Pues nada majos, os escribo para saludaros y recordaos que en estos días hay que estar muy atento, porque los malos no siempre vienen por el otro carril... ;D
Os cuento, esta mañana me dirigía al trabajo a eso de las 9:00, hora zulú ;D. Vivo en Madrid y trabajo en la Ciudad Universitaria. Pues iba tranquilamente, hoy llevaba la GS porque la K sigue malita :-[, cuando me he encontrado, así, casi de sopetón un charquito de agua. Teniendo en cuenta que estábamos casi a 0º (ni frío ni calor), era lógico pensar que el agua hubiera pasado a su estado sólido y, desgradiadamente, así fue...Nada, cuando he querido reaccionar estaba en el suelo, más sorprendido que dañado, gracias a Dios. Alguna raspadura, más quemadura que otra cosa, pero nada importante.
.
La GS sólo ha sufrido daños en uno de los protectores del cilindro de fibra que se ha roto, y en la maleta, muy poquito, que, también, ha contribuido a parar el golpe, pero, afortunadamente, nada más. Un chavalote que pasaba en Vespa me ha ayudado a levantar la máquina, he vuelto a casa a cambiarme los pantalones que estaban "pelín" negros y de nuevo al curro.
Bueno, la moraleja de esta charleta que os cuento es: mucho cuidadín durante estos días, sobre todo por la mañana y si hay (hubo) agua en la calzada. Extremad las precauciones para que no os pase lo que a mí...
Besitos y cuidadín...
J.
Os cuento, esta mañana me dirigía al trabajo a eso de las 9:00, hora zulú ;D. Vivo en Madrid y trabajo en la Ciudad Universitaria. Pues iba tranquilamente, hoy llevaba la GS porque la K sigue malita :-[, cuando me he encontrado, así, casi de sopetón un charquito de agua. Teniendo en cuenta que estábamos casi a 0º (ni frío ni calor), era lógico pensar que el agua hubiera pasado a su estado sólido y, desgradiadamente, así fue...Nada, cuando he querido reaccionar estaba en el suelo, más sorprendido que dañado, gracias a Dios. Alguna raspadura, más quemadura que otra cosa, pero nada importante.

La GS sólo ha sufrido daños en uno de los protectores del cilindro de fibra que se ha roto, y en la maleta, muy poquito, que, también, ha contribuido a parar el golpe, pero, afortunadamente, nada más. Un chavalote que pasaba en Vespa me ha ayudado a levantar la máquina, he vuelto a casa a cambiarme los pantalones que estaban "pelín" negros y de nuevo al curro.
Bueno, la moraleja de esta charleta que os cuento es: mucho cuidadín durante estos días, sobre todo por la mañana y si hay (hubo) agua en la calzada. Extremad las precauciones para que no os pase lo que a mí...
Besitos y cuidadín...

J.