Pues empezad por lo fácil y barato, comprobad si la clema está bien conectada.
Para llegar a ver el cable hay que quitar la tapa lateral del carenado izquierdo.
No es difícil, son dos T25 por la parte delantera, bastante evidentes, un par de tetones de goma, unas pestañas de plástico y una especie de velcro.
En esta foto está todo situado más o menos, con una X los tornillos, círculos los tetones de goma, que salen a presión, el rectángulo de arriba es una especie de velcro con el que no hay que hacer nada, y por último las dos pestañas de arriba.
MUCHO OJO porque son pequeñas y haciendo palanca se pueden romper con facilidad. La idea es quitar tornillos, aflojar tetones con cuidado, Una vez flojo el carenado, sólo quedará sujeto por las pestañas. Bueno pues salen hacia arriba y hacia atrás. Coges con cuidado el carenado suelto y lo empujas ligeramente hacia arriba y hacia la derecha, como en diagonal, moviendo la pieza con cuidado. Así salen. Como hagas palanca de lado abriendo el carenado, tires en vertical, o hagas cosas raras, DEP pestañas y luego a ver quién sujeta eso a la moto otra vez.
Una vez quitado el carenado pues ya se debería ver la clema de la guantera. Quizá estorbe el embellecedor de la radio, pero bueno son tres tornillos más, sin complicación alguna más allá de buscar hueco al plástico y recordar dónde va cada tornillo. Bueno y el cable de la botonera, si tenéis radio. Pero lo podéis dejar colgando sin más, o quitarlo, no tiene mayor importancia.
Una vez descubierta esa zona, se verá la conexión de la guantera, y un cable (conectado o no) muy evidente, que es el de alimentación del cierre centralizado. Reconectar, limpiar, o lo que sea, y comprobar si funciona. Si no es el cable pues vete a saber, será la propia guantera, o ya habría que investigar más.
Para poner el carenado pues a la inversa, primero dejar colgando de las pestañas superiores, encajando la pieza hacia abajo y a la izquierda. Luego poner los tetones de goma en su lugar. El velcro ya se alinea él solo, así que por último los dos T25 delanteros.
Ni qué decir tiene que si os da miedo o lo que sea, al taller sin más. Que lo miren allí os saldrá más barato que un nuevo carenado por haberse roto las patillas esas.