I
Iceman
Invitado
> > Un buen día el párroco de Goizueta se encontró
> > indispuesto con unos
> > fortísimos dolores abdominales. Dado el grave estado
> > en el que se
> > encontraba le trasladaron a la Residencia de San
> > Sebastián, donde fue
> > intervenido con urgencia.
> > Mientras el cura se encontraba dormido por lo
> > efectos de la anestesia,
> > en la habitación de al lado una joven madre soltera
> > daba a luz un
> > precioso retoño.
> > Desgraciadamente, la joven madre murió y el equipo
> > médico se planteó que
> > hacer con el niño.
> > Uno de los médicos, tras mucho cavilar dijo: " Mirad
> > vamos a ponerselo
> > al cura, al fin y al cabo el hombre seguro que le
> > dará una buena
> > educación"
> > Dicho y hecho, al despertar el párroco se encontró
> > con el bebé en su
> > regazo, asustado preguntó:
> > - ¿Pero esto qué es?
> > El médico se acercó y le dijo:
> > - "Mire este es el origen de sus dolores de
> > barriga..."
> > -" ¿Pero si esto es imposible" dijo el cura.
> > El médico le respondió:
> > -"No hombre, con lo que han evolucionado los
> > tiempos, ahora los hombre
> > se pueden quedar embarazados..."
> > El cura se quedó pensativo decidiendo qué hacer con
> > el niño.
> > "Bueno cuando vuelva al pueblo diré que es hijo de
> > una hermana mía que
> > ha fallecido y yo me haré cargo de educarlo..."
> > El párroco volvió así al pueblo y contó su historia.
> > No sin algún recelo
> > los habitantes del pueblo se acostumbraron a ver a
> > partir de aquel día
> > al nuevo vecinito que fue bautizado con el nombre de
> > Ion
> > Pasaron los años y el cura se hizo muy mayor, cuando
> > Ion contaba con 25
> > años, el cura enfermó y en su lecho de muerte
> > comenzó a pedir:
> > -"¡Que venga Ion! ¡Que venga Ion!"
> > El joven corrió al lado del cura
> > ¿Qué quiere tío?
> > El cura haciendo acopio de valor le dijo:
> > - Mira Ion tengo un gran secreto que contarte y
> > antes de morir debo
> > decírtelo...
> > "Ion, interrumpió al párroco y le dijo:
> > Tranquilo tío, no hace falta que me digas nada,
> > desde hace años ya me he
> > imaginado que de verdad es usted mi padre..."
> > -¡No! -dijo el cura- yo soy tu madre, tu padre es el
> > ¡¡Arzobispo de
> > Cuenca!!
> > indispuesto con unos
> > fortísimos dolores abdominales. Dado el grave estado
> > en el que se
> > encontraba le trasladaron a la Residencia de San
> > Sebastián, donde fue
> > intervenido con urgencia.
> > Mientras el cura se encontraba dormido por lo
> > efectos de la anestesia,
> > en la habitación de al lado una joven madre soltera
> > daba a luz un
> > precioso retoño.
> > Desgraciadamente, la joven madre murió y el equipo
> > médico se planteó que
> > hacer con el niño.
> > Uno de los médicos, tras mucho cavilar dijo: " Mirad
> > vamos a ponerselo
> > al cura, al fin y al cabo el hombre seguro que le
> > dará una buena
> > educación"
> > Dicho y hecho, al despertar el párroco se encontró
> > con el bebé en su
> > regazo, asustado preguntó:
> > - ¿Pero esto qué es?
> > El médico se acercó y le dijo:
> > - "Mire este es el origen de sus dolores de
> > barriga..."
> > -" ¿Pero si esto es imposible" dijo el cura.
> > El médico le respondió:
> > -"No hombre, con lo que han evolucionado los
> > tiempos, ahora los hombre
> > se pueden quedar embarazados..."
> > El cura se quedó pensativo decidiendo qué hacer con
> > el niño.
> > "Bueno cuando vuelva al pueblo diré que es hijo de
> > una hermana mía que
> > ha fallecido y yo me haré cargo de educarlo..."
> > El párroco volvió así al pueblo y contó su historia.
> > No sin algún recelo
> > los habitantes del pueblo se acostumbraron a ver a
> > partir de aquel día
> > al nuevo vecinito que fue bautizado con el nombre de
> > Ion
> > Pasaron los años y el cura se hizo muy mayor, cuando
> > Ion contaba con 25
> > años, el cura enfermó y en su lecho de muerte
> > comenzó a pedir:
> > -"¡Que venga Ion! ¡Que venga Ion!"
> > El joven corrió al lado del cura
> > ¿Qué quiere tío?
> > El cura haciendo acopio de valor le dijo:
> > - Mira Ion tengo un gran secreto que contarte y
> > antes de morir debo
> > decírtelo...
> > "Ion, interrumpió al párroco y le dijo:
> > Tranquilo tío, no hace falta que me digas nada,
> > desde hace años ya me he
> > imaginado que de verdad es usted mi padre..."
> > -¡No! -dijo el cura- yo soy tu madre, tu padre es el
> > ¡¡Arzobispo de
> > Cuenca!!
