para alpinismo de gran altitud, para cuerpos de bomberos en lugares llenos de humo, para deportes de gran esfuerzo mientras no lo prohíban (maratones, tours, ironman, triathlones, por supuesto natación) espeleología submarina, buceo, minería... y como bien dicen en el vídeo, para el espacio y, ya con los pies en la tierra, para pacientes de deficiencias respiratorias que precisan de llevar pesadas botellas de oxígeno a diario (como mi padre, por ejemplo) que podrían ir captándolo del aire de alrededor. Si eso es cierto... premio Nobel ya!!