El mismo demonio ha puesto en mis manos esta mañana una K1300R, y la he rechazado por dos veces, pero a la tercera he caido en la tentación; pero solo han sido unos 20 km, y tampoco estaba predispuesto a menospreciar mi F, porque pensaba: "por mucho que te empeñes en que la pruebe, no voy a apreciar tantas diferencias como para volverme loco por ella". El motor es inagotable y te permite ir a 60 en 6ª sin ningún titubeo; pero la verdad es que da un poco de miedo llevar tanta caballería; pero lo que mas me ha gustado ha sido la frenada, simplemente Im-presionante, y también me ha gustado ese cambio semiautomatico, que en realidad es un corte de encendido y alimentación al subir de marchas sin embrague; pero es muy rápido y enlaza las marchas a una velocidad de vertigo. Después de esos 20 km me he subido en la F y parecía un vespino; pero a los 100 km volvía otra vez a apreciar las cualidades de la F, y resumiendo, que es un pedazo de máquina; pero desproporcionada para las posibilidades de la carretera hoy día.