norte
Curveando
Os quería contar mis impresiones después de hacer unos cuantos kms por la serranía de Cuenca a lomos de semejante joya 
La primera impresión que tienes es lo llamativo del frontal, y lo alta que es la moto. Otro detalle interesante es el aspecto minimalista de todo el conjunto además de ciertas soluciones bastante ingeniosas como el sistema de regulación de pantalla, que consiste en una especie de perno localizado delante de la tija que con solo levantarlo te permite poner la pantalla en el ángulo que más te apetezca.
Una vez te subes en ella, la altura se hace todavía más evidente y el manillar está bastante alejado inclinándote ligéramente hacia adelante, pero se puede decir que es una moto cómoda, aunque yo no la usaría para tiradas muy largas puesto que el asiento es duro de cojones, sigue siendo impresionante el poco peso que transmite, la mayoría de componentes denotan calidad a raudales.
Solo poner en marcha el motor, el escape emite un sonido espectacular que ya indica que estás sobre un motor con ganas de juerga, me recuerda al de la V-Strom pero sin finura y encaminado a dar prestaciones, eso se traduce en que por debajo de las 4000 rpm apenas hay bajos y funciona de forma bastante brusca, eso sí, vibra muy poco, por encima de esas rpm el motor se vuelve más suave a la vez que hay que tener bastante tiento a la hora de enroscar el gas, la potencia es bastante bruta y cuesta dosificar hasta que te acostumbras.
El recorrido de la maneta del embrague es mínimo, lo que significa que de entrada ya sale como un tiro, aunque eso es algo a lo que rápido se le pilla el truco haciéndola todavía más divertida, el cambio es brutal tanto para cambiar, como para reducir, además es rápido, pero que muy rápido, y gracias al embrague antirrebote, te permite hacer reducciones rápidas y sin miramientos. Las curvas la encara a la menor insinuación que le hagas a la moto con una ligereza tan sorprendente que, hasta que no te acostumbras, plegas y te cierras más de lo necesario, literálmente se mete a saco en curva, aunque enseguida te haces también a la moto que en definitiva va sobre railes por donde tu quieras
Resumiendo, moto muy ratonera, divertida, rápida aunque con algunos defectillos como por ejemplo el calor que transmite, una pata de cabra demasiado larga que deja la moto casi vertical con lo que hay que ir con ojo donde la aparcas que no se pueda caer hacia el lado contrario, y poca cosa más... quizás el cuadro que para mi gusto es demasiado pequeño y algo complicado de leer.
El diseño desde luego que no pasa desarpecibido, es de los que ganas más al natural que en foto, es rarilla de entrada pero también te acostumbras enseguida. Otro aspecto que por lo menos a mí me gustó mucho es el de carecer de cualquier tipo de ayuda (ABS, control de tracción, etc...) ya tiene suficiente con una suspensión Olhins de serie y una frenada de vértigo, lo que la convierte en la esencia pura de la moto, es decir, que la tienes que conducir tú y no perdona fallos, cosa que por otro lado no le resta un apice en seguridad, ya que se trata de una máquina con unas posibilidades que están muy por encima de cualquier piloto "standar" con lo cual, siempre la conducirás por debajo de los límites de la moto salvo casos muy contados.
Para mí no deja de ser una especie de retorno a tiempos pasados en los que todo lo tienes que hacer tú, pero con tecnologías y prestaciones actuales... hecha para disfrutar sin miramientos. Desde luego no es una moto para principiantes, ni creo que lo pretenda, se trata más bien de una "motodroga" de las que engancha a medida que vas recorriendo kms con ella, siempre quieres más, dónde está el límite? difícil encontrarlo con la Morini :
Solo eché de menos algún sistema tipo como el Ducati que te permita variar la programación del motor de forma que se pudiese adaptar a cualquier circunstancia, no me veo con ella por ciudad, ojito que es muy rápida y no da sensación de velocidad :
Y por último quisiera dar las gracias a Gory que fue quién me brindó la oportunidad de probarla, además de que que me puso un caramelo que saboreé muy agusto



La primera impresión que tienes es lo llamativo del frontal, y lo alta que es la moto. Otro detalle interesante es el aspecto minimalista de todo el conjunto además de ciertas soluciones bastante ingeniosas como el sistema de regulación de pantalla, que consiste en una especie de perno localizado delante de la tija que con solo levantarlo te permite poner la pantalla en el ángulo que más te apetezca.
Una vez te subes en ella, la altura se hace todavía más evidente y el manillar está bastante alejado inclinándote ligéramente hacia adelante, pero se puede decir que es una moto cómoda, aunque yo no la usaría para tiradas muy largas puesto que el asiento es duro de cojones, sigue siendo impresionante el poco peso que transmite, la mayoría de componentes denotan calidad a raudales.
Solo poner en marcha el motor, el escape emite un sonido espectacular que ya indica que estás sobre un motor con ganas de juerga, me recuerda al de la V-Strom pero sin finura y encaminado a dar prestaciones, eso se traduce en que por debajo de las 4000 rpm apenas hay bajos y funciona de forma bastante brusca, eso sí, vibra muy poco, por encima de esas rpm el motor se vuelve más suave a la vez que hay que tener bastante tiento a la hora de enroscar el gas, la potencia es bastante bruta y cuesta dosificar hasta que te acostumbras.

El recorrido de la maneta del embrague es mínimo, lo que significa que de entrada ya sale como un tiro, aunque eso es algo a lo que rápido se le pilla el truco haciéndola todavía más divertida, el cambio es brutal tanto para cambiar, como para reducir, además es rápido, pero que muy rápido, y gracias al embrague antirrebote, te permite hacer reducciones rápidas y sin miramientos. Las curvas la encara a la menor insinuación que le hagas a la moto con una ligereza tan sorprendente que, hasta que no te acostumbras, plegas y te cierras más de lo necesario, literálmente se mete a saco en curva, aunque enseguida te haces también a la moto que en definitiva va sobre railes por donde tu quieras


Resumiendo, moto muy ratonera, divertida, rápida aunque con algunos defectillos como por ejemplo el calor que transmite, una pata de cabra demasiado larga que deja la moto casi vertical con lo que hay que ir con ojo donde la aparcas que no se pueda caer hacia el lado contrario, y poca cosa más... quizás el cuadro que para mi gusto es demasiado pequeño y algo complicado de leer.


El diseño desde luego que no pasa desarpecibido, es de los que ganas más al natural que en foto, es rarilla de entrada pero también te acostumbras enseguida. Otro aspecto que por lo menos a mí me gustó mucho es el de carecer de cualquier tipo de ayuda (ABS, control de tracción, etc...) ya tiene suficiente con una suspensión Olhins de serie y una frenada de vértigo, lo que la convierte en la esencia pura de la moto, es decir, que la tienes que conducir tú y no perdona fallos, cosa que por otro lado no le resta un apice en seguridad, ya que se trata de una máquina con unas posibilidades que están muy por encima de cualquier piloto "standar" con lo cual, siempre la conducirás por debajo de los límites de la moto salvo casos muy contados.
Para mí no deja de ser una especie de retorno a tiempos pasados en los que todo lo tienes que hacer tú, pero con tecnologías y prestaciones actuales... hecha para disfrutar sin miramientos. Desde luego no es una moto para principiantes, ni creo que lo pretenda, se trata más bien de una "motodroga" de las que engancha a medida que vas recorriendo kms con ella, siempre quieres más, dónde está el límite? difícil encontrarlo con la Morini :

Solo eché de menos algún sistema tipo como el Ducati que te permita variar la programación del motor de forma que se pudiese adaptar a cualquier circunstancia, no me veo con ella por ciudad, ojito que es muy rápida y no da sensación de velocidad :

Y por último quisiera dar las gracias a Gory que fue quién me brindó la oportunidad de probarla, además de que que me puso un caramelo que saboreé muy agusto



