiento para que su funcionamiento sea el más adecuado.
La horquilla tiene un muelle interior o exterior, que se encarga de mantener la posición normal de la suspensión delantera, al tiempo que absorbe el impacto provocado por los baches del terreno o las fuerzas de inercia. Sin embargo, es necesario frenar su oscilación para que el movimiento de compresión y extensión no se prolongue continuamente. Esto se realiza por medio de un mecanismo hidráulico, que funciona a base de hacer pasar un fluido más o menos viscoso, a través de unos orificios, en los momentos en los que la horquilla se encuentra en movimiento.
Los mismos problemas en todas las horquillas
De unas horquillas a otras, los sistemas hidráulicos son más o menos complicados, regulables y efectivos, pero en las motos de serie todas las horquillas plantean los mismos problemas. Dependiendo de la viscosidad del fluido, el movimiento queda más o menos frenado, y por tanto, las características de la suspensión delantera varía. Por este motivo, puede ser interesante sustituir el líquido hidráulico de la suspensión, no sólo cuando éste haya perdido sus propiedades debido al uso, sino incluso por motivos de gustos personales en cuanto a las suspensiones.
Las características que deben tener los aceites para horquilla, como habitualmente se conoce a estos lubricantes, es el de mantener la viscosidad con temperaturas altas y bajas, no crear espuma, ya que no ofrecería resistencia en el mecanismo de retención y, por último, ser lo más incompresible posible.
Cuando un aceite para horquilla pierde sus propiedades, el funcionamiento de la suspensión delantera cambia. El mecanismo hidráulico pierde eficacia y la retención es menor, por lo que se hace necesario cambiar el aceite. Un aceite demasiado denso o demasiado fluido, puede que no sea tampoco del agrado del usuario.
Horquillas rígidas para conducción deportiva
Normalmente, las motocicletas de serie tienen tarados suaves, que permiten circular por carreteras en mal estado y sobre baches, con un buen confort de marcha. Sin embargo, para conducción deportiva sobre asfalto liso, conviene disponer de una horquilla más rígida, con menos movimientos parásitos. Al utilizar un aceite más denso, el freno al movimiento del muelle es mayor, y la horquilla no sólo es más dura, sino también más lenta de reacciones.
Hay un punto que, en muchos modelos, puede considerarse como débil: la resistencia de los retenes que se intercalan entre la botella y la barra de la horquilla. Normalmente, la presión que se establece en el interior de la horquilla durante la compresión, es elevada y, además, el aceite tiende a salirse por este punto. Por este motivo, hay que impedir su salida con un retén de goma. Generalmente son retenes de uno o dos labios de forma circular y de construcción sencilla, por lo que su sustitución en caso de avería no es muy complicada, y evita numerosos problemas. Un retén en mal estado, permite la salida del aceite de la horquilla, lo que provoca un nivel inferior al deseado en su interior, de modo que el hidráulico pierde efectividad. Además, es bastante normal que todos los elementos cercanos a la suspensión, se impregnen de aceite. Entre ellos se encuentran los discos de freno que, al entrar en contacto con el aceite, pierden el coeficiente de rozamiento que necesitan, contaminando además las pastillas de freno, que pierden definitivamente su capacidad de frenada.
Varios tipos de aceites
En general, es posible encontrar en el mercado muchos tipos de aceite para horquillas. Los normales disponen de una viscosidad determinada, encontrándose desde los tipos más fluidos de SAE 5, hasta los más viscosos de SAE 30. En la actualidad hay también aceites multigrado, pero sobre todo se tiende a emplear un aceite monogrado [SAE 5/10/15/20/30], y se regula la resistencia del freno de la horquilla con el sistema interior, que abre y cierra los conductos hidráulicos. En este sentido, la aparición de las horquillas invertidas ha supuesto toda una revolución, no sólo por su mayor rigidez, sino también por sus mecanismos hidráulicos mucho más perfeccionados.
En cualquier caso, el fluido hidráulico de la suspensión delantera, es uno de los puntos que necesitan un mantenimiento periódico, tal y como indican los diferentes fabricantes. Su sustitución es muy sencilla, pero requiere gran exactitud. Bien mediante el volumen total, o bien mediante la altura a la que debe llegar el aceite, se puede realizar la operación de una manera sencilla y fiable.
Todas las horquillas de funcionamiento teléscópico hidràulico se basan en un mismo concepto hidromecánico. En el dibujo se puede apreciar los componentes mecánicos en la parte derecha y la circulación hidraúlica en la izquierda. Su mecanismo es sencillo y delicado.
DIAGRAMA SISTEMA DE INYECCION BMW K100
1. Botella de la horquilla. 2. Junta tórica. 3. Regulador de amortiguación de compresión. 4. Buje de la botella. 5. Frenillo. 6. Retén. 7. Aro de seguridad. 8. Guardapolvo. 9. Tapón superior de la barra. 10. Junta tórica. 11. Asiento de tope. 12. Espaciador 13. Asiento de resorte. 14. Muelle. 15. Barra. 16. Deslizador. 17. Tope final. 18. Tornillo sujección del mecanismo hidráulico. 19. Mecanismo hidráulico.
PROCEDIMENTO
El cambio del líquido hidráulico de la horquilla, y de los retenes si es necesario, representa uno de los cuidados imprescindibles en cualquier moto, bien sea de carretera o de campo. Dicho cometido conlleva un cierto trabajo, sencillo de realizar, pero un tanto laborioso.
Para ello no se precisan herramientas especiales; sin embargo, se deben cuidar todos los detalles al desmontar cada una de las barras de las horquilla. Antes de proceder a la reparación, es importante haber averiguado qué clase de líquido hidráulico se necesita, y comprobar si las dos barras utilizan el mismo.
En la sustitución de los retenes, se debe ser sumamente delicado al extraer los mismos, para no dañar los labios de la caja de las botellas de la horquilla.
Para sustituir los retenes y el aceite hidráulico de la horquilla, es conveniente quitar cada uno de los brazos. En primer lugar se quitan las pinzas de freno, luego la aleta y la rueda, y por último se aflojan los tapones superiores de cada barra, y luego los tornillos de las tijas.
Es conveniente sujetar en un tornillo de banco una oreja de la botella. Luego quitar el tapón superior, y posteriormente el tornillo inferior para el drenaje del líquido. Si se trata de una horquilla sin éste último dispositivo, habrá que sacar el aceite volcándola después de haber quitado el muelle central.
Para proceder con ortodoxia en el cambio del aceite, es necesario drenar perfectamente el mecanismo hidráulico, si el aceite a sustituir es del mismo tipo. En el caso de que sea diferente, hay que desmontar todo el interior y limpiarlo a fondo. Para ello, es preciso desenrroscar el tornillo central inferior y bloquear el componente hidráulico.
Para cambiar los retenes, se sujeta la botella al tornillo de banco, tal y como se ha dicho anteriormente. Luego se quita el frenillo que hay en la parte superior del alojamiento del retén, y se saca éste último por medio de un extractor, o destruyéndolo con la ayuda de unas pinzas, sin jamás apoyarse en el labio de la caja.
Una vez que se ha limpiado perfectamente el alojamiento, se lubrica con un poco de grasa, y se coloca el nuevo retén, con la ayuda de un botador que tenga la medida exterior del retén. En el proceso, es de vital importancia asegurarse de la perfecta verticalidad del punzón mientras se le golpea, para que el retén entre centrado.
Llegado el momento de rellenar la horquilla con líquido hidráulico, existen dos procedimientos según indicaciones del fabricante: o bien verter la cantidad indicada de líquido en cada barra, o por el contrario, habrá que comprimir la suspensión sin muelle, y rellenar hasta el nivel indicado. La presión neumática es lo último a realizar.

http://www.repuestosmotos.com.ar/autoreparaciones/cambio-retenes-liquido-horquilla.htm
Que trascribo.

CAMBIO DE LÍQUIDOS Y RETENES DE HORQUILLA
La suspensión delantera en las motocicletas actuales, está formada en la gran mayoría de los modelos por una horquilla telescópica, dotada de un sistema de retención hidráulico. Este tipo de horquillas, requieren un cierto mantenimiento para que su funcionamiento sea el más adecuado.
La horquilla tiene un muelle interior o exterior, que se encarga de mantener la posición normal de la suspensión delantera, al tiempo que absorbe el impacto provocado por los baches del terreno o las fuerzas de inercia. Sin embargo, es necesario frenar su oscilación para que el movimiento de compresión y extensión no se prolongue continuamente. Esto se realiza por medio de un mecanismo hidráulico, que funciona a base de hacer pasar un fluido más o menos viscoso, a través de unos orificios, en los momentos en los que la horquilla se encuentra en movimiento.
Los mismos problemas en todas las horquillas
De unas horquillas a otras, los sistemas hidráulicos son más o menos complicados, regulables y efectivos, pero en las motos de serie todas las horquillas plantean los mismos problemas. Dependiendo de la viscosidad del fluido, el movimiento queda más o menos frenado, y por tanto, las características de la suspensión delantera varía. Por este motivo, puede ser interesante sustituir el líquido hidráulico de la suspensión, no sólo cuando éste haya perdido sus propiedades debido al uso, sino incluso por motivos de gustos personales en cuanto a las suspensiones.
Las características que deben tener los aceites para horquilla, como habitualmente se conoce a estos lubricantes, es el de mantener la viscosidad con temperaturas altas y bajas, no crear espuma, ya que no ofrecería resistencia en el mecanismo de retención y, por último, ser lo más incompresible posible.
Cuando un aceite para horquilla pierde sus propiedades, el funcionamiento de la suspensión delantera cambia. El mecanismo hidráulico pierde eficacia y la retención es menor, por lo que se hace necesario cambiar el aceite. Un aceite demasiado denso o demasiado fluido, puede que no sea tampoco del agrado del usuario.
Horquillas rígidas para conducción deportiva
Normalmente, las motocicletas de serie tienen tarados suaves, que permiten circular por carreteras en mal estado y sobre baches, con un buen confort de marcha. Sin embargo, para conducción deportiva sobre asfalto liso, conviene disponer de una horquilla más rígida, con menos movimientos parásitos. Al utilizar un aceite más denso, el freno al movimiento del muelle es mayor, y la horquilla no sólo es más dura, sino también más lenta de reacciones.
Hay un punto que, en muchos modelos, puede considerarse como débil: la resistencia de los retenes que se intercalan entre la botella y la barra de la horquilla. Normalmente, la presión que se establece en el interior de la horquilla durante la compresión, es elevada y, además, el aceite tiende a salirse por este punto. Por este motivo, hay que impedir su salida con un retén de goma. Generalmente son retenes de uno o dos labios de forma circular y de construcción sencilla, por lo que su sustitución en caso de avería no es muy complicada, y evita numerosos problemas. Un retén en mal estado, permite la salida del aceite de la horquilla, lo que provoca un nivel inferior al deseado en su interior, de modo que el hidráulico pierde efectividad. Además, es bastante normal que todos los elementos cercanos a la suspensión, se impregnen de aceite. Entre ellos se encuentran los discos de freno que, al entrar en contacto con el aceite, pierden el coeficiente de rozamiento que necesitan, contaminando además las pastillas de freno, que pierden definitivamente su capacidad de frenada.
Varios tipos de aceites
En general, es posible encontrar en el mercado muchos tipos de aceite para horquillas. Los normales disponen de una viscosidad determinada, encontrándose desde los tipos más fluidos de SAE 5, hasta los más viscosos de SAE 30. En la actualidad hay también aceites multigrado, pero sobre todo se tiende a emplear un aceite monogrado [SAE 5/10/15/20/30], y se regula la resistencia del freno de la horquilla con el sistema interior, que abre y cierra los conductos hidráulicos. En este sentido, la aparición de las horquillas invertidas ha supuesto toda una revolución, no sólo por su mayor rigidez, sino también por sus mecanismos hidráulicos mucho más perfeccionados.
En cualquier caso, el fluido hidráulico de la suspensión delantera, es uno de los puntos que necesitan un mantenimiento periódico, tal y como indican los diferentes fabricantes. Su sustitución es muy sencilla, pero requiere gran exactitud. Bien mediante el volumen total, o bien mediante la altura a la que debe llegar el aceite, se puede realizar la operación de una manera sencilla y fiable.

Todas las horquillas de funcionamiento teléscópico hidràulico se basan en un mismo concepto hidromecánico. En el dibujo se puede apreciar los componentes mecánicos en la parte derecha y la circulación hidraúlica en la izquierda. Su mecanismo es sencillo y delicado.
DIAGRAMA SISTEMA DE INYECCION BMW K100
1. Botella de la horquilla. 2. Junta tórica. 3. Regulador de amortiguación de compresión. 4. Buje de la botella. 5. Frenillo. 6. Retén. 7. Aro de seguridad. 8. Guardapolvo. 9. Tapón superior de la barra. 10. Junta tórica. 11. Asiento de tope. 12. Espaciador 13. Asiento de resorte. 14. Muelle. 15. Barra. 16. Deslizador. 17. Tope final. 18. Tornillo sujección del mecanismo hidráulico. 19. Mecanismo hidráulico.
PROCEDIMENTO
El cambio del líquido hidráulico de la horquilla, y de los retenes si es necesario, representa uno de los cuidados imprescindibles en cualquier moto, bien sea de carretera o de campo. Dicho cometido conlleva un cierto trabajo, sencillo de realizar, pero un tanto laborioso.
Para ello no se precisan herramientas especiales; sin embargo, se deben cuidar todos los detalles al desmontar cada una de las barras de las horquilla. Antes de proceder a la reparación, es importante haber averiguado qué clase de líquido hidráulico se necesita, y comprobar si las dos barras utilizan el mismo.
En la sustitución de los retenes, se debe ser sumamente delicado al extraer los mismos, para no dañar los labios de la caja de las botellas de la horquilla.
Para sustituir los retenes y el aceite hidráulico de la horquilla, es conveniente quitar cada uno de los brazos. En primer lugar se quitan las pinzas de freno, luego la aleta y la rueda, y por último se aflojan los tapones superiores de cada barra, y luego los tornillos de las tijas.

Es conveniente sujetar en un tornillo de banco una oreja de la botella. Luego quitar el tapón superior, y posteriormente el tornillo inferior para el drenaje del líquido. Si se trata de una horquilla sin éste último dispositivo, habrá que sacar el aceite volcándola después de haber quitado el muelle central.

Para proceder con ortodoxia en el cambio del aceite, es necesario drenar perfectamente el mecanismo hidráulico, si el aceite a sustituir es del mismo tipo. En el caso de que sea diferente, hay que desmontar todo el interior y limpiarlo a fondo. Para ello, es preciso desenrroscar el tornillo central inferior y bloquear el componente hidráulico.

Para cambiar los retenes, se sujeta la botella al tornillo de banco, tal y como se ha dicho anteriormente. Luego se quita el frenillo que hay en la parte superior del alojamiento del retén, y se saca éste último por medio de un extractor, o destruyéndolo con la ayuda de unas pinzas, sin jamás apoyarse en el labio de la caja.

Una vez que se ha limpiado perfectamente el alojamiento, se lubrica con un poco de grasa, y se coloca el nuevo retén, con la ayuda de un botador que tenga la medida exterior del retén. En el proceso, es de vital importancia asegurarse de la perfecta verticalidad del punzón mientras se le golpea, para que el retén entre centrado.

Llegado el momento de rellenar la horquilla con líquido hidráulico, existen dos procedimientos según indicaciones del fabricante: o bien verter la cantidad indicada de líquido en cada barra, o por el contrario, habrá que comprimir la suspensión sin muelle, y rellenar hasta el nivel indicado. La presión neumática es lo último a realizar.
