En este mismo dilema estuve yo metido hace ya doce años... y la solución fue... moto de campo de 49 cc. (Montesa Cota 49 restaurada) desde los 9 años (antes hay que saber ir en bici bien... hasta el punto de controlar las derrapadas) y luego la "motito" con casco y con auriculares (intercomunicadores inalámbricos) para ir por pistas que no soporten tránsito.
Al principo en la puerta de casa (no pasan coches) a aprender a soltar embrague, frenar con el delantero y el trasero (y saber diferenciar cuando cada uno), cambiar bien de marcha y parar la moto sin que se cale. Dos meses, los fines de semana (es decir 8,4 semanas por dos dias a la semana y a 2 horas al dia), ... es bastante rato.
La primera excursión... toda en primera, para ir y para volver...(que de una moto como la que os digo ... es tela de lento); en la segunda excursión y posteriores, ya cambiamos a segunda y tercera (solo tiene tres marchas) y aprendemos una lección importante... si en una bajada con roderas, no frenamos... nos caemos "casi"... salvo que "papi" nos adelante por lo difícil y nos coja del pescuezo de la chaqueta... entonces solo se cae la moto.
Y ahora, tres años después... nos obligamos a sacar buenas notas para que nos dejen sacar la moto e ir de excursión (siempre con "papi"

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Supongo que cuando tenga 18 ya sabrá qué es lo que lleva entre manos... y si no es un "loco gilipollas", ... que ya haré yo lo posible para que no lo sea... (durante los otros seis dias de la semana que no le enseño a conducir)... sabrá dónde está el límite.
En cualquier caso es un asunto muy personal... por eso lo cuento como "ut supra".
Suerte (para todos los padres moteros y sus hijos... lo sean o no).