
-María, a ver si dejas de ponerme los cuernos que siempre que vengo de permiso me la estas pegando.
- Sí, Pepe, sí.
Pasa un mes y el militar vuelve a su casa y se encuentra a la novia con un enano en la cama y le dice:
-Pero María, ¿no me has dicho que ibas a dejarme de ponerne los cuernos?
-Sí, Pepe sí, pero poco a poco.
