ADLER dijo:
gali, has visto lo que dice javier ullate, al respecto de calentar el pique:
http://www.elperiodico.cat/default....noticia_PK=492077&idseccio_PK=1006&h=
esta en catalan ,pero supongo que se entiende
Aqui en castellano....
Muy interesante...
Fuente:
http://www.elperiodico.com/default....&idnoticia_PK=492077&idseccio_PK=1006
Xavier Ullate: "No es bueno alimentar el pique Lorenzo-Pedrosa"
Este sabadellense era el fiel mecánico de Àlex Crivillé cuando el nen de Seva ganó el único título grande que tiene el motociclismo español. Ahora ha caído en sus manos otra perla, Jorge Lorenzo, y quiere disfrutarla.
Foto: EMILIO PÉREZ DE ROZAS MÁS INFORMACIÓN
Celoso de la F-1
ESPECIAL: Mundial de motociclismo 2008
EMILIO PÉREZ DE ROZAS
El esposo de Marga, el papá de Jordi (8 años) y de Claudia (3), se pasa 250 días al año alejado de su casa de Centelles. Ullate (Sabadell, 1967) empezaba a estar ya harto de esa vida pero le ha tocado trabajar con Jorge Lorenzo y, de pronto, siente la necesidad, la curiosidad, de aplazar su despedida del Mundial. Eso sí, le encantaría que las escuderías de motos, que siempre copian a las de la F-1, creasen equipos de mecánicos solo para los tests y entrenamientos. Así descansaría algo más.
--Para que se haga cargo del tipo de entrevista: todo el mundo dice que lo que hizo Jorge Lorenzo en Qatar, segundo en su debut en MotoGP, es fácil porque las motos de ahora no son como las quinientos.
--Perdón, ¿quién es "todo el mundo"?
--No sé, la opinión generalizada del paddock es que estas ochocientos son más fáciles de pilotar.
--Las actuales MotoGP, con control de tracción y una sofisticada electrónica, no se encabritan tanto como aquellas quinientos y, por tanto, hay menos posibilidades de que escupan al piloto por las orejas como ocurría hace años. También es verdad que derrapan mucho menos...
--Luego tienen razón quienes....
--Déjeme acabar, por favor. Que tengan control de tracción o que no derrapen tanto no significa que se lleven con una mano. Tienen un mon- tón de caballos, centenares, y todos, todos, están en el puño del gas, así que no es fácil controlar esa potencia. Melandri, por ejemplo, acaba de batir el récord de velocidad, el pasado domingo, en Doha, al coronar la recta de Losail a 334 km/h. Ya ve, no son un juguete.
--Es decir, que lo que hizo Lorenzo tiene muchísimo mérito.
--Muchísimo mérito, sí. Como lo que hizo Dani Pedrosa al ser segundo en su debut en la categoría reina en Jerez o cuando, en su segundo GP en quinientos, Crivillé logró, en Malaisia-92, el primer podio español en la máxima cilindrada. Solo los auténticos campeones son capaces de convertir lo difícil en fácil. Lo hacen tan sencillo que parece chupao.
--El riesgo, pues, es el mismo ahora que antes, y la dificultad, idéntica.
--Una cosa es ir de carreras y otra, correr. Como tampoco es lo mismo conducir que pilotar. El precio del podio es el mismo que antes: carísimo. ¿Sabe por qué? Porque la victoria no se logra en la recta: se consigue frenando más tarde que el otro, teniendo un paso por curva más veloz que el otro y abriendo gas a la salida de la curva antes que el otro. Y es en ese momento, en el instante de retorcer la muñeca mientras la moto sigue inclinada a dos centímetros del asfalto, cuando se descubre a los verdaderos campeones.
--Y Lorenzo y Pedrosa lo son.
--Lo dice su palmarés y están en dos de los tres mejores equipos del Mundial. Y, créame, no se llega ahí por enchufe. Si Yamaha y Honda han escogido a Lorenzo y Pedrosa para entregarles su mejor moto es porque los consideran capaces de ganar.
--¿No teme que estos dos muchachos, que parecen seriamente picados, acaben chocando en la pista?
--Le voy a contar una historia y luego, si quiere, le respondo. Yo viví, en 1996, el día a día de aquel memorable pique entre Mick Doohan y Alex Crivillé. Recuerda cómo acabó, ¿no? Exacto, ambos chocaron en la última vuelta del último GP de la temporada, en Australia. Pues bien, gracias a Dios, no se hicieron daño, pero sé, porque lo he hablado con los dos, que ambos están arrepentidos de toda aquella historia. Que Lorenzo y Pedrosa choquen en la pista no beneficia a nadie. Créame, a nadie.
--Pero ¿cree o no que chocarán?
--Yo lo único que creo es que no es bueno alimentar el pique Lorenzo-Pedrosa, nada bueno. Sé que hay gente que piensa que eso anima las carreras y les da más morbo. Pero, no, se equivocan. Esto no es un Barça-Madrid. Estos jóvenes se juegan la vida a más 300 km/h y no tiene sentido que contribuyamos a calentar el ambiente. Conmigo, desde luego, que no cuenten. La rivalidad debe existir entre el semáforo verde y la bandera de cuadros. Lo demás no tiene sentido. Mire cómo acabó el pique Hamilton-Alonso. Uno perdió el título y el otro ha tenido que cambiar de equipo, a peor.
--¿Cree que todo el mundo actuará con su misma sensatez?
--Yo no soy nadie. No tengo ningún poder sobre Jorge ni sobre Dani. Para mí son dos extraordinarios pilotos. Yo trabajo en Yamaha, y Yamaha ha fichado a Lorenzo. Me debo a Jorge, pero jamás olvidaré el día en que me jugué el tipo al dejar que Dani, que entonces tenía 16 años y corría su primer Mundial, se subiera a la quinientos de Álex en nuestro box. Tenía que haberle hecho una foto. Él tal vez no se acuerde, pero yo jamás olvidaré ese instante. Se asomó por la puerta trasera del box, miró la moto, se le iluminó la cara y le pregunté "¿Quieres subirte?". "¿Puedo?", me respondió. Y lo subí, ¡vaya si lo subí! El domingo, cuando estaba con ellos bajo el podio, pensé: "¡Qué suerte tenemos los españoles de tener a estos dos chavales!".
--Por cierto, ¿qué hace subido en esa Derbi de 80cc de 1987?
--Me la acaba de traer Álex para que se la restaure sin prisas. Es mi hobby entre carrera y carrera. Restauro motos clásicas. Con esta corrió el campeonato de Europa. La encontró tirada en una masía, la compró y ahora quiere restaurarla para guardarla como si fuese un cuadro. No es la primera que tiene. Hay gente que las considera tan valiosas como un picasso. Bueno, tal vez no tanto.
