SER GADITANO

brujicanalla

Curveando
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Jejejeje a ver si os vais enterando ¡¡cohone¡¡

>SER GADITANO ........
>
>El gaditano no te llama por teléfono: te da un toque.
>El gaditano no dice hola: te dice ¡que pasa pisha!
>El gaditano no se cae: se mete un carajazo
>El gaditano no se enamora: está pillaísimo
>El gaditano no trata de convencerte: Te raya
>El gaditano no se lanza: Se embala
>El gaditano no besa: Te da un morreo
>El gaditano no tontea con una chica: está de mamoneo >
El gaditano no bebe mucho: Se pone ciego
>El gaditano no es que no entienda: no lo coge
>El gaditano no te da la espalda: Te manda ar carajo
>El gaditano no te llama la atención: .... quiillo, pisha!!
>El gaditano no acaricia: soba
>El gaditano no molesta: da por culo
>El gaditano no te golpea: te mete una hostia
>El gaditano no trabaja a tiempo parcial: tiene un currito
>El gaditano no tiene amantes: tienes dos o tres pibitas >
El gaditano no se impresiona: lo flipa
>El gaditano no orina: se mea (ande pué)
>El gaditano no sufre de diarrea: se caga por la pata abajo >
El gaditano no va rápido: va a carajo sacao
>El gaditano no se va del lugar: se pira
>El gaditano no duerme: se queda sobao
>El gaditano no se rie a carcajadas: se escojona
>Al gaditano no le surge un problema: le cae un marrón de cojones >
El gaditano no te pide que lo lleven : pide que lo acerquen >
El gaditano no es un presumido: es un chuloplaya
>El gaditano no es un insensato: es un carajote
>El gaditano no toma el autobús: pa qué si está tó al lao, voy a pata >
El gaditano no es buena persona: es buena gente (¿personalidad múltiple?)
>El gaditano no es un tipo tranquilo: es un lacio
>El gaditano no es despitado: está acarajotao
>El gaditano no es un gandul: es un juancojones
>El gaditano no hace algo mal: la caga
>El gaditano no liga: se come un rosco
>El gaditano no pierde el tiempo: esta mamoneando
>El gaditano no dice tardaré en bajar: dice ahora bajo (y te puedes quedar esperando)
>El gaditano no habla claro: te lo dice to a la puta cara
>El gaditano no esta cansado: esta reventao
>El gaditano no ve a una chica fea: ve un choco
>El gaditano no te dice que estás equivocado: te dice "te quié í yaaaa..." (traducción: ¿te quieres ir ya... al carajo?)
>El gaditano para decir que sí no niega dos veces; niega tres: "'¡no ni ná!"
>El gaditano no se enfada : se rebota
>Al gaditano no le sale algo mal: se le va tó a la mierda.
>
> ........ y más.
 
Te añado algunas mas

El Gaditano no comprende, ASUNTA
El gaditano no va por dirección prohibida, va A CONTRAFLECHA
El gaditano no tiene miedo , tiene JINDAMA
El Gaditano no está cansado, está GUARNÍO
El Gaditano no ve la dificultad de una cosa, sino que si tiene o no CACARUCA
El Gaditano no se da un golpe en la cabeza, sino una CHOCAÚRA
EL gaditano cuando se cae (que no sea de la moto) no se hace erosiones, se hace MATAÚRAS
El Gaditano no está pendiente de algo, está AL LIQUINDÓI
EL Gaditano no molesta, DA LA MATRACA
EL Gaditano no se da comilonas, se PONE PÚO
El Gaditano no es un gordo, es un ZAMBULLO
EL Gaditano no pisa una catalina, pisa una PLASTÁ

y como dice la copla :

     ¡ Guachisnay.... !
     Tuti contenti, tragati embuti
     nati Juannaja, quedati en Cái


kiyo...tekiyá pui
 
E que el zur, e epecia, y alguna ve conseguiremo que hablen azi en el palamento.... ;D
 
A ver los de la zona:

- Tres palabras que empiecen por Zeta:

...

...

...

...

...

...

Joé,... pero si es mu fasíl: Los zojos, las zorejas y las zuñas.

;D ;D ;D ;D ;D
 
Una historia pa los gaditanos, el resto no lo entendereis mu bien. Es un poco larga pero merece la pena. ;D ;D ;D

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"Euskera facil, gaditano dificil"

Me llamo Mikel Gorriarán , llevo 15 días en Cádiz y me estoy, o me están volviendo loco.
Os contaré mi historia. Soy investigador privado y he venido a Cádiz a resolver un caso simple, pero la verdad es que cada día que pasa se vuelve más complicado. Tan sólo se trataba de descubrir al amante de la mujer de un alto mandatario vasco; comprenderán ustedes por tanto que no dé su nombre, además porque me debo al secreto profesional.
En principio no tenía muchas pistas. Sólo sabía que el hombre en cuestión era de Cádiz, se llamaba Manuel Ramírez, que trabajaba en el puerto de Cádiz y que le conocían con el alias de “picha”. Así que el individuo en cuestión debía estar bien dotado, ya que además de amante de la mujer del político, eran conocidas sus correrías por el puerto de Bilbao. También usaba otro sobrenombre “quillo”.
Con estas pistas tomé el avión hasta Madrid y allí enlacé con el tren hasta Cádiz. Llegué a la estación, cogí un taxi y mientras iba camino del hotel, intenté entablar conversación con el taxista. La cosa quedó en eso, en el intento, porque que yo sepa una conversación es entre dos o más personas, pero el taxista no me daba opción ya que hablaba por los codos y de modo ininteligible. Lo hacía de forma sumamente apresurada y las pocas palabras que podía cazar al vuelo estaban incompletas. Quise preguntarle por el puerto, pero sabiendo que su respuesta no la entendería, lo dejé para mejor ocasión.
Llegué al Hotel Playa Victoria, y como mi interés era buscar al tal Manuel Ramírez, en un principio consulté la guía telefónica de la ciudad, pero como presumía, aquí había demasiados Ramírez. En mi tierra hubiera sido muy fácil, así que opté por buscar pistas en su lugar de trabajo. Salí a la calle y pregunté por el puerto. Un señor muy amable me dijo que lo mejor era coger el autobús de los Comes, pero para eso tenía que ir a Cádiz. Aquello me desconcertó. ¿Dónde estaba yo?. Empecé a atar cabos. Efectivamente cuando llegué a la terminal de la estación no ponía Cádiz, sino Cortadura y además recuerdo que en el trayecto di unas cabezadas y claro en ese intervalo pudo haber algún enlace, o algo, no sé. Lo cierto es que yo no me encontraba en Cádiz. Pero no debía estar muy lejos. Paré un taxi y con gesto decidido le dije al taxista que me llevara a Cádiz. Él me contestó ¿a Cádiz a dónde?, y le conteste algo enfadado que a Cádiz, joder a Cádiz; de una puta vez quiero llegar a Cádiz.
Ya luego el taxista con mucha paciencia y muy despacito me explicó que donde yo estaba era Cádiz, pero no era Cádiz. A ver si lo explico bien. Resulta que la gente aquí le llama Cádiz a la parte antigua y desde unas murallas para adelante le llaman Puerta Tierra. No sé si lo expliqué bien, pero yo ya lo he entendido.
Llegué por fin a la estación de autobuses de Comes, pedí un billete para el puerto y me subí al autobús correspondiente. El trayecto fue relativamente corto, si acaso 30 minutos, pero la verdad es que yo creía que Cádiz era más pequeño. Sin duda me había informado mal, y además mi trabajo aquí se complicaba puesto que habría que buscar en una ciudad más grande de lo que pensaba.
Pero mis sorpresas no habían acabado. Llegado a la estación terminal pregunté por el puerto. Mi interlocutor me miró con mal genio y me dijo que esto era el Puerto. Yo no entendía nada. ESE hombre enfadado y yo no veía barcos por ningún sitio.
La verdad es que el hombre tuvo más paciencia que el Santo Job. Me fue explicando poco a poco que aquello era el Puerto de Santa María, pero que por todo el mundo (todo el mundo menos yo) era conocido por el Puerto y además me dijo que eso no era Cádiz que Cádiz estaba allí enfrente, que el Puerto es un pueblo de Cádiz y que si lo que quería era ir al puerto de Cádiz que cogiera el vaporcito y me dejaría allí mismo.
Total, antes lo de Cádiz, que no era Cádiz, que era Puerta Tierra y ahora que el Puerto es un pueblo de Cádiz y entonces digo yo, ¿cómo le llaman al puerto, al de los barcos, al puerto de siempre?.
Subí por fin al que llamaban el Vaporcito del Puerto, que para que lo sepan ustedes no es un barco de vapor. No, porque aquí en Cádiz o dónde coño esté ahora, no le llaman a las cosas por su nombre. Si, le llaman vaporcito pero en realidad es un barco que va a gasoil.
Llegué por fin al puerto de Cádiz, que aquí le llaman el muelle. Una gracia que me a costado una gran pérdida de tiempo y dinero, que además no se como justificar ante mi cliente, porque me temo que no me va a creer y tampoco quiero darle muchas explicaciones porque seguro que voy a ser objeto de burlas.
Bien, obviaré todos estos inconvenientes y pasaré a la acción. De siempre las mejores informaciones se consiguen en los bares, así que me acerqué al bar más próximo al puerto (perdón al muelle) uno que se llama “Lucero” y pedí un tubo (de cerveza, se entiende) pero el camarero no lo entendió. Yo más o menos le expliqué lo que quería y él con aire de suficiencia me dijo: “a, usted lo que quiere es un bo”. Joder, no sabía yo que también tenían un idioma particular los gaditanos.
Me acomodé en la barra del bar y puse la oreja atenta a lo que allí se cocía. Me acerque la cerveza a los labios, tomé un trago largo y de pronto escuché la palabra mágica: “picha”.
¡Dios!, por fin la suerte vino de cara. Casi no podía creérmelo. Me atoré con la cerveza, me puse perdido, pero merecía la pena. Había encontrado a la persona que estaba buscando. Bendita suerte la mía, Con disimulo me acerqué a los dos hombres que charlaban de un tema que no comprendía, pero tenía que ver con la música, con los coros y con un jurado, que por lo visto no tenía ni idea. Gente, sin duda muy creyente, aunque mal hablados, eso si se escapaban de vez en cuando, demasiado de cuando en cuando, palabras mal sonantes, que no creo que deban reproducirse aquí, pero a mi lo que me interesaba es que uno de ellos fuera el “picha”, y para asegurarme que ese era el tipo que buscaba, pedí otro “bo” y pegué la oreja a la conversación. Efectivamente, a lo largo de la conversación, uno de ellos, un tipo bajito (1,65 no más) moreno, 40 años, delgado, que no tenía ni media bofetada, era llamado constantemente “picha” por su compañero de conversación. Jo, pensé Dios le da pañuelos a quien no tiene nariz. No sé si lo captan ustedes porque aquel tipo se estaba trajinando a la mujer de mi cliente y aunque esté mal decirlo, porque soy un profesional, es una hembra de bandera. No me extraña que a ese tipo le dijeran el “picha” porque sin duda era lo único bueno que tendría.
Bueno, bueno, que me desvío de la trama. Había dado con el individuo y eso era lo importante. Esperé tranquilamente a que acabaran la conversación y seguí al “picha” con la idea de abordarlo solo y sin testigos. Y ocurrió un caso hasta ahora inédito en mi dilatada carrera. Se encontró con un amigo suyo y al saludarlo le dijo: ¿qué pasa “PICHA”?, y el otro contestó: muy bien “picha” , ¿y tú?.
Sí efectivamente; había dos individuos con el mismo alias y a decir verdad, este segundo tipo tenía más planta de amante que el escuchimizao de antes pero en esto de la investigación nunca se puede descartar a ningún sospechoso. Lo malo de todo esto es que ahora tendría que doblar mis esfuerzos y hacer seguimientos alternativos, para comprobar cual de ellos era el verdadero amante.
Opto en principio por seguir a este último ya que lo veo con mejor planta, pero sin descartar, como buen profesional que soy, al tipo escuchimizado. El individuo toma un autobús y entabla conversación con un conocido suyo al que llama “quillo”. ¡Dios! Esto se complica a cada paso. Ahora tengo a dos “pichas” y a un “quillo”. Mi instinto de detective me dice que estoy siguiendo una pista falsa. Empezaré de nuevo; así que vuelvo al bar del “muelle” y le pregunto al camarero si conoce a un tal Manuel Ramírez que trabaja en el puerto. Me dice que con esos datos no le suena y que además el Puerto le queda algo lejos. Caigo entonces en la cuenta y rectifico diciéndole que donde trabaja es en el “muelle”. No cae. Le digo entonces que le conocen con el apodo de “picha” y también con el de “quillo”. El tipo del bar se carcajea en mi cara y me aclara que aquí todo el mundo es “picha” y “quillo”. La poli sin duda, aquí lo tiene complicado.
Te estas luciendo Mikel, me digo para mí. Otra carcajada, no obstante el camarero me dice que pregunte por “Paco el bigote” que en el muelle es el que contrata a los estibadores. Después de darle todos los datos de que disponía sobre el tal Manuel Ramírez, que según tenía entendido trabajaba en el muelle y que durante seis meses trabajó en el puerto de Bilbao, (lo de los apodos lo omití, porque con el cachondeo del camarero ya tuve bastante) aquel me contestó de mala gana, que ya no trabajaba allí, que según tenía entendido ahora trabajaba en la Residencia. Yo le pregunté que ¿en cuál residencia?. Él contestó, con menos ganas que antes, que en cual iba a ser, joé, pues en la Residencia. Era ya tarde y como la verdad había conseguido bastante información, volví al hotel a comer. Lo de la residencia lo dejaría para mas tarde.
Pensé que era buena idea tomar un pescado para el almuerzo, que aquí lo habría de haber bueno con tanta costa, así que le pregunté al camarero que si tenía pescado. El me contestó que tenía unas “zapatillas mu fresquitas”. A mí sinceramente me importaba un pimiento lo que se calzaba el fulano. Yo lo que quería era comer y además no sabía a que venía aquello de las zapatillas. El tipo me estaba vacilando o tendría a medias una zapatería con algún cuñado y me hacía la propaganda. Obvié el comentario e insistí en lo del pescado, pero el camarero volvió con lo de las zapatillas fresquitas . Puse mala cara y el camarero debió notarlo, ya que inmediatamente me aclaró que así se llaman aquí a las doradas. Gente rara esta de Cádiz. No hay Dios que los entienda con lo que corren hablando, las palabras que las pronuncian a medias y para colmo le cambian el nombre a las cosas. Luego dicen que el euskera es difícil. No, euskera fácil, gaditano difícil.
Después de una buena siesta reparadora, volví a la faena. Tendría que averiguar a que residencia en cuestión se refería “Paco el bigote”. Deduje sin duda que tenía que ser muy conocida, por la forma con que el susodicho me dijo: “cual va a ser, joé, pues la residencia”. Perspicaz que es uno. En la misma recepción del hotel me dieron la información que necesitaba. La residencia estaba a cien metros del hotel. Un paseo siempre vendría bien, pero llevaba cierto tiempo andando y no encontré ninguna residencia. Pregunté a un transeúnte y me contestó que la había pasado, que estaba a dos bocacalles. Así que volví sobre mis pasos, pero no encontré ninguna residencia. Volví a preguntar. ¿Por favor la Residencia? Pues eso que tiene usted delante. Pero…..¡Eso es un HOSPITAL!. Aquí le decimos la Residencia, me contestó la señora y se quedó tan pancha y de camino me echó una mirada como diciendo, pareces tonto. Bien, a partir de ahora no volveré a caer en estas artimañas, porque para mí estaba claro que había algún tipo de complot, y entre todos los gaditanos intentaban marearme con nombre equivocados a cosas que solo pueden tener un nombre.
Investigue en el hospital y saqué un dato importantisimo, allí trabajaba desde hacia dos meses un tal Manuel Ramírez que estuvo un cierto tiempo en Bilbao, según me confirmó un celador de la Residencia. No pudo decirme su dirección concreta, aunque me dijo que vivía por la Plaza de Toros.
Iba, a pesar de la cantidad de datos “incorrectos”, cercando al sospechoso.
Dar con la Plaza de Toros sería tarea simple. Eso pensé, pero hasta el día de hoy ( y llevo quince días aquí) no he conseguido dar con ella. Y tiene que estar ahí, porque una Plaza de Toros es una Plaza de Toros y a eso no le pueden cambiar el nombre. Además a todo el que le pregunto me dice que “dos calles más pallá o una “mijita más palante”. Luego eso confirma mi teoría: hay una Plaza de Toros. Todos me hablan de ella, pero yo no la encuentro. Me estoy o me están volviendo loco.
Definitivamente dejo el caso y como dicen aquí me guannajo.

Mikel Gorriarán
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ta güena ¿ke no? ;D ;D ;D
 
.... Y má frasesita de Cai ;D ... y no me acordaba que las tenía.... ¡no ni ná! ;D ;D ;D

A lo que salga: Hacer algo de cualquier forma, sin ponerle empeño.
A mi me diguá: El hablante expresa que los demás pueden hacer lo que quieran, él siempre estará de acuerdo.
¿Aondeva carajo?: Se suele utilizar cuando el hablante se encuentra a un conocido por la vía pública, para conocer el destino del cuestionado.
A pata, a pata: El hablante se niega a coger el autobús.
Aro, aro: Su significado: Sí sí estoy en total acuerdo contigo.
Bastinaso: Exageración (para bien o para mal).
Buya: Aglomeración de personas en lugares indeterminados.
Diooooooooo: Se utiliza para expresar incredibilidad al escuchar algo.
Enga, a ve si un diíta quedamo´: Solo es una forma de despedirse. Si alguna vez te lo dicen nunca esperes una llamada de esa persona para quedar.
Enga, despué me paso, lo más seguro: Ciertamente, lo más seguro..... lo más seguro es que no se pase. El que utiliza esta frase acaba de recibir una invitación a la que no se atreve a rechazar con un simple "NO tengo ganas". Pero la persona que lo ha invitado sabe perfectamente al escuchar esta frase que no va a venir.
Este tío es tonto: Es una expresión de admiración al comprobar que el receptor no está de acuerdo con él (el emisor).
Eso es ajín: El hablante no le quiere dar más vueltas al tema.
Illo eso no pueé sé: El hablante ha divisado el trasero de una hermosa mujer, y se lo comenta a su amigo.
Ira killo esto es una mierda: Esta expresión se emplea justo después de que el hablante se haya dado cuenta de que lo que se esta realizando no esta saliendo correctamente.
Ira killo esto es una pollada: El emisor le indica al receptor que se puede realizar fácilmente.
Más gente quer caraho: Aglomeración de gente en lugares determinados.
¡¡No!! ¡¡que va...!!: Su significado: "Sí sí hazme caso, yo se lo que te digo".
Pamplina: Absurdez. Son palabras frases u oraciones que no tienen sentido en el momento en las que se emplean.
Paseo: Sustitución de la "plasa mina" en verano.
Plasa Mina: Lugar de reunión de un colectivo de jóvenes y puretas, donde alcoholizan su sangre con cubatas. A veces vuelan botellas y surgen peleas.
Polemetoelnaboenelojo: Se emplea como forma de revelación ante un acto con el que no se está de acuerdo.
Po lo va a hase su puta madre: El hablante esta cansado de trabajar.
¿Que está hasiendo cohone?: El hablante se admira de la acción que ha realizado un individuo próximo a él.
¡Que sí caraho!: El hablante se ha enfadado un poco al escuchar a su compañero no creer lo que él le dice.
Sabeloquetedigono?: Se emplea para recibir una afirmación del receptor, es decir, para confirmar que entiende lo que se habla.
Sino te var caraho: Su significado es el siguiente: Esto es lo que hay asi que... "lo tomas o lo dejas".
Sigarrito de la felicidá: Mezcla de tabaco y hachís forrado con un papel de fumar. También conocido como Porro.
Teskiarcarajo!: Se utiliza para mostrar desacuerdo.
Una caló der caraho: Se emplea cuando se suda por causas meteorológicas.
Yo me voia í ya: Se emplea para avisar que todavía no se va, es decir, se quedará aproximadamente 30 minutos o 1 hora desde el momento en el que se dice esa frase.
 
KILLO dile a Mikel Gorriarán, q como ese Manolo Ramirez venga "pa Huelva" y pregunte aqui por algun sitio, le diran "to pa lante, y alli a la derecha y depues a la izquierda y poquito mas alante y lo encontraras...", asi q no desespere. ;D ;D ;D.
Es q solo los andaluces nos entendemos como debe d sé. ::)
 
Tremendo lo de los gaditanos, y la historia esa del investigador vasco no veas... ;D
 
¡Pues mira tu que nací entre la Alameda y San Antonio... y no me entero de "ná"! ??? ???

Voy a tener que ir a hacer un cursillo de recuperación.... ::)
 
Abuelete dijo:
¡Pues mira tu que nací entre la Alameda y San Antonio... y no me entero de "ná"! ??? ???

Voy a tener que ir a hacer un cursillo de recuperación.... ::)

Ole, peasso sitio pa nassé!!! ;)

;D ;D ;D Con un par de días entre nosotros terminas cantando carnavale y tó! ;D ;D ;D
 
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