Quisiera compartir una bonita experiencia que tuve ayer, cuando un amigo me invitó a que me pasase por el circuito de Fuensalida (Toledo) para ver correr a un chico, Adrián de 10 añitos, que es un auténtico crack. Jamás había estado anteriormente en ningún circuito de entrenamiento de niños y lo que vieron mis ojos me entusiasmó.
Llegué a lomos de mi morlaco, que dejé aparcado a un lado de la pista y fui a encontrarme con mi colega...de camino, me crucé con algún que otro grupito de chavales/as, todos con sus monos de cuero y botas desgastados, inmensos cascos integrales, era como si de Lilliput se tratase, motos pequeñas, chicos pequeños...contrastando con grandes carromatos a modo de talleres sobre ruedas, algo que nunca había visto y que en un principio me hacía sonreir gratamente. Mi amigo me presento a Carlos el padre de Adrián y enseguida conocí al chico en cuestión, un chaval de diez años con gafas de pasta, voz infantil...y pensé, ¿Este es el crack?
En seguida salió a pista a hacer unas tandas con su moto de 140cc. (creo recordar) y solo pude exclamar a los pocos segundos y después de verle trazar, tumbar...¡La madre que me parió!, jajajaja. Seguía con la sonrisa dibujada en mi rostro, pero ya era más de asombro que de hilaridad. Que vueltas daba, por Dios!!
Luego estuve viendo a otros chavales en minimotos, más peques aún...con planchas de plástico sujetas con cinta americana en los monos para no destrozar las arrastraderas...pero eso es tumbar!!!, decía yo....otros con pit bikes haciendo más de lo mismo...era como un circo de enanitos...motos aquí, motos allí, un chavalín de cuatro añitos haciendo caballitos con una moto eléctrica...Que gozada!!!!
Les dije a un grupito de peques que si se atrevían con mi moto y casi tengo que pararles porque ya se iban a por ella!! Que pundonor y que afición!!
Algunos se caían, pero se levantaban y seguían como si tal cosa, hasta Adrián tuvo una caída que pareció algo serio, pero el chaval a pesar del dolor en el pie y una mano, quiso seguir...en fin amigos, un verdadero recital de estos pequeños que quizás en años venideros , puedan cosechar grandes éxitos para el motociclismo español.
Un saludo y suerte peques!!
Llegué a lomos de mi morlaco, que dejé aparcado a un lado de la pista y fui a encontrarme con mi colega...de camino, me crucé con algún que otro grupito de chavales/as, todos con sus monos de cuero y botas desgastados, inmensos cascos integrales, era como si de Lilliput se tratase, motos pequeñas, chicos pequeños...contrastando con grandes carromatos a modo de talleres sobre ruedas, algo que nunca había visto y que en un principio me hacía sonreir gratamente. Mi amigo me presento a Carlos el padre de Adrián y enseguida conocí al chico en cuestión, un chaval de diez años con gafas de pasta, voz infantil...y pensé, ¿Este es el crack?
En seguida salió a pista a hacer unas tandas con su moto de 140cc. (creo recordar) y solo pude exclamar a los pocos segundos y después de verle trazar, tumbar...¡La madre que me parió!, jajajaja. Seguía con la sonrisa dibujada en mi rostro, pero ya era más de asombro que de hilaridad. Que vueltas daba, por Dios!!
Luego estuve viendo a otros chavales en minimotos, más peques aún...con planchas de plástico sujetas con cinta americana en los monos para no destrozar las arrastraderas...pero eso es tumbar!!!, decía yo....otros con pit bikes haciendo más de lo mismo...era como un circo de enanitos...motos aquí, motos allí, un chavalín de cuatro añitos haciendo caballitos con una moto eléctrica...Que gozada!!!!
Les dije a un grupito de peques que si se atrevían con mi moto y casi tengo que pararles porque ya se iban a por ella!! Que pundonor y que afición!!
Algunos se caían, pero se levantaban y seguían como si tal cosa, hasta Adrián tuvo una caída que pareció algo serio, pero el chaval a pesar del dolor en el pie y una mano, quiso seguir...en fin amigos, un verdadero recital de estos pequeños que quizás en años venideros , puedan cosechar grandes éxitos para el motociclismo español.
Un saludo y suerte peques!!