Llevo tirado por el mundo desde 1.992, que no es poco si tenéis en cuenta que tengo 43 tacos.
Cuando se habla de la emigración de la juventud, del terrible esfuerzo que se realiza por parte de jóvenes (y jóvenas, jajajja) licenciados, preparados, etc que está habiendo para irse a trabajar a otros paises, fuera de sus comunidades autónomas, etc, me da la risa. Esto ha pasado, sigue pasando y pasará en nuestra Agrupación de Naciones (que parece ser que ya no se puede decir País, como lo hace Forges), puesto que somos especialistas en formar mano de obra altamente cualificada y preprada para la exportación, mientras que, y también somos especializados en esto, también somos una estupenda "fábrica" de "ni-nis", perrofalutas y todo tipo de especímenes que se han aprendido muy bien la famosa frase de "a mi que me den una casa".
Cuando veo a FAMILIAS ENTERAS en las cuales ni uno sólo de sus integrantes tiene un trabajo, el que sea, pero se las apañan para vivir 12 en una casa de 60 metros cuadrados con un subsidio "caritativo" del estado, algo se me revuelve en el estómago. No digo que todos sean iguales pero, pesan más los votos de unas elecciones que el sacar verdaderamente a todo un colectivo adelante y que sea productivo, no destructivo.
También considero que no debería existir tanta desigualdad como la que estamos viviendo actualmente, pero, cuando no te quedan más "bemoles" que "atarse los machos" y irse a currar en una plataforma petrolífera del mar del norte a 30 grados bajo cero, limpiando la mierda del petróleo que se queda pegada en las barandillas, si no eres un "mierda", pues vas y lo haces, y te cagas en la madre que parió a Boyer, Rita Barberá, Zapatero y todos los malnacidos que nos venden cada cuatro años.
Un gran amigo, Exguardaespaldas en IRAK, Pais Vasco (lo siento, en español es Pais Vasco no Euskadi, igual que Asturias que es Asturies) y otro sinfin de destinos altamente peligrosos considera que los algodones que hemos puesto en el culo de muchos jóvenes, sólo han valido para que ahora nos restrieguen po la cara esos mismos algodones.
OJO!!! No me refiero a toda la juventud, he contratado y contrato jóvenes (y jóvenas) altamente cualificados y no tanto, ansiosos por trabajar y dejarse la piel y los ojos en el trabajo y también he tenido que despedir a otros que, lo único que querían, era tomarse "unos meses de vacaciones en el trabajo "hasta tener para el paro".
