Buenas tardes moteros:
La Cruz Verde era testigo de mi asistencia a la ruta.
Al final pudo ser.
Un lujo de día teniendo en cuenta las fechas en las que nos movemos.
Fresquito al principio, y mucho mejor después.
Todo ello aderezado por sal en polvo como para...tres bodas.
Y nos acompañaba un amigo que hacía mucho tiempo que no se dejaba ver, Aceitunero:
Hoy tocaba clásico.
Robledo de Chavela, Cebreros, Calas del Burguillo, Navaluenga, Navalmoral, y La Venta del Obispo.
Especialmente en este último tramo, desde Navalmoral a La Venta del Obispo, es donde nos encontramos con la mayor cantidad de sal.
Y se pusieron a ver sus motos:
Al solecito se estaba francamente bien:
¿Verdad J.P.?:
Y compañía:
Que sí mujer, que se está muy a gustito:
Y cada uno con la suya...me refería a las revolconas, claro:
Al sol mucho mejor:
Después de que Tino se terminara de vestir nos fuimos.
Volvimos por el mismo sitio ya que no nos fíabamos del estado de la carretera de Navalacruz.
Al llegar a Navalmoral, y a través del puerto del mismo nombre, nos dirigimos a Ávila.
Esta carretera también estaba hasta arriba de sal.
Después de llegar a la ciudad de las murallas, nos dirigimos por la M-505 hacia La Cañada, Las Navas del Marqués, Cruz Verde y Zarzalejo.
En la Cruz Verde nos dejó Aceitunero que tenía prisa por llegar a casa.
Si no hay torreznos es como si no hubíésemos salido de casa a montar:
Hasta al burro le da la risa de lo rico que están, y además, hoy, calentitos:
Y eso que el burro no los probó, claro.
Así de altaneros estábamos todos:
Hoy nos pusieron, también, unas costillitas riquísimas:
Y a despedirse:
Y esto fue todo amigos.
Como siempre, un placer rutear con todos vosotros.
Hasta la siguiente y que sea pronto.
V'ssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss