ZZigZag
Allá vamos
Esta tarde he llegado a casa en coche, cansado, reventado, sudoroso… y he aparcado mi viejo cascarrabias (me gusta llamarle viejo aunque saliera de Munich mas de diez años después que la Pelirroja) junto a ella…
- -¿Se puede saber donde has estado Rubio? Es domingo, hace una día precioso y aún no me has sacado de paseo...
- Por ahí… - contesto esquivo mientras cierro el cascarrabias, a sabiendas de que mi discreto y fiel caballo no le va a decir nada…
- Ya, ya… so golfo… - a ver que te dice la otra de ese roto sospechoso que llevas en el vaquero – la puñetera está en todo…
- Ahora bajo… te vas a enterar…
Subo a casa, “la otra” se ha ido a buscar a los niños a un cumpleaños… tardarán un rato, así que me enfundo en cuero, me pongo el casco de los domingos, los guantes de los nudillos de titanio y me bajo a por ella…
- ¡Wow! Parece que esto va en serio…
- Ya verás hasta que punto preciosa…
- Me encanta que te pongas así de guapo para mi – me dice mientras arranca, como siempre, a la primera, y empieza a emitir ese sonido que me chifa… fiuu! Fiuuuuuuu!...
Arranco, embriagado por el olor de ese perfume que ella usa y se llama gasolina… pero hoy no es como siempre, y ella lo nota… voy sentado un poco mas adelantado y manejo el gas con una suavidad nunca antes vista…
Salgo del garaje, y ella nota como lo hago mas seguro que se costumbre… como acelero fuerte utilizando un único carril para incorporarme, como llego a la rotonda y corto, freno de atrás e inmediatamente de adelante relajando el de atrás… y me hago la rotonda sin miedo, con una trazada impecable… sin hacer fuerza en el manillar…
- ¡Wow! Hoy vas fino de verdad, ¿no?... buff, me encanta lo que me haces…
- Tu te lo mereces preciosa… y espera a que estés caliente de verdad…
Y entonces salimos a carretera… y empiezo a meter marchas sin embrague, y entran incluso mas suave que si lo usara, empiezo a aprisionarla entre mis piernas, a apretar con ellas su depósito en cada en cada curva cada vez mas fuerte, a fundirme con ella, mientras sujeto el manillar como si lo hiciera con un pajarito en cada mano, dando y cortando gas con suavidad y precisión… y ella ruje de placer, me lo da todo, se entrega… disfruta viendo como soy capaz de predecir sus reacciones…
- ¡Dioosss! – Dice mientras roza suavemente la estribera…
- ¿Te duele?
- ¡Me encanta!
Volvemos al garaje… extenuados los dos… la aparco junto al cascarrabias, que me mira cómplice cundo la ve entrar sonriente… pero de repente, le cambia la cara, tiene un repentino ataque de celos…
- ¿Se puede saber donde has estado? ¡Golfo! ¿Dónde has aprendido todo eso que me has hecho?
No me queda mas remedio que confesarle que he hecho el curso de conducción, de lo que se alegra, aunque prefiero no mencionar el arén de geishas que he estado manoseando durante toda la jornada… y creo que ella prefiere no escucharlo…
Subo a casa… y me recibe el niño sacando la cabeza por agujero que le he hecho a los vaqueros… y la niña detrás diciendo “dice mamá que si no te has matado tu te mata ella… que gracioso”…
He disfrutado como un enano… vaya día señores…
V´s!
- -¿Se puede saber donde has estado Rubio? Es domingo, hace una día precioso y aún no me has sacado de paseo...
- Por ahí… - contesto esquivo mientras cierro el cascarrabias, a sabiendas de que mi discreto y fiel caballo no le va a decir nada…
- Ya, ya… so golfo… - a ver que te dice la otra de ese roto sospechoso que llevas en el vaquero – la puñetera está en todo…
- Ahora bajo… te vas a enterar…
Subo a casa, “la otra” se ha ido a buscar a los niños a un cumpleaños… tardarán un rato, así que me enfundo en cuero, me pongo el casco de los domingos, los guantes de los nudillos de titanio y me bajo a por ella…
- ¡Wow! Parece que esto va en serio…
- Ya verás hasta que punto preciosa…
- Me encanta que te pongas así de guapo para mi – me dice mientras arranca, como siempre, a la primera, y empieza a emitir ese sonido que me chifa… fiuu! Fiuuuuuuu!...
Arranco, embriagado por el olor de ese perfume que ella usa y se llama gasolina… pero hoy no es como siempre, y ella lo nota… voy sentado un poco mas adelantado y manejo el gas con una suavidad nunca antes vista…
Salgo del garaje, y ella nota como lo hago mas seguro que se costumbre… como acelero fuerte utilizando un único carril para incorporarme, como llego a la rotonda y corto, freno de atrás e inmediatamente de adelante relajando el de atrás… y me hago la rotonda sin miedo, con una trazada impecable… sin hacer fuerza en el manillar…
- ¡Wow! Hoy vas fino de verdad, ¿no?... buff, me encanta lo que me haces…
- Tu te lo mereces preciosa… y espera a que estés caliente de verdad…
Y entonces salimos a carretera… y empiezo a meter marchas sin embrague, y entran incluso mas suave que si lo usara, empiezo a aprisionarla entre mis piernas, a apretar con ellas su depósito en cada en cada curva cada vez mas fuerte, a fundirme con ella, mientras sujeto el manillar como si lo hiciera con un pajarito en cada mano, dando y cortando gas con suavidad y precisión… y ella ruje de placer, me lo da todo, se entrega… disfruta viendo como soy capaz de predecir sus reacciones…
- ¡Dioosss! – Dice mientras roza suavemente la estribera…
- ¿Te duele?
- ¡Me encanta!
Volvemos al garaje… extenuados los dos… la aparco junto al cascarrabias, que me mira cómplice cundo la ve entrar sonriente… pero de repente, le cambia la cara, tiene un repentino ataque de celos…
- ¿Se puede saber donde has estado? ¡Golfo! ¿Dónde has aprendido todo eso que me has hecho?
No me queda mas remedio que confesarle que he hecho el curso de conducción, de lo que se alegra, aunque prefiero no mencionar el arén de geishas que he estado manoseando durante toda la jornada… y creo que ella prefiere no escucharlo…
Subo a casa… y me recibe el niño sacando la cabeza por agujero que le he hecho a los vaqueros… y la niña detrás diciendo “dice mamá que si no te has matado tu te mata ella… que gracioso”…
He disfrutado como un enano… vaya día señores…

V´s!