nakato
Curveando
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Buenas tardes.
A partir de hoy, me cambio de subforo, abandono el de le las GS y con vuestro permiso, me quedaré por aquí una temporada.
Hace unos meses, vendí mi GS Adventure del 2011, después de llevar una larga temporada sin cogerla, por varios factores: la pandemia, la imposibilidad de salir de viaje con mi mujer, pero sobre todo, por que ya no podía con ella, demasiada moto, demasiado peso, y demasiada altura para salir a rutear un domingo por la mañana, en el mejor de los casos. Por lo que, con mucha pena, sobre todo por el recuerdo y los momentos vividos, y después de 4-5 tentativas de venta, la anuncié... Y voló, el mismo día, pocas horas después ya tenía nuevo dueño.
Así que, me tomé un descanso, un margen para saber, si realmente volvería a tener moto, un tiempo prudencial para saber si quería continuar y sobre todo, cuál sería la sustituta.
Barajé varias opciones, no muchas la verdad, seguir con las trail pero bajar de "categoría" KTM 890 Adventure / V85TT o volver a una GS (no adventure) pero sería la 4ª y sinceramente, me apetecía un cambio. Y además, no necesitaba tanta moto.
Pero entonces, empecé a mirar de reojo las ninet, porque haciendo memoria, allá por el 2014 cuando vi la primera unidad, me dije... algún día tendré esta moto, ahora no es el momento, pero la tendré.
Así que después de descartar las dos opciones comentadas, me puse en busca y captura de Ninet y tenía que ser Urban GS o Scrambler, por aquello de conservar ciertas aptitudes offroad, que son necesarias en mi caso en momentos puntuales.
Lo fácil hubiese sido acercarse al concesionario y encargarla, pero después de haber tenido 2 GS con el motor doble árbol (también tuve una LC pero sin pena ni gloria, simplemente la tuve y ya está), ambas compradas de segunda mano, y con tan buen resultado, mi búsqueda era paciente pero sin pausa, porque con paciencia y decisión, salen unidades muy interesantes.
Así que, hace más o menos una semana, salió esa unidad, y casualmente de un forero y casualmente cerca de casa. Por lo que tengo ya en mis manos una Ninet Urban GS del 2017 cargada de chuches, más de los que yo le hubiese puesto, algunos de ellos de los que duelen al bolsillo pero que te cambia la montura por completo, Ohlins, Willbers, mucho Wunderlich, Hepco Becker, Unit Garaje. Llantas de radios de las buenas, sin cámara, alarma..... Un despliegue de extras que la convierten en una unidad "llave en mano" para no tocar ni una arandela y simplemente disfrutarla desde el minuto 1.
Reconozco que cometí un grave error, y ello casi me hizo desistir de la compra, y es que nunca había probado una ninet, y cuando he tomado la decisión de comprar alguna moto, siempre siempre he probado antes de comprar. Pero esta vez, me tiré a la piscina, convencido de que..... o acertaba, o vendería a las pocas semanas. Cara o cruz
)
Recojo mi nueva montura, empieza la apuesta. Tengo que volver a casa y es de noche, pero en los 35 Kms de vuelta, voy a tener la oportunidad de probar: adoquín, carretera nacional, autovía y carretera de curvas. Así pues, meto primera, esa primera de motor Dohc que en frío simplemente es como pulsar un botón, y me dispongo a salir. Las primeras sensaciones son de bicicleta total, posición más encogida pero "cómoda" todo muy cerca, el suelo a tus pies y ese sonido brutal de este motor, todavía más acentuado en la ninet. Atravieso el pueblo, tramos de adoquín y aparece esa sensación que ya tenía en la GS con suspensión de las buenas DMX, ese tacto de ir por encima del empedrado como si fueses en una alfombra, sabiendo que los hidráulicos trabajan de verdad. Muy buenas sensaciones iniciales.
Salgo del pueblo, primera rotonda, y entro a la misma, con una facilidad que ya había olvidado y me recordaba a una triumph street triple que tuve. Ligereza y facilidad máxima. Encaro la primera recta, acelero, con el recuerdo de la GS, pero aquí hay una diferencia que desde el primer momento noto, la aceleración es mucho más contundente, la moto anda mucho más, coges velocidad mucho antes y.. joder, este motor es el mismo?
No tenía intención de coger la A6, pero era ya de noche y no me gusta conducir sin luz, y además había que probar la protección aerodinámica.... Evidentemente nada que ver con la adventure, pero muuuuucho mejor de lo que esperaba, al menos 120-130 son sostenibles, la pequeña cúpula evita que tu cuerpo esté expuesto al aire, y solo en el casco es donde impacta sin compasión. Llevaba un casco Nexx trail y la visera no ayuda mucho. Pero sin duda, esperaba que fuese a ser mucho peor, por lo que me llevo una buena sensación y saber que llegado el caso, puedo ir a velocidades legales durante tiempo sin morir en el intento.
Salgo de la autopista y vuelvo a coger carretera, esta vez con curvas y antes de llegar a la misma, una rotonda en bajada, donde aprovecho para comprobar, cuánto se hunde la parte delantera al frenar..... Pues no hay hundimiento, esta suspensión trabaja impecable, y la sensación de pérdida del telelever, que es lo que más miedo me daba perder de las GS, en absoluto supone un problema, todo lo contrario, entrar en curva con esta moto es brutal, como se sujeta, lo directa que es, lo ligera que se siente, es muy muy divertida, muy rápida y esto.... no es lo que me esperaba, ya que simplemente quería una buena moto, para "dar una vuelta", pero esto anda y mucho, y este motor es muy diferente en la gs que en la ninet, aquí tiene más presencia, y unos cojonazos de flipar jajajaja.
Así que no me enrollo más, agradezco quien haya llegado hasta aquí y os dejo unas fotos de la susodicha.




A partir de hoy, me cambio de subforo, abandono el de le las GS y con vuestro permiso, me quedaré por aquí una temporada.
Hace unos meses, vendí mi GS Adventure del 2011, después de llevar una larga temporada sin cogerla, por varios factores: la pandemia, la imposibilidad de salir de viaje con mi mujer, pero sobre todo, por que ya no podía con ella, demasiada moto, demasiado peso, y demasiada altura para salir a rutear un domingo por la mañana, en el mejor de los casos. Por lo que, con mucha pena, sobre todo por el recuerdo y los momentos vividos, y después de 4-5 tentativas de venta, la anuncié... Y voló, el mismo día, pocas horas después ya tenía nuevo dueño.
Así que, me tomé un descanso, un margen para saber, si realmente volvería a tener moto, un tiempo prudencial para saber si quería continuar y sobre todo, cuál sería la sustituta.
Barajé varias opciones, no muchas la verdad, seguir con las trail pero bajar de "categoría" KTM 890 Adventure / V85TT o volver a una GS (no adventure) pero sería la 4ª y sinceramente, me apetecía un cambio. Y además, no necesitaba tanta moto.
Pero entonces, empecé a mirar de reojo las ninet, porque haciendo memoria, allá por el 2014 cuando vi la primera unidad, me dije... algún día tendré esta moto, ahora no es el momento, pero la tendré.
Así que después de descartar las dos opciones comentadas, me puse en busca y captura de Ninet y tenía que ser Urban GS o Scrambler, por aquello de conservar ciertas aptitudes offroad, que son necesarias en mi caso en momentos puntuales.
Lo fácil hubiese sido acercarse al concesionario y encargarla, pero después de haber tenido 2 GS con el motor doble árbol (también tuve una LC pero sin pena ni gloria, simplemente la tuve y ya está), ambas compradas de segunda mano, y con tan buen resultado, mi búsqueda era paciente pero sin pausa, porque con paciencia y decisión, salen unidades muy interesantes.
Así que, hace más o menos una semana, salió esa unidad, y casualmente de un forero y casualmente cerca de casa. Por lo que tengo ya en mis manos una Ninet Urban GS del 2017 cargada de chuches, más de los que yo le hubiese puesto, algunos de ellos de los que duelen al bolsillo pero que te cambia la montura por completo, Ohlins, Willbers, mucho Wunderlich, Hepco Becker, Unit Garaje. Llantas de radios de las buenas, sin cámara, alarma..... Un despliegue de extras que la convierten en una unidad "llave en mano" para no tocar ni una arandela y simplemente disfrutarla desde el minuto 1.
Reconozco que cometí un grave error, y ello casi me hizo desistir de la compra, y es que nunca había probado una ninet, y cuando he tomado la decisión de comprar alguna moto, siempre siempre he probado antes de comprar. Pero esta vez, me tiré a la piscina, convencido de que..... o acertaba, o vendería a las pocas semanas. Cara o cruz

Recojo mi nueva montura, empieza la apuesta. Tengo que volver a casa y es de noche, pero en los 35 Kms de vuelta, voy a tener la oportunidad de probar: adoquín, carretera nacional, autovía y carretera de curvas. Así pues, meto primera, esa primera de motor Dohc que en frío simplemente es como pulsar un botón, y me dispongo a salir. Las primeras sensaciones son de bicicleta total, posición más encogida pero "cómoda" todo muy cerca, el suelo a tus pies y ese sonido brutal de este motor, todavía más acentuado en la ninet. Atravieso el pueblo, tramos de adoquín y aparece esa sensación que ya tenía en la GS con suspensión de las buenas DMX, ese tacto de ir por encima del empedrado como si fueses en una alfombra, sabiendo que los hidráulicos trabajan de verdad. Muy buenas sensaciones iniciales.
Salgo del pueblo, primera rotonda, y entro a la misma, con una facilidad que ya había olvidado y me recordaba a una triumph street triple que tuve. Ligereza y facilidad máxima. Encaro la primera recta, acelero, con el recuerdo de la GS, pero aquí hay una diferencia que desde el primer momento noto, la aceleración es mucho más contundente, la moto anda mucho más, coges velocidad mucho antes y.. joder, este motor es el mismo?
No tenía intención de coger la A6, pero era ya de noche y no me gusta conducir sin luz, y además había que probar la protección aerodinámica.... Evidentemente nada que ver con la adventure, pero muuuuucho mejor de lo que esperaba, al menos 120-130 son sostenibles, la pequeña cúpula evita que tu cuerpo esté expuesto al aire, y solo en el casco es donde impacta sin compasión. Llevaba un casco Nexx trail y la visera no ayuda mucho. Pero sin duda, esperaba que fuese a ser mucho peor, por lo que me llevo una buena sensación y saber que llegado el caso, puedo ir a velocidades legales durante tiempo sin morir en el intento.
Salgo de la autopista y vuelvo a coger carretera, esta vez con curvas y antes de llegar a la misma, una rotonda en bajada, donde aprovecho para comprobar, cuánto se hunde la parte delantera al frenar..... Pues no hay hundimiento, esta suspensión trabaja impecable, y la sensación de pérdida del telelever, que es lo que más miedo me daba perder de las GS, en absoluto supone un problema, todo lo contrario, entrar en curva con esta moto es brutal, como se sujeta, lo directa que es, lo ligera que se siente, es muy muy divertida, muy rápida y esto.... no es lo que me esperaba, ya que simplemente quería una buena moto, para "dar una vuelta", pero esto anda y mucho, y este motor es muy diferente en la gs que en la ninet, aquí tiene más presencia, y unos cojonazos de flipar jajajaja.
Así que no me enrollo más, agradezco quien haya llegado hasta aquí y os dejo unas fotos de la susodicha.




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