the doctor
Acelerando
- Registrado
- 27 Feb 2007
- Mensajes
- 476
- Puntos
- 43
Hoy he intercambiado con un amigo y colega en un trayecto de curvas y perfecto asfalto mi K 1200 R sport con su R 1200 S y la verdad es que he disfrutado como un enano.
Lo que más me ha gustado de la R no ha sido el boxer precisamente, sino su geometría y parte ciclo, sus suspensiones, su docilidad, su posición, su ligereza, su tamaño, peso y la relación de cambio. En los tramos de curvas con buen asfalto todo fluye con naturalidad, sin estrés de ningún tipo. Además los neumáticos de tacto deportivo también se notan. El boxer me parece algo mansurrón pero ideal para los tramos de curvas como el de ayer. La K cuesta muchísimo más de meter en curvas, en las más cerradas no cabe físicamente y has de ocupar el otro carril, la condución es mucho más física, has de trabajártelo, de hecho acabas fatigado. Pero cuando llega la recta, ah amigo, el motor K explota y todo es distinto, ves acercarse el culo del que va delante hasta que has de frenar para no tragártelo. El problema es que entonces has de frenar una masa imponente lanzada a tope y meterla en la curva y entonces es cuando aparece algo de estrés. Además al salir y acelerar siempre has de llevar cuidado con la rueda trasera, además nunca acabas de encontrar la marcha ideal, o es muy corta y brusca o muy larga y suelta. En fin cada una pa lo suyo, quizá la R con un tricilíndrico sería ideal, de hecho BMW creo que lo había valorado en una sport de 600 cc.
Lo que más me ha gustado de la R no ha sido el boxer precisamente, sino su geometría y parte ciclo, sus suspensiones, su docilidad, su posición, su ligereza, su tamaño, peso y la relación de cambio. En los tramos de curvas con buen asfalto todo fluye con naturalidad, sin estrés de ningún tipo. Además los neumáticos de tacto deportivo también se notan. El boxer me parece algo mansurrón pero ideal para los tramos de curvas como el de ayer. La K cuesta muchísimo más de meter en curvas, en las más cerradas no cabe físicamente y has de ocupar el otro carril, la condución es mucho más física, has de trabajártelo, de hecho acabas fatigado. Pero cuando llega la recta, ah amigo, el motor K explota y todo es distinto, ves acercarse el culo del que va delante hasta que has de frenar para no tragártelo. El problema es que entonces has de frenar una masa imponente lanzada a tope y meterla en la curva y entonces es cuando aparece algo de estrés. Además al salir y acelerar siempre has de llevar cuidado con la rueda trasera, además nunca acabas de encontrar la marcha ideal, o es muy corta y brusca o muy larga y suelta. En fin cada una pa lo suyo, quizá la R con un tricilíndrico sería ideal, de hecho BMW creo que lo había valorado en una sport de 600 cc.