Pués según el RACC, parece que tenemos una dcarreteras lamentables. Pongo la noticia:
"Más de la mitad de las grandes vías españolas no pasan el corte de seguridad que se supone que deben tener las carreteras de estas características.
El protocolo RPS se centra en la seguridad pasiva, es decir, evalúa la protección que la vía ofrece cuando se ha producido el accidente y califica los tramos de una carretera desde las cuatro estrellas —las más seguras— hasta una. Las autopistas y autovías deberían tener la máxima valoración, sin embargo, el 52,2 por ciento de estas infraestructuras en España no alcanzan este nivel óptimo, según un estudio del RACC en el que se han analizado más de 14.000 km de vías de gran capacidad en nuestro país.
Se han examinado tres elementos de protección: diseño de las medianas, protección lateral de la calzada y diseño de las intersecciones. El parámetro más descuidado es el de la protección lateral, ya que un 27,9 por ciento de las vías estudiadas presentan problemas de concentración de obstáculos rígidos a escasa distancia de la calzada, guardarraíles sin proteger, así como falta de sistemas de contención y terraplenes.
Mejor parados salen los otros dos aspectos, ya que sólo en el 11,5 por ciento de las carreteras estudiadas las medianas de estas autovías y autopistas presentas importantes deficiencias; y el 93 por ciento de las intersecciones alcanzan la valoración de cuatro estrellas, la mayoría de ellas a dos niveles y con carriles de incorporación suficientes.
Una vez ponderado estos resultados parciales se puede hacer una radiografía de global de la protección que ofrecen las vías rápidas y los resultados son concluyentes. Además de que más de la mitad de las autopistas y autovías no alcanzan las cuatro estrellas, el 3,8 por ciento ofrecen poca o escasa protección en caso de accidente —una o dos estrellas—.
La Rioja, País Vasco y Andalucía, por este orden, son las Comunidades Autónomas con mayor proporción de carreteras con una y dos estrellas, mientras que Madrid encabeza la lista negra de tramos con una sola estrella.
Para el RACC la única solución posible es aumentar la inversión en el mantenimiento y conservación de las vías rápidas, mientras esto no suceda será mejor que si te sucede un percance sea en una zona de cuatro estrellas."
sds
"Más de la mitad de las grandes vías españolas no pasan el corte de seguridad que se supone que deben tener las carreteras de estas características.
El protocolo RPS se centra en la seguridad pasiva, es decir, evalúa la protección que la vía ofrece cuando se ha producido el accidente y califica los tramos de una carretera desde las cuatro estrellas —las más seguras— hasta una. Las autopistas y autovías deberían tener la máxima valoración, sin embargo, el 52,2 por ciento de estas infraestructuras en España no alcanzan este nivel óptimo, según un estudio del RACC en el que se han analizado más de 14.000 km de vías de gran capacidad en nuestro país.
Se han examinado tres elementos de protección: diseño de las medianas, protección lateral de la calzada y diseño de las intersecciones. El parámetro más descuidado es el de la protección lateral, ya que un 27,9 por ciento de las vías estudiadas presentan problemas de concentración de obstáculos rígidos a escasa distancia de la calzada, guardarraíles sin proteger, así como falta de sistemas de contención y terraplenes.
Mejor parados salen los otros dos aspectos, ya que sólo en el 11,5 por ciento de las carreteras estudiadas las medianas de estas autovías y autopistas presentas importantes deficiencias; y el 93 por ciento de las intersecciones alcanzan la valoración de cuatro estrellas, la mayoría de ellas a dos niveles y con carriles de incorporación suficientes.
Una vez ponderado estos resultados parciales se puede hacer una radiografía de global de la protección que ofrecen las vías rápidas y los resultados son concluyentes. Además de que más de la mitad de las autopistas y autovías no alcanzan las cuatro estrellas, el 3,8 por ciento ofrecen poca o escasa protección en caso de accidente —una o dos estrellas—.
La Rioja, País Vasco y Andalucía, por este orden, son las Comunidades Autónomas con mayor proporción de carreteras con una y dos estrellas, mientras que Madrid encabeza la lista negra de tramos con una sola estrella.
Para el RACC la única solución posible es aumentar la inversión en el mantenimiento y conservación de las vías rápidas, mientras esto no suceda será mejor que si te sucede un percance sea en una zona de cuatro estrellas."
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