Que cada uno saque sus propias conclusiones... :-/
Fuente: EFE y Diario ABC
El agente asesinado iba a cobrar una deuda de droga por encargo de un clan colombiano
MADRID. La investigación del homicidio del policía José Manuel Álvarez Pacios ha abierto la caja de los truenos. El agente trabajaba en su tiempo libre para una red de narcos colombianos -les facilitaba información, cobraba pagos y realizaba escuchas- que tenía a su vez tratos con varias familias gitanas para la distribución de la cocaína.Cuando fue asesinado se disponía a cobrar una deuda por un asunto de estupefacientes contraída por las víctimas con la organización suramericana, según confirmaron fuentes policiales.
Pacios no era el único funcionario corrupto, tal y como están evidenciando las pesquisas. Éste es el trasfondo del crimen ocurrido el pasado miércoles en el barrio de Vicálvaro por el que han sido detenidas tres personas, entre ellas un compañero del agente fallecido, José M. C., de 45 años, destinado en la comisaría de Leganés y quedan pendientes nuevos arrestos, según fuentes policiales. Uno de ellos podría ser el de otro agente que supuestamente participó en el «encargo» de Vicálvaro. José M. C. quedó anoche en libertad provisional sin fianza por orden del juez, mientras que la mujer que se entregó a la Policía, María de los Reyes E. L. ingresó en prisión como supuesta autora de un delito de homicidio.
El Consejo de Policía expulsa entre 10 y 15 policías al año por corrupción, tráfico de drogas u otros delitos, según explicó ayer el Sindicato Unificado de Policía (SUP), que instó a la Dirección General de Policía a reforzar los mecanismos de control interno para «perseguir a los agentes que participan en sobornos». Precisamente, el delegado del Gobierno, Constantino Méndez, se ha mantenido en estrecho contacto con los responsables policiales desde que ocurrieron los hechos y ha seguido de cerca los resultados de la investigación, según manifestaron fuentes cercanas.
Así lo indicó José Luis Morán, de la UFP, que añadió: «Somos los primeros interesados» en que se aclaren estos casos de corrupción, informa Efe. «Estamos muy sorprendidos por la actuación de los dos agentes. El CNP es un colectivo muy amplio, pero es muy triste que pasen estas cosas dentro de la policía», reconoció.
Fuente: EFE y Diario ABC
El agente asesinado iba a cobrar una deuda de droga por encargo de un clan colombiano
MADRID. La investigación del homicidio del policía José Manuel Álvarez Pacios ha abierto la caja de los truenos. El agente trabajaba en su tiempo libre para una red de narcos colombianos -les facilitaba información, cobraba pagos y realizaba escuchas- que tenía a su vez tratos con varias familias gitanas para la distribución de la cocaína.Cuando fue asesinado se disponía a cobrar una deuda por un asunto de estupefacientes contraída por las víctimas con la organización suramericana, según confirmaron fuentes policiales.
Pacios no era el único funcionario corrupto, tal y como están evidenciando las pesquisas. Éste es el trasfondo del crimen ocurrido el pasado miércoles en el barrio de Vicálvaro por el que han sido detenidas tres personas, entre ellas un compañero del agente fallecido, José M. C., de 45 años, destinado en la comisaría de Leganés y quedan pendientes nuevos arrestos, según fuentes policiales. Uno de ellos podría ser el de otro agente que supuestamente participó en el «encargo» de Vicálvaro. José M. C. quedó anoche en libertad provisional sin fianza por orden del juez, mientras que la mujer que se entregó a la Policía, María de los Reyes E. L. ingresó en prisión como supuesta autora de un delito de homicidio.
El Consejo de Policía expulsa entre 10 y 15 policías al año por corrupción, tráfico de drogas u otros delitos, según explicó ayer el Sindicato Unificado de Policía (SUP), que instó a la Dirección General de Policía a reforzar los mecanismos de control interno para «perseguir a los agentes que participan en sobornos». Precisamente, el delegado del Gobierno, Constantino Méndez, se ha mantenido en estrecho contacto con los responsables policiales desde que ocurrieron los hechos y ha seguido de cerca los resultados de la investigación, según manifestaron fuentes cercanas.
Así lo indicó José Luis Morán, de la UFP, que añadió: «Somos los primeros interesados» en que se aclaren estos casos de corrupción, informa Efe. «Estamos muy sorprendidos por la actuación de los dos agentes. El CNP es un colectivo muy amplio, pero es muy triste que pasen estas cosas dentro de la policía», reconoció.