Llevo poco y no he tenido tiempo de leérmelos todos, a si que no se si esta repe, pero me arriesgare.
Un doctor recién salido de la universidad consigue trabajo en un pueblo de quinientos habitantes.
Cuando lleva un mes le pregunta a un vecino que cuando uno tiene ganas de echar una canita al aire, como se apañan, el vecino le responde, con toda la buena voluntad del mundo, que allí no hay casas de alterne, ellos bajan al rió y cogen a la burra, el doctor sin dejarlo terminar, se escandaliza y comenzando a manotear e insultando al vecino le dice que el es un doctor y no puede hacer esas cosas.
Pasados tres meses y estando el doctor desesperado, se subía por las paredes, decide bajar al rió y ver a la burra. Seguía sin agradarle la idea pero ya comenzaba a ver a la burra mas limpia e incluso le parecía mas bonita. Lo seguía viendo indigno y se volvió a su casa con una fiebre pollo impresionante.
Transcurridos otros tres meses, osease seis meses sin comerse una rosca y a base de cinco contra uno, por fin se decide y anocheciendo baja al rió, pensando que a esas horas no habría nadie. Coge un banquillo que llevaba a tal efecto lo coloca detrás de la burra, subiéndose en el, se baja los pantalones y se lía con la burra. Estaba tan enfrascado en el tema que no se da cuenta que poco a poco comienzan a llegar los vecinos, formándose una cola detrás de el. Cuando termina con el primero mira para atrás y viendo la cola pensó que todos estaban esperando su turno, no satisfecho todavía decide seguir y le hecho otro a la burra, asi uno detrás de otro.
Un vecino, cansado de esperar, decide acercarse al doctor para indicarle que todos están esperando, a lo que el doctor le contesta que tranquilos que hay burra para todos, el vecino le hace ver que lo que les preocupa no es eso, que el puede seguir luego, lo que temen es que canse mucho a la burra y no tenga fuerzas para cruzar el rió y llevarlos al puticlub del pueblo vecino que esta a la otra orilla.
Un doctor recién salido de la universidad consigue trabajo en un pueblo de quinientos habitantes.
Cuando lleva un mes le pregunta a un vecino que cuando uno tiene ganas de echar una canita al aire, como se apañan, el vecino le responde, con toda la buena voluntad del mundo, que allí no hay casas de alterne, ellos bajan al rió y cogen a la burra, el doctor sin dejarlo terminar, se escandaliza y comenzando a manotear e insultando al vecino le dice que el es un doctor y no puede hacer esas cosas.
Pasados tres meses y estando el doctor desesperado, se subía por las paredes, decide bajar al rió y ver a la burra. Seguía sin agradarle la idea pero ya comenzaba a ver a la burra mas limpia e incluso le parecía mas bonita. Lo seguía viendo indigno y se volvió a su casa con una fiebre pollo impresionante.
Transcurridos otros tres meses, osease seis meses sin comerse una rosca y a base de cinco contra uno, por fin se decide y anocheciendo baja al rió, pensando que a esas horas no habría nadie. Coge un banquillo que llevaba a tal efecto lo coloca detrás de la burra, subiéndose en el, se baja los pantalones y se lía con la burra. Estaba tan enfrascado en el tema que no se da cuenta que poco a poco comienzan a llegar los vecinos, formándose una cola detrás de el. Cuando termina con el primero mira para atrás y viendo la cola pensó que todos estaban esperando su turno, no satisfecho todavía decide seguir y le hecho otro a la burra, asi uno detrás de otro.
Un vecino, cansado de esperar, decide acercarse al doctor para indicarle que todos están esperando, a lo que el doctor le contesta que tranquilos que hay burra para todos, el vecino le hace ver que lo que les preocupa no es eso, que el puede seguir luego, lo que temen es que canse mucho a la burra y no tenga fuerzas para cruzar el rió y llevarlos al puticlub del pueblo vecino que esta a la otra orilla.