En la epoca del imperio romano, un cristiano es arrojado a la arena del circo donde un león le espera. El cristiano corre del animal que le persigue, pero pronto se ve agotado; se para, se arrodilla, pone los brazos en cruz y dice:
- ¡Señor, convierte a este león en un cristiano!.
El leon, de pronto, se para, se arrodilla, eleva su enorme cabeza al cielo y dice:
- Señor, bendice los alimentos que vamos a tomar.
- ¡Señor, convierte a este león en un cristiano!.
El leon, de pronto, se para, se arrodilla, eleva su enorme cabeza al cielo y dice:
- Señor, bendice los alimentos que vamos a tomar.