No dejo de pensar en ello. Mi padre jamás quiso que tuviese bicicleta o moto, ni tan solo unos patines... Él, tuvo una Moto-Guzzi de la época, con la que se marchó con mi madre en su viaje de novios.
Ahora soy yo el que está asustado... temeroso de que mi hijo tenga moto y le pueda pasar cualquier cosa.
No soy un padre protector, pero si que he estado atento como las gallinas, de todo lo concerniente a él y a su hermana. Recuerdo que cuando se caían, con el corazón en un puño por si era serio, esperaba a que se levantasen para quitarle hierro al asunto o para intentar ser pedagógico... que también vale.
Tengo miedo, si, pese a que yo mismo voy en moto. No lo puedo evitar. Sé de algunos (muy apreciados), compañeros y compañeras que comparten la afición con sus hijos pero... yo no puedo se me acelera el corazón.
Ahora soy yo el que está asustado... temeroso de que mi hijo tenga moto y le pueda pasar cualquier cosa.
No soy un padre protector, pero si que he estado atento como las gallinas, de todo lo concerniente a él y a su hermana. Recuerdo que cuando se caían, con el corazón en un puño por si era serio, esperaba a que se levantasen para quitarle hierro al asunto o para intentar ser pedagógico... que también vale.
Tengo miedo, si, pese a que yo mismo voy en moto. No lo puedo evitar. Sé de algunos (muy apreciados), compañeros y compañeras que comparten la afición con sus hijos pero... yo no puedo se me acelera el corazón.