Yo estoy enamorado de mi LT,es cierto que es un poco barco,pero con fuerza y piernas la dominas facilmente(hablando siempre en parado),andando es un gustazo que hay que darselo como el que se da una buena cena,obviamente para callejear e ir de mandados a la ciudad yo cojo mi burgman 250 que para eso es estupenda,pero si sales de viaje no vas igual en un panda que en un vehiculo de alta gama por eso la LT hay que saber disfrutarla donde hay que disfrutarla,en carretera........ para los mandaos.....un vespino.
Tengo un amigo que por problemas de estatura (paticorti),tuvo que cambiar su LT,pero eso son males mayores,y os garantizo que lo hizo con todo el dolor de su corazon.
Para mi ha sido una meta mi LT.despues de unas ocho o nueve motos.Por eso animo a todo aquel que tenga en mente una LT que no desista en el empeño vale la pena.