Para este verano tenía previsto hacer mi aventura en moto por Croacia, sin embargo antes quería visitar el Stelvio y Venecia. Mi colega de aventuras, Antonio, opinaba que diez días (tiempo disponible para este viaje) era poco, y que apenas podríamos estar en Croacia. Así que la solución fue dividirlo en dos partes: este año visitaríamos los Alpes y al siguiente iríamos a Croacia, pasando por Venecia.
Yo soy de confeccionar la ruta con meses de antelación, así consigo combatir los meses de espera y empezar a divertirme antes del comienzo de viaje. Este cambio de planes se produjo a última hora y no nos dio tiempo a elaborar un nuevo programa aventurero. Encontramos una web: www.moterus.es, en la que uno de los foreros, “Nomar”, había confeccionado una ruta de diez días por los Alpes: “De los Alpes al cielo”: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo El problema era que ellos salían a primeros de julio, y nosotros teníamos la segunda quincena de junio. Así que tuvimos que ir por libre. Mientras yo me fui una semana a caminar desde Irún a Bilbao haciendo el Camino de Santiago, mi colega Antonio se ocupó de la logística y reservó los hoteles en: Zaragoza, Apremont (Francia), Lavorgo (Suiza), Grosio (Italia), Aix-en-Provence (Francia) y Lérida. Alojamientos que resultaron la mar de acertados y totalmente recomendables. Al final os pondré los nombres y precios de los mismos, por si pueden ser de interés para alguno.
DIA 1: Viernes 18 de junio de 2010 –MADRID-ZARAGOZA- 325 Km
Estuve toda la mañana deseando que llegara el final del curre para ir a casa y salir con mi GS1200 y mi colega Antonio rumbo a Zaragoza, ya que al día siguiente tendríamos que hacer casi mil kilómetros, muchos más si no aprovechábamos la tarde del viernes. Esta primera etapa la hicimos cargados de ilusión y pensando en la del día siguiente. Por tanto etapa consumada sin novedad, jeje.
DIA 2: Sábado 19 de junio de 2010 –ZARAGOZA-APREMONT- 980 Km
Nos levantamos a las siete de la mañana y nos tomamos unos batidos y unos bollos para no perder tiempo, y aprovechar más adelante otra paradita para descansar y tomar un tentempié más jugoso. Iniciamos la salida por la NII ya que el resto del día circularíamos por autopista. Esta etapa la hicimos con numerosas paradas, de manera que ambos coincidimos en que los 980 km no nos habían agotado tanto como esperábamos, sobre todo para mi colega, que suponía batir su record personal de km recorridos en moto en un solo día. El tomtorrón fue decisivo, pues nos llevó hasta escasos metros del hotel (las coordenadas que nos facilitó la reserva de hotel correspondían al edificio de la iglesia), de forma que a las ocho de la tarde estábamos en destino (en Apremont cerca de Chambéry). Las motos se quedaron en la calle bajo un voladizo, y cenamos unas pizzas. Muy agradable el hotel, y la habitación con calefacción, aunque un poco pequeña, acogedora.
DIA 3: Domingo 20 de junio de 2010 –APREMONT-Alpe d`Huez-Col Galibier-
APREMONT- 315 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-2
La ruta que había diseñado “Nomar” era circular y para nosotros era desconocida, no sabíamos realmente cómo serían las carreteras y paisajes por los que íbamos a pasar. La salida de Apremont es por un laberinto de pueblecitos rodeados de verde, pero que el tomtorrón afortunadamente sabe descifrar. Así llegamos hasta el Alpe d´Huez, aunque nada más llegar empezó a caer aguanieve y salimos de allí a toda prisa sin hacernos ni una foto, no fuera que nos quedáramos atrapados. Bella la subida hasta el alto, y la estación de esquí también lo parecía. Continuamos la ruta y decidimos subir a Les 2 Alpes, pues en el cruce vimos que bajaban muchos coches con remolques de bicicletas MTB con letreros de competición, y queríamos ver si el espectáculo todavía seguía. Llegamos a una estación de esquí donde había circuitos de MTB por las laderas de la montaña y por las que se divertían un montón de ciclistas. A parte también estaban desmontando un escenario sobre el que se debían de haber entregado los trofeos. Resulta interesante ver cómo se adaptaba la estación para las épocas estivales sin nieve por la que deslizarse.
Después continuamos la ruta siguiendo las instrucciones introducidas en el tomtorrón, de manera que comenzamos a subir el Col Galibier y en la cima se apreciaba una nube, y mi colega Antonio me decía por el Cardo que esa nube presagiaba malos augurios, mientras que yo por el contrario iba riéndome y disfrutando con la subida entre laderas nevadas, y es que pensaba que en pleno mes de junio no iba a nevar. Pero mi gozo en un pozo, pues llegando al alto comenzó a nevar y la carretera empezaba a cubrirse por completo. La situación pintaba mal, había además niebla, menos mal que en lo alto llegamos a ver unas rodadas y tratamos de seguirlas, aunque a la entrada de un túnel me salí de ella y la rueda trasera patinó, pero afortunadamente logré dominar mi montura. Poco a poco fui pasando de la risa de incredulidad a la seria preocupación, pues al final los presagios de mi colega se estaban cumpliendo. Por fin a la salida del túnel la carretera empezó a descender y a estar nuevamente sin nieve y todo quedó en un susto, y una vez más sin poder hacernos fotos.
Este día estuvo un tanto deslucido por el tiempo, con ratos de lluvia e incluso de nieve. Así que nos marchamos al hotel y a cenar algo calentito.
DIA 4: Lunes 21 de junio de 2010 –APREMONT-LAVORGO- 345 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-3
Tras dos noches en Apremont partimos hacia Suiza. El día aunque nublado, daba la impresión de que quería mejorar. Un tramo de la carretera estaba cortado por obras, y tuvimos que dar un rodeo subiendo y bajando una montaña, toda rodeada de pinos y con poca circulación, permitiéndonos disfrutar alegremente. Como íbamos a pasar por el Mont-Blanc, me habían recomendado subir en el funicular, pues desde allí había unas vistas maravillosas. Sin embargo el día seguía completamente cubierto y la cima estaba igualmente cubierta, por lo que no merecía la pena subir.
Seguimos ruta y en un descenso nos encontramos con una preciosa vista del vallée du Rhône:
Seguimos la ruta y nos hicimos fotos invernales como estas:
Nuestro alojamiento al no estar en Göschenen, sino en Lavorgo, un tranquilo pueblo donde Antonio encontró un hotel acogedor, nos desviamos de la ruta prevista por “Nomar” y subimos por el Passo della Novena. Eso sí, antes repostamos en una gasolinera donde te servías tu mismo, para lo que previamente tenías que introducir la tarjeta de crédito. El caso es que te podías servir un máximo de 100 euros, y antes de echarme la gasolina recibí en mi móvil un mensaje que decía que había realizado un pago de 110 euros en la gasolinera, ¡me cagü…! Que si quería reclamar que llamara a un teléfono que me salía en el mensaje. El caso que el tique que me salió indicaba que había repostado unos veinte euros. Decidí no llamar porque me imaginé que primero retienen un dinero de la tarjeta y después cuando terminas de repostar es cuando te cobran la cantidad exacta. Si llamaba, entre hablar con la maquinita que seguramente me saldría, marcar los numeritos, y demás inventos comerciales, seguro que iba a pagar en teléfono los “cien pavos”, así que decidí esperar a llegar a casa y ver el resultado, que finalmente fue como os digo, me cobraron sólo la cantidad repostada.
DIA 5: Martes 22 de junio de 2010 –LAVORGO-S.Gotardo-Furkapass-Grimselpass-
Sustenpass-LAVORGO- 342 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-4
El día comenzó conociendo el famoso puerto de San Gotardo. Quedamos prendados con él. Carretera anchísima, buen asfalto y vistas de lujo. Ciertamente empezaba a disfrutar con las curvas, me notaba cada día más sueltillo conduciendo por ellas. Además podíamos ver la carretera antigua empedrada:
Al ser temprano la mañana estaba fresquita, creo recordar que unos 8 ó 10 grados, pero con el traje de invierno estábamos fenomenal. Continuamos disfrutando en el descenso y poco después volvíamos a encontrarnos con otro encantador puerto, el Furkapass:
Y un poco más adelante otro puerto más, el Grimselpass:
Todavía no llevábamos ni la mitad del recorrido y estábamos en una nube, disfrutando como niños. Además por la carretera se veían pocos vehículos, más motos que coches, y todos circulaban sin ir “pasados de vueltas”, sino que por el contrario todos disfrutábamos con relax de los paisajes y de las curvas, que se sucedían una tras otra más abierta, más cerrada, enlazadas… para mi gusto todo un paraíso para curvear con moto. Después llegamos a Interlaken, rodeado por los lagos de Thun y Brienz. El ritmo se interrumpió porque es una autovía la que los circunda, y después de las carreteras de curvas que habíamos recorrido, la autovía hacía que las echáramos de menos, pero el lago desde luego que muy bello, incluso aprovechamos para comer el picnic junto a él:
Tras rodear el lago volvimos a nuestras añoradas carreteras de montaña para subir el Sustenpass y regresar al hotel. Vimos que el San Gotardo estaba cerrado y tuvimos que seguir por la autovía, y nosotros no habíamos sacado la pegatina que permite circular por ellas durante un año, ya que en principio las rutas que íbamos a seguir no las utilizaban, con lo cual estábamos un poco moscas por si la poli nos recetaba algún supositorio, jeje. Después entramos en un maldito túnel, que tenía 17 km de longitud, con el traje de invierno a una temperatura exterior de 22 grados, llegando a alcanzar dentro del túnel los 34 grados. Teníamos los forros pegados a la piel, y sudábamos como pollos asados, le dije a Antonio que si quería podíamos parar porque a él le gusta echar el aceite a la cadena cuando está caliente, era el momento, pues tanto la cadena como el bote de aceite estaban en su punto. Nos reímos un montón porque aquello era una sauna.
DIA 6: Martes 23 de junio de 2010 –LAVORGO-Zurich-Cataratas del Rhin-LAVORGO- 430 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-5
Nos levantamos temprano porque hoy la ruta era más larga y además discurría por Lucerna y Zurich, y nos imaginamos que hallaríamos una mayor densidad de tráfico que nos ralentizaría la marcha. Además nos preguntábamos que nos habría preparado hoy “Nomar”, pues aún sin conocerle cada día que pasaba estábamos más entusiasmados con sus rutas, día a día nos sorprendía. Nuevamente volvimos a subir el San Gotardo, pues la ruta partía a partir de él. Sin embargo hoy me decidí a probar por la carretera empedrada, ya que los adoquines estaban secos, mientras que mi colega prefirió esperarme arriba en el museo subiendo por la nueva. Fue emocionante circular por los adoquines, además en las zonas donde estaban mal, habían asfaltado el tramo. Con los adoquines mojados sinceramente si lo vi más arriesgado. Al final no llegué a subirlo entero porque al llegar a un cruce me equivoqué de dirección y volví a salir a la carretera nueva. Pero la sensación que me reportó el tramo que subí fue fabulosa e inolvidable. Además otra cosa curiosa es que en las montañas se observaban decenas de soldados y vehículos militares, como numerosos búnkeres abiertos en las rocas. Me preguntaba si sería allí donde tendrían guardadas las divisas de los megacorruptos y de los evade-impuestos, jeje. El museo no lo vimos porque la etapa era demasiado larga como para entretenernos más, y parecía que iba sobre la historia del San Gotardo.
Renunciamos a ver Lucerna (ciudad por cierto bella por visitarla durante otro viaje) porque entonces la ruta subía ya a más de quinientos km. Nos resultaba también muy curioso que en Suiza todas las travesías urbanas que atravesábamos carecían de semáforos, con los pasos de cebra tenían suficiente, los conductores cedían el paso tan pronto veían a un peatón con intención de cruzar, y por supuesto nosotros contribuimos a mantener ese comportamiento ejemplar.
Las vistas de postal continuaban sucediéndose:
Incluso observamos publicidad preventiva como ésta:
De camino a Zurich nos encontramos con numerosos tramos en obras, que tenían un carril cortado y entonces si vimos aparecer los semáforos, por lo que junto al lago Lucerna nos tomamos un respiro:
A medida que nos aproximábamos a Zurich el ritmo se ralentizaba por un mayor tráfico y además el calor empezaba a apretar, y con el traje de invierno íbamos empapados de sudor. Una vez superada la ciudad y tras continuar la ruta, nos salimos de Suiza y entramos en Alemania, un trámite en el que ni siquiera nos pararon los policías de la frontera. Poco después volvimos a entrar en Suiza, igualmente sin detenernos en la aduana fronteriza. Y por fin llegó nuestro ansiado objetivo, las cataratas del Rhin:
Fue como encontrar un anhelado oasis, donde pudimos quitarnos las chaquetas y comer fresquitos, ya que las cataratas están rodeadas de un parque con bancos y sombras desde los que la vista se deleita.
El regreso lo hicimos por Whinterthur, y atravesar esta ciudad nos costó un rato, debió de coincidir con la hora de salida del curre, y entre el calor que hacía y el calor de la poderosa, empezábamos a estar ya un poco hartos de la Ruta. Una vez atravesada la ciudad, el traficó disminuyó de intensidad y finalmente llegamos al hotel, y aunque ciertamente no había tenido nada que ver con las etapas anteriores, si llegamos a la conclusión de que el salto nos había gustado y de que había mereció la pena el esfuerzo y la sudada, jeje.
DIA 7: Miércoles 24 de junio de 2010 –LAVORGO-GROSIO- 278 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-6
Tocaba despedirnos de Suiza y entrar en Italia, era el día de la antesala de nuestra anhelada subida al Stelvio. Un día más nos tocaba subir el San Gotardo y en esta ocasión para despedirnos de él. La anécdota estuvo protagonizada por una retención en la subida, y que se debía a que estaban fotografiando a un trailer en una curva con el fondo de las montañas, al parecer para un anuncio publicitario. Mientras tanto me entretuve en grabar a un grupo de Porsches que aguardaban a subir, así como con un simpático soldado con una GS650 con el que nos hicimos unas fotos:
Después “Nomar” volvió a sorprendernos gratamente con la subida a Oberalpass:
Otro aspecto que nos resultaba curioso es que nos cruzábamos en numerosas ocasiones con vehículos de época, y no me extraña porque los paisajes invitaban a regocijarse con ellos:
“Nomar” había diseñado una ruta que cada vez nos gustaba más, y cuando menos lo esperábamos nos volvía a deleitar con postales como estas, tomadas en el Bernina:
Notamos que habíamos entrado en Italia porque el tráfico era más intenso, los conductores tenían una conducción más agresiva y veloz, y los paisajes no tenían la belleza de los suizos. Llegamos a Grosio y nos subieron las maletas a la habitación y guardamos las máquinas en el garaje.
DIA 8: Jueves 25 de junio de 2010 –GROSIO-Stelvio-GROSIO 219 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-7
Por fin había llegado el día tan esperado de la subida al Stelvio, aunque lo cierto era que con los espectaculares puertos que ya llevábamos recorridos, no sabíamos si éste sería capaz de sorprendernos. La ruta consistía en una vuelta circular en el sentido de las agujas del reloj, que a partir de Livigno se adentraba en el Parque Nacional del Stelvio. Volvimos a entrar en Suiza, y recuerdo que había unos raíles de tren que en un principio iban paralelos a la carretera, pero después se metían en la misma carretera, y suponían un riesgo porque no lo hacían transversalmente, sino que se mantenían paralelos a la carretera, con el consiguiente riesgo de encajar la rueda de la moto en él. Llegamos a un control en el que nos sacudieron 8 euros a cada uno por pasar, todavía no se si era por circular por un largo túnel o porque había escuchado en el foro que ahora para subir al Stelvio había que pagar. Los paisajes seguían siendo bellos y tranquilos, y había un trasiego de motos en ambas direcciones. Las matrículas que vimos eran sobre todo italianas, pero también las había de Alemania e incluso Austria, mientras que no nos cruzamos con ningun español, me imagino que la mayoría aguardarán a julio y agosto para recorrer estos lugares.
¡Por fin llegó el momento de la subida! No acabábamos de ver las curvas famosas que salen en todas las fotos. Finalmente, tras recorrer unos km a partir de la indicación, llegaron. Apreciamos que eran reviradas, reviradas, de casi 180º, y lo peor es que había ciclistas, motoristas, caravanas y coches que suben y bajan, lo cual te crea un estrés vertiginoso, pues a la hora de encarar la curva tienes que estar pendiente de que no haya obstáculos en la misma, pues al estar tan cerrada no tienes más remedio que abrirte y ocupar el carril contrario. Además como mi BMW era más larga que la CBF, me suponía un mayor estrés. El riesgo estaba en parar en medio de ella, porque el peralte era tan alto que fijo que si trataba de poner el pie sobre la zona más baja la moto caía en redondo al suelo ¡Uff que nervios cuando aparecía una caravana o un coche! Antes tenía que mirar y asegurarme de que no me cruzaría con ninguno. Además llegando a la cima había nieve acumulada en los laterales y al derretirse mojaba la carretera, y para darle un poquito más de emoción también se apelotonaban los ciclistas en las curvas para hacer fotos, Antonio que iba en cabeza a punto estuvo de llevarse a unos cuantos por delante, jeje. ¡Pero al final logramos culminar el ascenso sin rozar la moto ni la cordura! Jeje.
Habíamos puesto toda nuestra pericia en juego. Yo creo que además estuvo bien haber pasado por todos los puertos anteriores de los días precedentes, porque esta subida fue como el examen de fin de ruta, jeje. A pesar de que llevábamos en mis maletas lo necesario para hacer un pequeño picnic, un espabilado (el que aparece bajo el toldo azul) había montado un puesto de salchichas a 5 euros la unidad, y con el júbilo que teníamos en el cuerpo, decidimos que nos podíamos dar ese capricho, pues la ocasión la merecía sin lugar a dudas. Era además el último puerto culminado de nuestra ruta “De los Alpes al cielo”.
Tras la compra de pines y otros artículos de recuerdo, realizamos la bajada por el lado contrario que era más tranquilo, con menos trasiego de vehículos y con curvas más amplias. Me gustó mucho más esta vertiente, tanto que llegué a subirla y bajarla de nuevo. Estaba eufórico y lamentaba que estuviera asistiendo al fin de tantos días de diversión…
Ciertamente quedé tan gratamente sorprendido por la ruta “De los Alpes al cielo” que quiero agradecer a “Nomar” el buen trabajo realizado con el trazado de la misma, e incluso presiento que al igual que cuando pisé Marruecos en moto me prometí que volvería, y volví, creo que con esta ruta me va a pasar lo mismo. Además el haberla recorrido en junio hizo que no hubiera demasiada aglomeración y que nos moviéramos cómodamente, incluso a nivel de alojamientos, por lo que nos han quedado ganas de repetir aventura en estas fechas el año que viene.
En cuanto a la vuelta pues ya etapas de trámite:
DIA 9: Viernes 26 de junio de 2010 –GROSIO-AIX-EN-PROVENCE 700 Km
En Aix nos encontramos con una ciudad animada llena de terrazas y de chicas guapísimas. Recomendable 100x100 visitar.
DIA 10: Sábado 27 de junio de 2010: AIX-EN-PROVENCE-LERIDA 625 Km
Día de mucho trasiego en la autopista, pues la mayoría de la gente salía de vacaciones y de fin de semana a la playa, y con el calor que hizo, y las retenciones en los peajes, se nos hizo la etapa más dura.
DIA 11: Domingo 28 de junio de 2010: LERIDA-MADRID 475 Km
Después de los km recorridos, un paseo. Aunque deseábamos llegar a casa, por otro lado sentíamos la nostalgia de los paisajes y las curvas, sobre todo de Suiza que fue el país que más nos gustó.
DATOS PRACTICOS:
HOTELES:
- APREMONT (Francia):
Hotel Saint Vicent, 50 €/noche. Habitación doble. (Valoración 1 a 10: 8)
- LAVORGO (Suiza):
Hotel Defanti, 80 €/noche. Habitación doble con desayuno. (Valoración 1 a 10: 8)
- GROSIO (Italia):
Hotel Sassella, 90 €/noche. Habitación doble con desayuno. (Valoración 1 a 10: 9)
- AIX-EN PROVENCE (Francia):
Hotel Le Concorde, 62 €/noche. Habitación doble. (Valoración 1 a 10: 5, lo mejor que estaba céntrico y tenía garaje. La habitación pequeña y antigua)
GASTOS PEAJES: 95 € /moto
GASTO GASOLINA: 296 €/moto
KM RECORRIDOS: 5.000 Km
No quería despedirme sin antes agradecer públicamente la ayuda prestada por “el ingeniero Domingo”, colega del curre, y que gracias a él y a su altruismo logré poner al navegador al día incluyendo los mapas de Europa, que nos permitieron llegar a los sitios sin apenas margen de error. ¡Muchas gracias Domingo por tu colaboración, eres un máquina!
Gracias a tod@s, espero que os haya gustado y un cordial saludo!!!!
Yo soy de confeccionar la ruta con meses de antelación, así consigo combatir los meses de espera y empezar a divertirme antes del comienzo de viaje. Este cambio de planes se produjo a última hora y no nos dio tiempo a elaborar un nuevo programa aventurero. Encontramos una web: www.moterus.es, en la que uno de los foreros, “Nomar”, había confeccionado una ruta de diez días por los Alpes: “De los Alpes al cielo”: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo El problema era que ellos salían a primeros de julio, y nosotros teníamos la segunda quincena de junio. Así que tuvimos que ir por libre. Mientras yo me fui una semana a caminar desde Irún a Bilbao haciendo el Camino de Santiago, mi colega Antonio se ocupó de la logística y reservó los hoteles en: Zaragoza, Apremont (Francia), Lavorgo (Suiza), Grosio (Italia), Aix-en-Provence (Francia) y Lérida. Alojamientos que resultaron la mar de acertados y totalmente recomendables. Al final os pondré los nombres y precios de los mismos, por si pueden ser de interés para alguno.
DIA 1: Viernes 18 de junio de 2010 –MADRID-ZARAGOZA- 325 Km
Estuve toda la mañana deseando que llegara el final del curre para ir a casa y salir con mi GS1200 y mi colega Antonio rumbo a Zaragoza, ya que al día siguiente tendríamos que hacer casi mil kilómetros, muchos más si no aprovechábamos la tarde del viernes. Esta primera etapa la hicimos cargados de ilusión y pensando en la del día siguiente. Por tanto etapa consumada sin novedad, jeje.
DIA 2: Sábado 19 de junio de 2010 –ZARAGOZA-APREMONT- 980 Km
Nos levantamos a las siete de la mañana y nos tomamos unos batidos y unos bollos para no perder tiempo, y aprovechar más adelante otra paradita para descansar y tomar un tentempié más jugoso. Iniciamos la salida por la NII ya que el resto del día circularíamos por autopista. Esta etapa la hicimos con numerosas paradas, de manera que ambos coincidimos en que los 980 km no nos habían agotado tanto como esperábamos, sobre todo para mi colega, que suponía batir su record personal de km recorridos en moto en un solo día. El tomtorrón fue decisivo, pues nos llevó hasta escasos metros del hotel (las coordenadas que nos facilitó la reserva de hotel correspondían al edificio de la iglesia), de forma que a las ocho de la tarde estábamos en destino (en Apremont cerca de Chambéry). Las motos se quedaron en la calle bajo un voladizo, y cenamos unas pizzas. Muy agradable el hotel, y la habitación con calefacción, aunque un poco pequeña, acogedora.
DIA 3: Domingo 20 de junio de 2010 –APREMONT-Alpe d`Huez-Col Galibier-
APREMONT- 315 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-2
La ruta que había diseñado “Nomar” era circular y para nosotros era desconocida, no sabíamos realmente cómo serían las carreteras y paisajes por los que íbamos a pasar. La salida de Apremont es por un laberinto de pueblecitos rodeados de verde, pero que el tomtorrón afortunadamente sabe descifrar. Así llegamos hasta el Alpe d´Huez, aunque nada más llegar empezó a caer aguanieve y salimos de allí a toda prisa sin hacernos ni una foto, no fuera que nos quedáramos atrapados. Bella la subida hasta el alto, y la estación de esquí también lo parecía. Continuamos la ruta y decidimos subir a Les 2 Alpes, pues en el cruce vimos que bajaban muchos coches con remolques de bicicletas MTB con letreros de competición, y queríamos ver si el espectáculo todavía seguía. Llegamos a una estación de esquí donde había circuitos de MTB por las laderas de la montaña y por las que se divertían un montón de ciclistas. A parte también estaban desmontando un escenario sobre el que se debían de haber entregado los trofeos. Resulta interesante ver cómo se adaptaba la estación para las épocas estivales sin nieve por la que deslizarse.
Después continuamos la ruta siguiendo las instrucciones introducidas en el tomtorrón, de manera que comenzamos a subir el Col Galibier y en la cima se apreciaba una nube, y mi colega Antonio me decía por el Cardo que esa nube presagiaba malos augurios, mientras que yo por el contrario iba riéndome y disfrutando con la subida entre laderas nevadas, y es que pensaba que en pleno mes de junio no iba a nevar. Pero mi gozo en un pozo, pues llegando al alto comenzó a nevar y la carretera empezaba a cubrirse por completo. La situación pintaba mal, había además niebla, menos mal que en lo alto llegamos a ver unas rodadas y tratamos de seguirlas, aunque a la entrada de un túnel me salí de ella y la rueda trasera patinó, pero afortunadamente logré dominar mi montura. Poco a poco fui pasando de la risa de incredulidad a la seria preocupación, pues al final los presagios de mi colega se estaban cumpliendo. Por fin a la salida del túnel la carretera empezó a descender y a estar nuevamente sin nieve y todo quedó en un susto, y una vez más sin poder hacernos fotos.
Este día estuvo un tanto deslucido por el tiempo, con ratos de lluvia e incluso de nieve. Así que nos marchamos al hotel y a cenar algo calentito.
DIA 4: Lunes 21 de junio de 2010 –APREMONT-LAVORGO- 345 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-3
Tras dos noches en Apremont partimos hacia Suiza. El día aunque nublado, daba la impresión de que quería mejorar. Un tramo de la carretera estaba cortado por obras, y tuvimos que dar un rodeo subiendo y bajando una montaña, toda rodeada de pinos y con poca circulación, permitiéndonos disfrutar alegremente. Como íbamos a pasar por el Mont-Blanc, me habían recomendado subir en el funicular, pues desde allí había unas vistas maravillosas. Sin embargo el día seguía completamente cubierto y la cima estaba igualmente cubierta, por lo que no merecía la pena subir.
Seguimos ruta y en un descenso nos encontramos con una preciosa vista del vallée du Rhône:
Seguimos la ruta y nos hicimos fotos invernales como estas:
Nuestro alojamiento al no estar en Göschenen, sino en Lavorgo, un tranquilo pueblo donde Antonio encontró un hotel acogedor, nos desviamos de la ruta prevista por “Nomar” y subimos por el Passo della Novena. Eso sí, antes repostamos en una gasolinera donde te servías tu mismo, para lo que previamente tenías que introducir la tarjeta de crédito. El caso es que te podías servir un máximo de 100 euros, y antes de echarme la gasolina recibí en mi móvil un mensaje que decía que había realizado un pago de 110 euros en la gasolinera, ¡me cagü…! Que si quería reclamar que llamara a un teléfono que me salía en el mensaje. El caso que el tique que me salió indicaba que había repostado unos veinte euros. Decidí no llamar porque me imaginé que primero retienen un dinero de la tarjeta y después cuando terminas de repostar es cuando te cobran la cantidad exacta. Si llamaba, entre hablar con la maquinita que seguramente me saldría, marcar los numeritos, y demás inventos comerciales, seguro que iba a pagar en teléfono los “cien pavos”, así que decidí esperar a llegar a casa y ver el resultado, que finalmente fue como os digo, me cobraron sólo la cantidad repostada.
DIA 5: Martes 22 de junio de 2010 –LAVORGO-S.Gotardo-Furkapass-Grimselpass-
Sustenpass-LAVORGO- 342 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-4
El día comenzó conociendo el famoso puerto de San Gotardo. Quedamos prendados con él. Carretera anchísima, buen asfalto y vistas de lujo. Ciertamente empezaba a disfrutar con las curvas, me notaba cada día más sueltillo conduciendo por ellas. Además podíamos ver la carretera antigua empedrada:
Al ser temprano la mañana estaba fresquita, creo recordar que unos 8 ó 10 grados, pero con el traje de invierno estábamos fenomenal. Continuamos disfrutando en el descenso y poco después volvíamos a encontrarnos con otro encantador puerto, el Furkapass:
Y un poco más adelante otro puerto más, el Grimselpass:
Todavía no llevábamos ni la mitad del recorrido y estábamos en una nube, disfrutando como niños. Además por la carretera se veían pocos vehículos, más motos que coches, y todos circulaban sin ir “pasados de vueltas”, sino que por el contrario todos disfrutábamos con relax de los paisajes y de las curvas, que se sucedían una tras otra más abierta, más cerrada, enlazadas… para mi gusto todo un paraíso para curvear con moto. Después llegamos a Interlaken, rodeado por los lagos de Thun y Brienz. El ritmo se interrumpió porque es una autovía la que los circunda, y después de las carreteras de curvas que habíamos recorrido, la autovía hacía que las echáramos de menos, pero el lago desde luego que muy bello, incluso aprovechamos para comer el picnic junto a él:
Tras rodear el lago volvimos a nuestras añoradas carreteras de montaña para subir el Sustenpass y regresar al hotel. Vimos que el San Gotardo estaba cerrado y tuvimos que seguir por la autovía, y nosotros no habíamos sacado la pegatina que permite circular por ellas durante un año, ya que en principio las rutas que íbamos a seguir no las utilizaban, con lo cual estábamos un poco moscas por si la poli nos recetaba algún supositorio, jeje. Después entramos en un maldito túnel, que tenía 17 km de longitud, con el traje de invierno a una temperatura exterior de 22 grados, llegando a alcanzar dentro del túnel los 34 grados. Teníamos los forros pegados a la piel, y sudábamos como pollos asados, le dije a Antonio que si quería podíamos parar porque a él le gusta echar el aceite a la cadena cuando está caliente, era el momento, pues tanto la cadena como el bote de aceite estaban en su punto. Nos reímos un montón porque aquello era una sauna.
DIA 6: Martes 23 de junio de 2010 –LAVORGO-Zurich-Cataratas del Rhin-LAVORGO- 430 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-5
Nos levantamos temprano porque hoy la ruta era más larga y además discurría por Lucerna y Zurich, y nos imaginamos que hallaríamos una mayor densidad de tráfico que nos ralentizaría la marcha. Además nos preguntábamos que nos habría preparado hoy “Nomar”, pues aún sin conocerle cada día que pasaba estábamos más entusiasmados con sus rutas, día a día nos sorprendía. Nuevamente volvimos a subir el San Gotardo, pues la ruta partía a partir de él. Sin embargo hoy me decidí a probar por la carretera empedrada, ya que los adoquines estaban secos, mientras que mi colega prefirió esperarme arriba en el museo subiendo por la nueva. Fue emocionante circular por los adoquines, además en las zonas donde estaban mal, habían asfaltado el tramo. Con los adoquines mojados sinceramente si lo vi más arriesgado. Al final no llegué a subirlo entero porque al llegar a un cruce me equivoqué de dirección y volví a salir a la carretera nueva. Pero la sensación que me reportó el tramo que subí fue fabulosa e inolvidable. Además otra cosa curiosa es que en las montañas se observaban decenas de soldados y vehículos militares, como numerosos búnkeres abiertos en las rocas. Me preguntaba si sería allí donde tendrían guardadas las divisas de los megacorruptos y de los evade-impuestos, jeje. El museo no lo vimos porque la etapa era demasiado larga como para entretenernos más, y parecía que iba sobre la historia del San Gotardo.
Renunciamos a ver Lucerna (ciudad por cierto bella por visitarla durante otro viaje) porque entonces la ruta subía ya a más de quinientos km. Nos resultaba también muy curioso que en Suiza todas las travesías urbanas que atravesábamos carecían de semáforos, con los pasos de cebra tenían suficiente, los conductores cedían el paso tan pronto veían a un peatón con intención de cruzar, y por supuesto nosotros contribuimos a mantener ese comportamiento ejemplar.
Las vistas de postal continuaban sucediéndose:
Incluso observamos publicidad preventiva como ésta:
De camino a Zurich nos encontramos con numerosos tramos en obras, que tenían un carril cortado y entonces si vimos aparecer los semáforos, por lo que junto al lago Lucerna nos tomamos un respiro:
A medida que nos aproximábamos a Zurich el ritmo se ralentizaba por un mayor tráfico y además el calor empezaba a apretar, y con el traje de invierno íbamos empapados de sudor. Una vez superada la ciudad y tras continuar la ruta, nos salimos de Suiza y entramos en Alemania, un trámite en el que ni siquiera nos pararon los policías de la frontera. Poco después volvimos a entrar en Suiza, igualmente sin detenernos en la aduana fronteriza. Y por fin llegó nuestro ansiado objetivo, las cataratas del Rhin:
Fue como encontrar un anhelado oasis, donde pudimos quitarnos las chaquetas y comer fresquitos, ya que las cataratas están rodeadas de un parque con bancos y sombras desde los que la vista se deleita.
El regreso lo hicimos por Whinterthur, y atravesar esta ciudad nos costó un rato, debió de coincidir con la hora de salida del curre, y entre el calor que hacía y el calor de la poderosa, empezábamos a estar ya un poco hartos de la Ruta. Una vez atravesada la ciudad, el traficó disminuyó de intensidad y finalmente llegamos al hotel, y aunque ciertamente no había tenido nada que ver con las etapas anteriores, si llegamos a la conclusión de que el salto nos había gustado y de que había mereció la pena el esfuerzo y la sudada, jeje.
DIA 7: Miércoles 24 de junio de 2010 –LAVORGO-GROSIO- 278 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-6
Tocaba despedirnos de Suiza y entrar en Italia, era el día de la antesala de nuestra anhelada subida al Stelvio. Un día más nos tocaba subir el San Gotardo y en esta ocasión para despedirnos de él. La anécdota estuvo protagonizada por una retención en la subida, y que se debía a que estaban fotografiando a un trailer en una curva con el fondo de las montañas, al parecer para un anuncio publicitario. Mientras tanto me entretuve en grabar a un grupo de Porsches que aguardaban a subir, así como con un simpático soldado con una GS650 con el que nos hicimos unas fotos:
Después “Nomar” volvió a sorprendernos gratamente con la subida a Oberalpass:
Otro aspecto que nos resultaba curioso es que nos cruzábamos en numerosas ocasiones con vehículos de época, y no me extraña porque los paisajes invitaban a regocijarse con ellos:
“Nomar” había diseñado una ruta que cada vez nos gustaba más, y cuando menos lo esperábamos nos volvía a deleitar con postales como estas, tomadas en el Bernina:
Notamos que habíamos entrado en Italia porque el tráfico era más intenso, los conductores tenían una conducción más agresiva y veloz, y los paisajes no tenían la belleza de los suizos. Llegamos a Grosio y nos subieron las maletas a la habitación y guardamos las máquinas en el garaje.
DIA 8: Jueves 25 de junio de 2010 –GROSIO-Stelvio-GROSIO 219 Km
Ruta: http://www.moterus.es/rutas-en-moto/de-los-alpes-al-cielo-dia-7
Por fin había llegado el día tan esperado de la subida al Stelvio, aunque lo cierto era que con los espectaculares puertos que ya llevábamos recorridos, no sabíamos si éste sería capaz de sorprendernos. La ruta consistía en una vuelta circular en el sentido de las agujas del reloj, que a partir de Livigno se adentraba en el Parque Nacional del Stelvio. Volvimos a entrar en Suiza, y recuerdo que había unos raíles de tren que en un principio iban paralelos a la carretera, pero después se metían en la misma carretera, y suponían un riesgo porque no lo hacían transversalmente, sino que se mantenían paralelos a la carretera, con el consiguiente riesgo de encajar la rueda de la moto en él. Llegamos a un control en el que nos sacudieron 8 euros a cada uno por pasar, todavía no se si era por circular por un largo túnel o porque había escuchado en el foro que ahora para subir al Stelvio había que pagar. Los paisajes seguían siendo bellos y tranquilos, y había un trasiego de motos en ambas direcciones. Las matrículas que vimos eran sobre todo italianas, pero también las había de Alemania e incluso Austria, mientras que no nos cruzamos con ningun español, me imagino que la mayoría aguardarán a julio y agosto para recorrer estos lugares.
¡Por fin llegó el momento de la subida! No acabábamos de ver las curvas famosas que salen en todas las fotos. Finalmente, tras recorrer unos km a partir de la indicación, llegaron. Apreciamos que eran reviradas, reviradas, de casi 180º, y lo peor es que había ciclistas, motoristas, caravanas y coches que suben y bajan, lo cual te crea un estrés vertiginoso, pues a la hora de encarar la curva tienes que estar pendiente de que no haya obstáculos en la misma, pues al estar tan cerrada no tienes más remedio que abrirte y ocupar el carril contrario. Además como mi BMW era más larga que la CBF, me suponía un mayor estrés. El riesgo estaba en parar en medio de ella, porque el peralte era tan alto que fijo que si trataba de poner el pie sobre la zona más baja la moto caía en redondo al suelo ¡Uff que nervios cuando aparecía una caravana o un coche! Antes tenía que mirar y asegurarme de que no me cruzaría con ninguno. Además llegando a la cima había nieve acumulada en los laterales y al derretirse mojaba la carretera, y para darle un poquito más de emoción también se apelotonaban los ciclistas en las curvas para hacer fotos, Antonio que iba en cabeza a punto estuvo de llevarse a unos cuantos por delante, jeje. ¡Pero al final logramos culminar el ascenso sin rozar la moto ni la cordura! Jeje.
Habíamos puesto toda nuestra pericia en juego. Yo creo que además estuvo bien haber pasado por todos los puertos anteriores de los días precedentes, porque esta subida fue como el examen de fin de ruta, jeje. A pesar de que llevábamos en mis maletas lo necesario para hacer un pequeño picnic, un espabilado (el que aparece bajo el toldo azul) había montado un puesto de salchichas a 5 euros la unidad, y con el júbilo que teníamos en el cuerpo, decidimos que nos podíamos dar ese capricho, pues la ocasión la merecía sin lugar a dudas. Era además el último puerto culminado de nuestra ruta “De los Alpes al cielo”.
Tras la compra de pines y otros artículos de recuerdo, realizamos la bajada por el lado contrario que era más tranquilo, con menos trasiego de vehículos y con curvas más amplias. Me gustó mucho más esta vertiente, tanto que llegué a subirla y bajarla de nuevo. Estaba eufórico y lamentaba que estuviera asistiendo al fin de tantos días de diversión…
Ciertamente quedé tan gratamente sorprendido por la ruta “De los Alpes al cielo” que quiero agradecer a “Nomar” el buen trabajo realizado con el trazado de la misma, e incluso presiento que al igual que cuando pisé Marruecos en moto me prometí que volvería, y volví, creo que con esta ruta me va a pasar lo mismo. Además el haberla recorrido en junio hizo que no hubiera demasiada aglomeración y que nos moviéramos cómodamente, incluso a nivel de alojamientos, por lo que nos han quedado ganas de repetir aventura en estas fechas el año que viene.
En cuanto a la vuelta pues ya etapas de trámite:
DIA 9: Viernes 26 de junio de 2010 –GROSIO-AIX-EN-PROVENCE 700 Km
En Aix nos encontramos con una ciudad animada llena de terrazas y de chicas guapísimas. Recomendable 100x100 visitar.
DIA 10: Sábado 27 de junio de 2010: AIX-EN-PROVENCE-LERIDA 625 Km
Día de mucho trasiego en la autopista, pues la mayoría de la gente salía de vacaciones y de fin de semana a la playa, y con el calor que hizo, y las retenciones en los peajes, se nos hizo la etapa más dura.
DIA 11: Domingo 28 de junio de 2010: LERIDA-MADRID 475 Km
Después de los km recorridos, un paseo. Aunque deseábamos llegar a casa, por otro lado sentíamos la nostalgia de los paisajes y las curvas, sobre todo de Suiza que fue el país que más nos gustó.
DATOS PRACTICOS:
HOTELES:
- APREMONT (Francia):
Hotel Saint Vicent, 50 €/noche. Habitación doble. (Valoración 1 a 10: 8)
- LAVORGO (Suiza):
Hotel Defanti, 80 €/noche. Habitación doble con desayuno. (Valoración 1 a 10: 8)
- GROSIO (Italia):
Hotel Sassella, 90 €/noche. Habitación doble con desayuno. (Valoración 1 a 10: 9)
- AIX-EN PROVENCE (Francia):
Hotel Le Concorde, 62 €/noche. Habitación doble. (Valoración 1 a 10: 5, lo mejor que estaba céntrico y tenía garaje. La habitación pequeña y antigua)
GASTOS PEAJES: 95 € /moto
GASTO GASOLINA: 296 €/moto
KM RECORRIDOS: 5.000 Km
No quería despedirme sin antes agradecer públicamente la ayuda prestada por “el ingeniero Domingo”, colega del curre, y que gracias a él y a su altruismo logré poner al navegador al día incluyendo los mapas de Europa, que nos permitieron llegar a los sitios sin apenas margen de error. ¡Muchas gracias Domingo por tu colaboración, eres un máquina!
Gracias a tod@s, espero que os haya gustado y un cordial saludo!!!!