Ayer leí parte de este post y me tuve que ir antes de acabármelo, pero ya tenía más o menos clara mi opinión. Hoy ha cambiado un poco. Ayer por la mañana estaba haciendo unas gestiones por Valencia y en la avenida del Puerto salgo primero de un semáforo. Creo que hay como 5 carriles. Yo voy por el segundo de la derecha para evitar sorpresas de coches que salen de cruces, puertas que se abren... ya sabeis. A mi altura y yendo primero, los 5 carriles para mí sólo. Si no corres mucho los semáforos se van poniendo verdes a tu paso, así que una vez conseguida la velocidad de crucero, si no te para el tráfico te haces la avenida de tirón. Pues viene un chaval en camiseta y pantalón corto con su scúter de 49 y se me pone al lado. Y cuando digo al lado, digo que yo voy por medio de mi carril y se pone pegado a mí en mi mismo carril :-?. ¿qué necesidad tiene de pegarse a mí si no hay nadie en los otros 4 carriles? le pito por si no me ha visto -que es imposible pues casi está debajo mío-. Ni caso. Ni me acaba de adelantar -que puede de sobra- ni corrige trayectoria. Pegado. Llegamos a un coche lento en mi/nuestro carril y yo lo paso por la derecha y él por la izquierda y acelero un poco para volver a situarme en medio de mi carril, espero que solo, pero no. Se repite la situación >

hasta el siguiente semáforo. Como se va a poner verde y el chaval insiste en ir a un palmo mío por mi mismo carril, preparo estrategia. Por la derecha entra una moto entre dos coches, pero no las dos. Por la izquierda le toca frenar. No me muevo, aguanto a ver si lo dejo clavado, no cede, seguimos acercándonos, se me echa encima, casi me mete el manillar debajo del mío

. casi entramos los dos

acelero y paso yo primero antes de chocarnos ambos contra los otros coches. No doy crédito. Vuelve a pegarse y ya le pego dos voces, le hago así con la mano (gesto de apártate, pero sin tocarle y éso que llegaba a tocarle el hombro perfectamente) para que se aparte y me suelta que si me creo que la avenida es mía???????? Y le pregunté si quería llegar a casa con una hostia :-X. Hasta yo me sorprendí de oírme. Si pillamos el semáforo creo que se la lleva, porque no se apartaba. Era como si buscase mi sombra y allí estuviera fresquito, porque mientras le daba voces aquél estaba a menos de un palmo mío y achuchando. Vale, pues guerra. Meto mi manillar encima del suyo a ver si le gusta más. Creo que se asustó al ver que no se salía con la suya y encima jugaba a su juego, con lo que por fin se puso en el otro carril, giró a la izquierda y yo seguí recto con un cabreo interesante. Es que con ese escúter ni me hubiera movido, pero yo le encalo. No entiendo esa agresividad e insistencia en molestar, en intentar apartar a otro, en buscar gresca, en intentar encabronar a alguien a propósito. Luego éste se compra un coche y te puedes imaginar. Y con un todoterreno ni te lo puedes imaginar. Increíble.
Por éso digo que hasta ayer pensaba en agresividad al volante en otros términos. A mí se me pueden echar encima, puedo entender que no me han visto (después de tantos años ya sé que no miran o que si sólo ven una moto, pueden salir igual) y puedo entender que la carretera o la calle son pequeñas junglas, pero hay actitudes y actitudes y una cosa es no te he visto y otra es jugar a ver si te saco de tu carril durante cientos de metros a base de ir invadiendo y casi tocándote. Me parece que éste juega a éso contra motos grandes que le dan paso por no meterse en follones y él se sentirá hasta importante haciéndolo, hasta que se ha encontrado con alguien que no le ha dejado jugar. No sé, hasta yo me extrañé de mi respuesta, pero cuando pasas unos 4 semáforos con un gilipollas achuchándote así, hasta el más tranquilo creo que acaba haciendo algo que no quiere hacer. Yo no pensaba parar, ni podía irme acelerando porque sería pillar los semáforos en rojo, ni le pensaba dejar que se saliera con la suya de sacarme de mi carril a propósito, pero me alegro de que se fuera en otra dirección >

. Me alegro por él y por mí :-X
No sé si me puse a su altura, ni qué pensarán los coches que llevábamos detrás, ni si debí dejarle pasar a la primera. A mí no me gustan esas formas en la carretera. No me gustan nada y si nadie le para los pies a tiempo al chaval ése, acabará liándola fea. Espero que no. >
