
Esa misma noche va a casa de su amigo, toca el timbre y dice:
"¡Mira lo que tengo!"
"Sí, le contesta el amigo, el tapón de la llanta del coche ¿De dónde lo sacaste?"
Bajando sensiblemente el tono de voz el tipo le replica:
"No te hagas el tonto. ¿Qué hacías hoy al mediodía en el motel?
El amigo se queda un instante callado, gira hacia adentro de la casa y grita:
"¡Querida... acá está el tapón que te robaron hoy en el supermercado!
