Os cuento una anecdota que me paso hace poco, creo que me lleve el susto del siglo.
Se me ocurre un día decirle a mi mujer, que se venga a pegarnos unas curvitas, ella con pocas ganas acepta, en una de ellas un poco cerradita empezamos a tumbar, viendo que aquello cada vez cerraba mas, sigo tumbando, cuando de repente noto que no, que esto no seguia inclinándose , me hago casi un recto, y cuando paro, veo a mi mujer blanca, al preguntarle que ha pasado me contesta, que le había entrado miedo y mientras yo tiraba la moto para el sentido de la curva, ella asustada y viendo la inclinacion se tira hacia el otro. Gracias que en aquella no venía ninguno de frente. Me vajé con un tembleque en las pierna que ya os podeis imaginar.
P.D. La mujer para dar una vuelta por la autovia a 100, para curvas los amiguetes.
Se me ocurre un día decirle a mi mujer, que se venga a pegarnos unas curvitas, ella con pocas ganas acepta, en una de ellas un poco cerradita empezamos a tumbar, viendo que aquello cada vez cerraba mas, sigo tumbando, cuando de repente noto que no, que esto no seguia inclinándose , me hago casi un recto, y cuando paro, veo a mi mujer blanca, al preguntarle que ha pasado me contesta, que le había entrado miedo y mientras yo tiraba la moto para el sentido de la curva, ella asustada y viendo la inclinacion se tira hacia el otro. Gracias que en aquella no venía ninguno de frente. Me vajé con un tembleque en las pierna que ya os podeis imaginar.
P.D. La mujer para dar una vuelta por la autovia a 100, para curvas los amiguetes.