Ahí van mis opiniones tras 5.000 kms. en el mes de agosto, salvo unos 300 de autopista, todos por nacionales y corredoiras.
La moto una Trophy de algo más de 300 kilos a los que si añadimos algo de equipaje, artillera y un ""peazo"" piloto, nos vamos a los 500 kg.
Las ruedas presentan un desgaste uniforme, sin escalonamientos y creo que están a mitad de vida, lo que es un éxito, ya que en ésta moto, ningunas ruedas me han durado más de 8.000 kms. ( las Angel que traía, 4 o 5 juegos de PR 4 GT y unas Bridgestone T30 EVO).
Como prácticamente no me ha llovido, las opiniones son de seco y temperaturas altas. La primera sensación es la de confianza, aunque esto es muy subjetivo, ya que la mayoría de los usuarios, cambiamos de ruedas cuando las anteriores se han gastado y en muchos casos están cuadradas, de manera que el cambio siempre suele ser favorable.
Tras éstos kilómetros, las encuentro ágiles con una buena sensación en los cambios de apoyo. Prácticamente no han variado de presión, necesitando muy ligeros ajustes, aunque reconozco que soy un poco maniático a esos niveles. ( Yo las llevo a 2.6 y 3.0). Hice unos 15 kms. de pista de tierra por un corte de una carretera y yendo con cuidado no hubo mayor problema que el acojone de que se cayese la moto.
Ahora como parte negativa, entonaré mi mea culpa ya que me reía por lo bajini de los que decían que eran ruidosas, ya que los que tenemos una edad tenemos el oído menos sensible. Verdaderamente son ruidosas, principalmente en la franja de 70 a 90 km/h., no digo que sea un ruido molesto, pero son de las ruedas que he utilizado las que más suenan con diferencia.
Respecto al precio, me han salido en 333 euros, como un 12% más que las PR4 GT o las Bridgestone, pero me da la sensación que van a tener una vida más larga, de manera que vaya lo uno por lo otro. Solo me falta probarlas con agua en cantidad y posiblemente sean las que vuelva a poner, ya que no se han escalonado nada y trasmiten seguridad.