La experiencia no ha podido ser mejor y ha superado ampliamente mis objetivos del curso que no pasaban de ir con cierta tranquilidad por caminos de tierra. Hemos aprendido a configurar la moto ( palancas de freno y cambio, retrovisores, manillar y presiones ), a frenar correctamente con y sin ayudas electrónicas, a gestionar la mirada y nuestro peso sobre la moto, controlar el gas, la posición en pendientes, etc., etc. Cuando llegué de la ruta nocturna que hicimos el sábado, nunca pensé que sería capaz de hacerla sólo tras un día de formación y práctica. Es más, si me dicen lo que iba a hacer, me habría negado. Pero el instructor, Roc, es capaz de sacarte discretamente de tu zona de confort, que confíes en ti ( y en él ) y de ayudarte a conseguir los objetivos. Un gran profesional con muchísima experiencia. Le agradezco enormemente haberme abierto los ojos a un nuevo disfrute de la moto y a mi propia capacidad. El ambiente , estupendo, familiar, muy agradable, al fin y al cabo, a todos los asistentes nos une lo mismo. En cuanto a los daños de la moto, yo me he caído 3 veces con mi GSA ( al menos una por girar demasiado lento ) y no tengo ni un rasguño. Que yo recuerdo, el único daño que hubo fue el soporte de la cúpula de la GSA de un compañero por una caída causada por el barro en la nocturna. No te arrepentirás. Es toda un experiencia y, como se suele decir, un antes y un después.