Muy bueno el reportaje. Muy cierto lo que decía el trajeao del principio, se ha creado la idea de que los precios no podían bajar, cuando no hay ningún dato objetivo ni ninguna ley de mercado que diga eso. También muy cierto lo que decía la corresponsal inglesa, se sigue manteniendo que los pisos no van a bajar o el rollo del aterrizaje suave aún cuando va en contra de toda lógica, se ha establecido esa opinión, y nadie se atreve a decir que eso no puede ser, porque a base de estar diciéndolo durante años ya hemos perdido toda credibilidad, y porque como corra la idea de que esto se hunde... el castillo de naipes se va a tomar por culo.
Lo peor es que no se ha hecho nada para evitarlo, se ha demostrado lo débiles que son nuestros representantes ante los poderes económicos. Durante años no se ha hecho nada de nada, nada más que apagar el fuego con gasolina (recalificar suelo, otro gran mito). Sólo ahora, al final, se anuncian campañas importantes de viviendas de protección oficial y nuevas leyes del suelo, ahora que la cosa cae por si sola, justo ahora que a los grandes grupos de capital (que no constructoras) se les hace interesante migrar a la construcción de vivienda oficial.
Lo que no han dicho es que España es de los países del mundo, no sé si el primero, con más viviendas por número de habitantes. Cuando yo estudiaba aparejadores, hace unos 5 o 6 años, ya se decía que la construcción de obra nueva no era sostenible y que el sector tendería a la rehabilitación de la ya existente, y sin embargo se ha construído más que nunca... esto nos deja un panorama muy pero que muy negro a los que vivimos de la construcción, en cuanto emerjan todos los pisos al mercado la sobreoferta va a ser tan brutal que no va a haber qué construir en muchos años. ¿Qué va a ser de toda la gente que hay metida en un sobredimensionado sector de la construcción? Tradicionalmente, en los años de "vacas flacas" de los ciclos en la construcción el Estado compensa invirtiendo en obras públicas (van las inversiones actuales en vivienda oficial en este sentido?), pero esta vez la pelota está demasiado hinchada, hay demasiada gente, demasiado chupóptero, y nadie sabe como va a acabar esto.