D
Dr._Infierno
Invitado
Esto se ha convertido en una discusión bizantina, pero a base de andar por las nubes se introducen conceptos que pueden perjudicar la progresión y la seguridad del motorista. Por eso tengo que hacer, una vez más, algún comentario al respecto.
En primer lugar no existe ningún antagonismo entre conducir por instinto y el conocimiento consciente de la técnica de conducción. Se puede conducir por instinto muy bien si el piloto está dotado para ello. ¿Significa esto que no conduce con la técnica adecuada? Obviamente no. Si pilota muy bien, es que realiza todas las maniobras de la moto de manera correcta... No las habrá leído y no será consciente de ellas, pero las implementa... de lo contrario no pilotaría bien. Bueno, primera dicotomía aclarada. Pero esto no se queda aquí, porque la pregunta que nos viene a la mente de inmediato es: ¿Está dotada la mayoría de la gente con esas habilidades que permiten conducir la moto muy bien, es decir, sin ser conscientes de lo que hacen? Lo que yo observo es que no. En la mayoría de los motoristas veo muchos defectos de técnica. Lo excepcional es que conduzcan de forma perfecta. Y no se trata de la velocidad. Muchos de ellos conducen más rápido que yo... pero sigo viendo sus defectos técnicos. Ellos no lo saben, pero si los corrigieran no solo podrían ir aún más veloces, sino -lo que es más importante-, más seguros.... y son gente que puede que lleven ya muchos años y muchos km a sus espaldas y es que los defectos adquiridos son muy difíciles de erradicar... cuanto más si no se adopta una actitud de superación a través del conocimiento. Por muchos kilómetros y kilómetros que se hagan: son kilómetros probablemente estériles, porque repiten una y otra vez los mismos defectos. El motorista progresa a base de mejorar reflejos y coordinación, pero los defectos de técnica le imponen un techo insuperable... cuando no un peligro en su seguridad. Antes o después, esos defectos le llevarán a una caída, sobre todo si en un día aciago se le cruzan los cables y decide aumentar velocidad a base de puño, en vez de a través de la perfección técnica.
En segundo lugar, no existe antagonismo entre la sensibilidad del piloto y la técnica de conducción. La primera es necesaria para percibir las necesidades de la moto y la segunda es lo que permite dar respuesta a esas necesidades. Esta respuesta se puede hacer de manera instintiva o a través de un conocimiento consciente de la técnica, lo que nos lleva de nuevo a las consideraciones que he tratado en el primer párrafo.
Por último nos queda la pregunta de si es suficiente la experiencia- sin los aditivos del conocimiento- para alcanzar la perfección del pilotaje de una moto. De nuevo aquí entran en juego las cualidades innatas de cada piloto: los genéticamente dotados alcanzarán la perfección... pero la inmensa mayoría se quedara a medio camino. La razón es que con la experiencia se logra vencer de forma inconsciente muchos problemas técnicos, generalmente los más obvios.... pero aquellos problemas enrocados en ideas preconcebidas, son imposibles de superar si no se rompe la cadena que los une a lo mas profundo de la psicología del piloto... Y la única herramienta que puede cortar esa cadena es el conocimiento consciente de la técnica.
¿Porqué no utilizamos nuestra capacidad de pensar y entender para mejorar y perfeccionar lo que, por instinto, Dios no ha dado? Tan absurdo es negar el instinto, como negar el conocimiento. Ambos se complementan y, juntos, forman un equipo formidable de apoyo a nuestra progresión como motoristas.
Desde aquí no podemos ayudar al instinto de cada motorista, ya que el piloto cuando se encuentra con su instinto está solo. Pero si podemos darle conocimiento, que es la parte transferible de ese binomio. Proporcionando conocimiento, ayudamos a su seguridad. Es todo lo que podemos hacer… que no es poco.

En primer lugar no existe ningún antagonismo entre conducir por instinto y el conocimiento consciente de la técnica de conducción. Se puede conducir por instinto muy bien si el piloto está dotado para ello. ¿Significa esto que no conduce con la técnica adecuada? Obviamente no. Si pilota muy bien, es que realiza todas las maniobras de la moto de manera correcta... No las habrá leído y no será consciente de ellas, pero las implementa... de lo contrario no pilotaría bien. Bueno, primera dicotomía aclarada. Pero esto no se queda aquí, porque la pregunta que nos viene a la mente de inmediato es: ¿Está dotada la mayoría de la gente con esas habilidades que permiten conducir la moto muy bien, es decir, sin ser conscientes de lo que hacen? Lo que yo observo es que no. En la mayoría de los motoristas veo muchos defectos de técnica. Lo excepcional es que conduzcan de forma perfecta. Y no se trata de la velocidad. Muchos de ellos conducen más rápido que yo... pero sigo viendo sus defectos técnicos. Ellos no lo saben, pero si los corrigieran no solo podrían ir aún más veloces, sino -lo que es más importante-, más seguros.... y son gente que puede que lleven ya muchos años y muchos km a sus espaldas y es que los defectos adquiridos son muy difíciles de erradicar... cuanto más si no se adopta una actitud de superación a través del conocimiento. Por muchos kilómetros y kilómetros que se hagan: son kilómetros probablemente estériles, porque repiten una y otra vez los mismos defectos. El motorista progresa a base de mejorar reflejos y coordinación, pero los defectos de técnica le imponen un techo insuperable... cuando no un peligro en su seguridad. Antes o después, esos defectos le llevarán a una caída, sobre todo si en un día aciago se le cruzan los cables y decide aumentar velocidad a base de puño, en vez de a través de la perfección técnica.
En segundo lugar, no existe antagonismo entre la sensibilidad del piloto y la técnica de conducción. La primera es necesaria para percibir las necesidades de la moto y la segunda es lo que permite dar respuesta a esas necesidades. Esta respuesta se puede hacer de manera instintiva o a través de un conocimiento consciente de la técnica, lo que nos lleva de nuevo a las consideraciones que he tratado en el primer párrafo.
Por último nos queda la pregunta de si es suficiente la experiencia- sin los aditivos del conocimiento- para alcanzar la perfección del pilotaje de una moto. De nuevo aquí entran en juego las cualidades innatas de cada piloto: los genéticamente dotados alcanzarán la perfección... pero la inmensa mayoría se quedara a medio camino. La razón es que con la experiencia se logra vencer de forma inconsciente muchos problemas técnicos, generalmente los más obvios.... pero aquellos problemas enrocados en ideas preconcebidas, son imposibles de superar si no se rompe la cadena que los une a lo mas profundo de la psicología del piloto... Y la única herramienta que puede cortar esa cadena es el conocimiento consciente de la técnica.
¿Porqué no utilizamos nuestra capacidad de pensar y entender para mejorar y perfeccionar lo que, por instinto, Dios no ha dado? Tan absurdo es negar el instinto, como negar el conocimiento. Ambos se complementan y, juntos, forman un equipo formidable de apoyo a nuestra progresión como motoristas.
Desde aquí no podemos ayudar al instinto de cada motorista, ya que el piloto cuando se encuentra con su instinto está solo. Pero si podemos darle conocimiento, que es la parte transferible de ese binomio. Proporcionando conocimiento, ayudamos a su seguridad. Es todo lo que podemos hacer… que no es poco.
