Empiezo por el final. El cambio de los amortiguadores originales Showa, por unos Ohlins, de dará un cambio bastante a mejor en el comportamiento de tu moto.
Dependiendo de tu presupuesto, encontrarás varios modelos de Ohlins, desde unos 750 € por amortiguador en la configuración más básica, que para el 90% de los que usamos GS/GSA son más que suficientes, hasta unos 1300 € la unidad en configuraciones de múltiples regulaciones, botella separada, etc. para sibaritas. La diferencia de prestaciones entre unos y otros creo que no merece la inversión y se nota muchísimo menos que el mero cambio de los originales Showa.
Pero no solo existe Ohlins. Puedes encontrar soluciones tan satisfactorias en rangos de precios que van desde los económicos, pero con buen resultado (son los que yo llevo), de la casa Hagon, por unos 375 € cada amortiguador, Technoflex también andan en ese rango. Hasta sistemas electrónicos al estilo del ESA con WP y Wilbers, que rondarán los 2.000 €.
Y por último hay otra solución a la que se puede recurrir, que es rectificar y mejorar el amortiguador original. En BMW dicen que no es reparable (lo sellan para que así sea), pero en un buen taller de suspensiones, lo abren y hacen reparable, te mejoran y cambian retenes, aceite y nitrógeno y te lo dejan mejor que nuevo, por unos 200 € todo incluido. La próxima vez que los repares ya solo cuesta unos 80/100 €. Tengo amigos que han recurrido a esta solución y están muy satisfechos.