Frey Dario
Curveando
Os voy a contar una anécdota que se quedó en un susto y que pudo ser una tragedia:
Hace dos meses aproximadamente circulaba de regreso a casa detrás de un todoterreno y un turismo; mi primera intención fué adelantarlos en un tramo recto que atraviesa una trinchera de unos 10 metros de altura, pero apareció un camión de frente y opté por seguir detrás del turismo, cuando inesperadamente apareció de repente rodando un pedrusco del tamaño de una pelota de baloncesto.
Yo, en un principio pensé que era una piedra que se había soltado de la pared de la trinchera que cruza la carretera en ese tramo, pero también me extrañó el tamaño y el color de la piedra (la trinchera es de pizarra y tiene arbusto bajo y la piedra era de roca caliza y apareció de repente).
El turismo que me precedía no la pudo esquivar y pasó literalamente dando tumbos por encima de la citada roca. Además del susto que se llevaron sus ocupantes, desconozco la avería que le pudo causar en los bajos del coche, pero sí aprecié que le reventó la rueda trasera derecha. El resto del camino hasta casa seguí pensando en la extraña aparición del "meñusco" y en lo que pudo haber ocurrido.
Pues hace una semana me enteré del enigma fantasmal de la piedra surgida del cielo: Resulta que aproximadamente a un kilómetro de donde ocurrió el percance hay una cantera de granito que, de vez en cuando efectúa voladuras controladas con dinamita, dichas voladuras están coordinadas con la guardia civil para que los agentes corten el tráfico durante un tiempo antes y después de la explosión y con un radio de seguridad suficiente. Desconozco cuál fué el problema de semejante descoordinación entre el encargado de la cantera, el de la voladura y los responsables de la guardia civil para enviar la patrulla a cortar el tráfico (cuando llegaron ya había ocurrido el percance).
Por fín descifré el enigma de la piedra surgida del cielo: nada más y nada menos que vino volando desde la citada cantera de piedra.
Lo que pudo ocasionar ese "meteorito" sería una auténtica tragedia, que por suerte por lo menos para mí, sólo se quedó en un susto. Lo que no pasa en este país no pasa en ninguna parte del universo conocido.
Ahora, además de preocuparse del tráfico que viene de frente y del que viene a nuestra espalda, de vez en cuando también hay que mirar para arriba por si aparece una piedra surgida del cielo. Yo cada vez que paso por esa trinchera siempre hecho un rápido vistazo hacia arriba.
Perdón por el tocho pero hoy me sentía inspirado para escribir y con el susto de ese día como un mero recuerdo ya algo lejano.
Un saludo en V y cuidaros mucho por la carretera.
Hace dos meses aproximadamente circulaba de regreso a casa detrás de un todoterreno y un turismo; mi primera intención fué adelantarlos en un tramo recto que atraviesa una trinchera de unos 10 metros de altura, pero apareció un camión de frente y opté por seguir detrás del turismo, cuando inesperadamente apareció de repente rodando un pedrusco del tamaño de una pelota de baloncesto.
Yo, en un principio pensé que era una piedra que se había soltado de la pared de la trinchera que cruza la carretera en ese tramo, pero también me extrañó el tamaño y el color de la piedra (la trinchera es de pizarra y tiene arbusto bajo y la piedra era de roca caliza y apareció de repente).
El turismo que me precedía no la pudo esquivar y pasó literalamente dando tumbos por encima de la citada roca. Además del susto que se llevaron sus ocupantes, desconozco la avería que le pudo causar en los bajos del coche, pero sí aprecié que le reventó la rueda trasera derecha. El resto del camino hasta casa seguí pensando en la extraña aparición del "meñusco" y en lo que pudo haber ocurrido.
Pues hace una semana me enteré del enigma fantasmal de la piedra surgida del cielo: Resulta que aproximadamente a un kilómetro de donde ocurrió el percance hay una cantera de granito que, de vez en cuando efectúa voladuras controladas con dinamita, dichas voladuras están coordinadas con la guardia civil para que los agentes corten el tráfico durante un tiempo antes y después de la explosión y con un radio de seguridad suficiente. Desconozco cuál fué el problema de semejante descoordinación entre el encargado de la cantera, el de la voladura y los responsables de la guardia civil para enviar la patrulla a cortar el tráfico (cuando llegaron ya había ocurrido el percance).
Por fín descifré el enigma de la piedra surgida del cielo: nada más y nada menos que vino volando desde la citada cantera de piedra.
Lo que pudo ocasionar ese "meteorito" sería una auténtica tragedia, que por suerte por lo menos para mí, sólo se quedó en un susto. Lo que no pasa en este país no pasa en ninguna parte del universo conocido.
Ahora, además de preocuparse del tráfico que viene de frente y del que viene a nuestra espalda, de vez en cuando también hay que mirar para arriba por si aparece una piedra surgida del cielo. Yo cada vez que paso por esa trinchera siempre hecho un rápido vistazo hacia arriba.
Perdón por el tocho pero hoy me sentía inspirado para escribir y con el susto de ese día como un mero recuerdo ya algo lejano.
Un saludo en V y cuidaros mucho por la carretera.
