Reflexión

vander

Arrancando
Registrado
30 Ene 2008
Mensajes
3
Puntos
0
____________________________________________________________________________

El domingo pasado hacia sól. El aire era limpio, quieto, sin rastro de humedad que entorpeciera mirar a lo lejos; la temperatura, excelente, ese suave fresco que no molesta a la larga y que permite ponerse sin sudar la ropa protectora necesaria. Un día de libro para ir en moto.

El domingo pasado pensaba en todo esto mientras hacía una laaaarga cola en una atracción de un parque temático al que había ido acompañando a la familia.

No me sabia mal perderme un posible día motero ideal, o sí. Lo que me condujo a pensar que ahora, que tengo una moto tragamillas para ir al fin del mundo; que con los años he ido comprándome casco, botas, chaqueta, maletas, etcétera decentes; que dispongo de suficiente saldo como para permitirme almuerzo y cama de vez en cuando...es cuando voy en moto menos que nunca. ¡Y menos mal que las tardes moteras y las escapadas largas que aún consigo encajar en el apretado calendario familiar!

Hay gente que no quiere casarse/independizarse hasta que tienen un piso céntrico de 120m2 con muebles de roble macizo o que no se compran una moto hasta que han ahorrado lo suficiente para pagarse una, digamos -para no hacer publicidad a nadie-, ZX 1500 PS o una CBX 1325 XR y su correspondiente equipamiento a juego.

Me parece muy bien que hagan así, que ahorren, que prefieran renunciar antes que gastarse un dinero que nunca recuperarían en algo que no termine de satisfacerles del todo, que sepan tener paciencia.
Me parece muy bien, aunque discrepe completamente de ese planteamiento. La vida no es eterna, y las oportunidades que pierdas ahora, quién sabe si volverán a repetirse. Y en el tema motero, a diferencia de muchas otras cosas de la vida, puedes gozar ahora de algo que no es del todo a lo que aspiras, y aun así, no perderás un ápice de placer cuando consigas hacer realidad tu sueño; incluso puede que la valores más todavia desde la experiencia. Y tampocohay que descartar que cuando se cumpla, puede que tu sueño no sea tan maravilloso como habías creído.

Para resumir y concretar, creo que cualquier moto es mejor que ninguna moto; que tener una moto que no colme tus deseos no impedirá que disfrutes de esa maravilla cuando la consigas, más bien al contrario; que más vale cualquier moto hoy que quién sabe si supermoto mañana, que el día se termina a las doce de la noche, y el reloj no volverá atrás para dejarte hacer lo que quizás mañana querrías haber hecho hoy.
Recordé con una sonrisa mis antiguos días de motero principiante. Cuando no me importaba perder un fin de semana motero porque nada me impedía que el siguiente lo fuera. Cuando, por ejemplo hice mi segundo viaje largo, con una XT de arranque "a pata", a Inglaterra, ¡sin nada, nada, impermeable! Me alegro muchísimo de haber hecho ese tipo de cosas sin esperar a tener todas las condiciones óptimas, para recordar con nostalgia, para dar la lata a los amigos y poder contar batallitas a mis hijos. Así que comprendo y aplaudo a esos que agarran su Scoopy y se van a ver un par de Grandes Premios.
Hace más de 80 años uno de lso hermanos Guzzi se fue de Italia al Cabo Norte, y hace 30 las Ossa Yankee ponían a cien a los quemados de la época. Los caballos, carenados, equipamientos high-tech, navegadores, buen asfalto, etcétera, ayudan al placer de viajar, pero se puede hacer perfectamente sin ellos. Y se pueden disfrutar las curvas sin suspensiones regulables ni frenos radiales.
No dejes para maána el garbeo motero.

Por Josep M. López Besora


__________________________________________________________________________________




No podría estar más de acuerdo.
 
Estoy de acuerdo.

La moto no hace al motero.

Hace unos dos años, en uno de esos dias de locura, me fui con mi Dylan 125 desde Burgos a un pueblo de Cantabria, a unos 165 km y 3 puertos, y otros tantos de vuelta.
A la vuelta, saliendo , me acompañó unos km mi cuñado con su Virago 1100.
Al salir, coincidimos en una gasolinera con una Suzuki M 1800 R. Nos quedamos mirandola y al tio se le hace el culo gaseosa explicandonos la novedad. Bien y normal, pedazo de moto.
Pero al decirle que me iba para Burgos en la 125, me dice señalandola y con cara de susto....''en eso??''. Si en eso....le conteste.

Con el tiempo y por mi cuñado se, que el de la 1800 no ha hecho mas de 5.000 km en su moto y yo en mi Dylan, van ya los 18.000 km. Amen de otras motos.

Quien es mas motero ???  La moto no hace al motero.

Vssssssssssss
 
Valorar y disfrutar de lo que se tiene en cada momento es uno de los pilares de la felicidad
 
Unos familiares de mi mujer tienen un montón de pasta, y los dos hijos han tenido moto desde niños, pagada por siempre por papá, claro. Recuerdo que con 14 años tenían una Aprilia 125 y una Gilera SP02, y vimos pasar a un chaval en una MZ reluciente. Los dos subnormales se pusieron a reírse de la MZ, que si era una moto cutre, etc. Yo les hice notar que sus flamantes deportivas de 30CV estaban pésimamente cuidadas: cadenas destensadas, niveles de líquidos fuera de límites, óxido, por doquier, piezas rotas no sustituidas. Les daba igual: lo que no cuesta no se valora, pero el "tanto tienes, tanto vales" si lo entendían rápido.

Por otro lado, no estoy de acuerdo en lo de entramparse, y prefiero ahorra y comprar a tocateja una moto dentro de mi presupuesto (aunque pueda comprar a plazos una más cara)- España es el país más endeudado de Europa, y uno de los más endeudados del mundo, porque vivimos por encima de nuestras posibilidades, comprando casas, coches, motos y plasmas que sólo podemos pagar a crédito.
 
Muchas veces he pensado que no exprimimos los momentos por miedo a romperlos... y le echamos la culpa a los bienes materiales (si yo tuviera...) por no exprimirlos. Es una autoexcusa.

Es un mal endémico de la sociedad de consumo. Mi moto, la tuya, cualquiera nos lleva más lejos de lo que somos capaces de ir sin miedo a lo desconocido.

Queremos la última tecnología para dejarla dormir y envejecer mientras la tenemos... la cambiamos cuando sale algo más extremo, un horizonte más allá, sin importar el precio ("tengo botas para ir al himalaya, pero las uso en ciudad porque no puedo ir al himalaya, ni jamás podré" alguno me dijo hace tiempo).

El otro día, viendo un vídeo del dakar, le dije a mi esposa que me gustaría hacer algo parecido... -"AHORRA"- fue su respuesta... -"¿Cuándo lo tendré ahorrado? y sobre todo, ¿Con qué cara me gasto media hipoteca en un sueño?... sólo quiero que veas el vídeo y escuches mi perolata, no quiero echarte de menos en África y que me mandes al carajo por pulirme unos cuantos kilos".. esa fue mi contrarrespuesta (bonito palabro).

Buscamos felicidad en seres inertes mientras la vida pasa por nosotros. De vez en cuando, a mí también se me va la pinza. Por suerte, no quiero tarjetas de crédito excepto para pagar gasolina.
 
Atrás
Arriba