Vuelta a la Peninsula 2016

poliki

Allá vamos
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Pamplona
Os voy a dejar una crónica de la vuelta a la Peninsula que acabo de dar con mi amigo Júcar

Día 1º Pamplona-Gijón
30/07/2016

Llegó el día.
Son las ocho y media de la mañana y a la cafetería acuden: Fernando (Poliki),
Juan Carlos (Júcar) y Javier (Gudari), que los acompañará al menos durante la mañana de hoy.
Saludos, comentarios sobre la disposición del equipaje en la moto... y el café más el cigarrillo para Júcar.
Y de la misma manera que salen cualquier día para hacer 200 km y almorzar, las RT’s de Poliki y Gudari y
la Deauville de Júcar, se adentran en una gran aventura.
Pamplona va quedando atrás, mientras la autovía hacia Vitoria (Gasteiz), les lleva a su primera parada.
Al salir dirección Bilbao por la N-240 y en la primera gasolinera encuentran a Ferdy, gran motero,
que sabe lo que es este desafío y otros muchos.
Más saludos... y presentación de la nueva Súper Teneré de Ferdy.
Todos están de acuerdo en que es una moto impresionante y muy bonita. Vamos... como casi todas.
Pero el viaje tiene que seguir, así que cogen sus monturas y dan gas.
Pronto se reúnen con un nuevo compañero, Tonipotter, que coge el relevo a
Gudari. Tiene que dejar el grupo para volver a Pamplona, los deberes son los deberes.
Gracias por tu compañía Javier.
Tonipotter los acompaña junto con Ferdy hasta Laredo, donde comen en un txiringuito al aire libre recordando viejos tiempos.
Después de despedirse de Toni y Ferdy, continuarán su ruta en solitario hasta Gijón. Les acompañará un txirimiri que
con la misma marcha de las motos y la temperatura, los seca al instante.
Ya en Gijón y con el equipaje en el hotel al lado del puerto deportivo, realizan una ruta turística y quedan impresionados por la ciudad vieja.
Está amurallada y con unas vistas preciosas.
Y paseando se encuentran los intrépidos moteros con una sidrería, donde saborearán la rica sidra asturiana y algo de pulpo. Al principio, les parece excesiva
la botella, pero pronto cogen el ritmo y tienen que pedir más para empujar los platos tan exquisitos de pulpo, aunque escanciando la sidra
se les va la mitad al suelo...
Pero el viaje es largo y hay que descansar. A dormir que hay que madrugar.

Día 2 Gijón-Finisterre-Tui
31/07/2016

Son las ocho de la mañana. Poliki y Júcar desayunan acompañados de gran cantidad de personas que aún siguen con la juerga
del día anterior (una ciudad con mucha marcha, Gijón).
Llueve, no como el día anterior. Hoy llueve de verdad. Así que ropa de agua y a rodar, que Finisterre les espera.
A partir de aquí y durante todo el viaje Poliki llevara el navegador conectado a su casco por bluetooth y será el guía de la ruta.
En la ruta , Júcar descubre que su viejo traje de agua vale para muy poco. Al poco de salir tiene calados hasta los calzoncillos,
pero nada se puede hacer por el momento. Cambiarse para volverse a empapar no tiene sentido.
A una hora más o menos de Finisterre el cielo se abre y es el momento de parar para que Júcar se cambie. Ni corto ni perezoso y a
falta de un bar a mano donde cambiarse, lo hace en medio del pueblo, en la acera de su calle principal. Cree que no hay nada notorio
que ver de sí mismo, así que no le preocupa su desnudez.
Poco tiempo después nuestros moteros consiguen su primer gran hito. ¡Finisterre!
Ninguno de los dos conocía el lugar y nada les defrauda. No solo es emblemático por derecho propio, sino que es hermoso. Un prodigio de la naturaleza.
Apretón de manos, fotos, cigarrillos y a seguir.
A poco más de veinte minutos de allí les espera la desembocadura del río Xalla en Ezaro. El único en Europa en hacerlo en cascada. Bocadillo,
refresco, fotos, admiración por el espectáculo que la naturaleza les ofrece y vuelta a la carretera.
Ahora les esperan bastantes kilómetros de carreteras de costa y montaña donde disfrutarán de sus motos haciendo curvas hasta su encuentro
con Alsauto (Alfonso) Que les guiará hasta un hotel en Tui donde pasarán la noche, y muy amablemente y con su coche les llevará a cenar a
Valença, Portugal. Una cena muy agradable en un lugar precioso. Valença está rodeado de murallas bien cuidadas. Enclavado en una
elevación sobre el rio Miño, frontera con el vecino reino, mira de frente a Tui.
Después de una agradable velada en compañía de Alfonso, regresarán al hotel a descansar.
[video=youtube;nknsv8NQNJ0]


Día 3º Tui-Lisboa
01/08/2016

La meta es Lisboa, donde llegan pasado el mediodía. No tienen reserva, no tienen ni idea de cómo moverse por aquella locura de ciudad, por no decir que está todo
bacheado con adoquines. Pero todo tiene solución menos la muerte, y por fin aparcan sus motos en el garaje de un hotel al que han tardado más de dos horas en llegar.
La ducha les alivia del cansancio y el calor y salen a ver un poco de Lisboa.
Pero este es un viaje duro. No se trata de hacer turismo. Se trata de recorrer el perímetro de la península Ibérica en moto en nueve días. Así que
a dormir temprano y a descansar.
[video=youtube;aZT0snaIB5U]


Día 4º Lisboa-Lepe
02/08/2016

Nueva mañana y nuevo desayuno. Equipaje en la moto y en marcha.
Como es sabido, Lisboa tiene dos grandes puentes. El “25 de Abril” (casi dos kilómetros) y el “Vasco de Gama”. Este vasco debía de ser de Bilbao, pues el puente
en cuestión mide 17 km. “Casi nada”.
Deciden cruzar el Vasco de Gama para salir de la ciudad y comienza la nueva etapa que les llevará hasta el cabo San Vicente, lo más al sur y al oeste que
se puede ir en la península.
Si Finisterre era un lugar bonito de verdad, San Vicente es impresionante. Kilómetros de acantilados vertiginosos hasta el faro, que se enfrentan con el océano.
Una maravilla paisajística y otro gran hito para nuestros amigos Poliki y Júcar.
En Sagres comerán algo y continuarán su ruta hasta Lepe (Huelva), de regreso ya a España... hotel, cena y a dormir.
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Día 5 Lepe-Marbella
03/08/2016

La mañana siguiente deberán enfrentarse a otra dura ruta, y el cansancio ya se va acumulando. El nuevo destino no puede ser otro que Tarifa, el punto más al sur posible.
Este lugar es conocido ya por nuestros amigos, así que a pesar de que también resulta emblemático lo resuelven con las fotos necesarias para dar fe de su paso
por allí y continúan su ruta hacia Marbella.
Chemamata (José Manuel) ha salido esta mañana temprano desde Huesca con la intención de unirse a la ruta a partir de Marbella y después de una pechada de kilómetros en solitario y alrededor de las seis de la tarde los tres amigos se reúnen. Ya no volverán a separarse hasta su regreso a casa.
Un baño, cena, un par de cervezas en un hotel en Benahavis y a dormir. Todos están cansados. Especialmente la parte con más contacto con la moto, es decir, el culo.
Empieza a ser un martirio; pero un reto es un reto, y como dice Júcar, “no hay aventura sin desventura”.
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Día 6º Marbella-Murcia
04/08/2016

Llega la mañana y todo está cargado en las motos. Una Yamaha Diversion para Chema, una Honda Deauville Para Júcar y una BMW 1200 RT para Poliki.
Las tres se portan como jabatas y no desfallecen en ningún momento. ¿Próxima parada? Murcia. Ayer pasaron calor, pero lo de hoy será una dura prueba.
En Murcia los termómetros a las siete de la tarde, hora de
En la entrada al hotel marcan 42 grados. Esto, sobre una moto, con casco, botas y ropa de moto tiene tela.
Pero me estoy adelantando. La ruta en sí misma no tiene gran aliciente pues se trata de hacer kilómetros que nos acerquen a nuestra meta.
Pero el grupo hace una parada en Sagunto para saludar a Joedefoul (Joaquín). A pocos kilómetros de llegar a Sagunto comienza a llover.
Primero tímidamente, pero enseguida aquello se convierte en un aguacero. Y francamente, no les molesta (y Júcar hace días que
se deshizo de su viejo traje de agua). Es agradable mojarse con todo el calor que hace.
Ya en el bar con Joaquín y con una cerveza en la mano habrá charla, fotos y cigarrillos.
Es un rato agradable, pero el camino sigue, el tiempo se va y Murcia espera. Así que a la carretera de nuevo.
El hotel en el que se alojan tiene piscina y la usan. También hay sitios donde cenar en la ciudad y lo hacen. Vuelta al hotel y a dormir.

Día 7º Murcia-Cambrils
05/08/2016

Un nuevo día y un nuevo reto. El plan es dormir esta noche en Cambrils. Desde muy temprano el calor es de los que hacen historia. Dentro del casco, la
temperatura es la de sus cabezas. Es decir, treinta y seis grados. Pero si levantan la pantalla del casco entra el aire a más de cuarenta, que es la temperatura exterior.
¿No queríais moto? Pues taza y media para cada uno. ¡Que le vamos a hacer!
De vez en cuando uno se pone de pie sobre las estriberas y de esa forma se refresca....un poco al menos. Y el culo lo agradece.
Nuestros héroes comen, beben, fuman (Júcar que es un vicioso) y hacen lo que las personas hacen cuando beben mucho, pero mucho líquido.
También repostan sus máquinas y cuando pueden las aparcan a la sombra. Recorren la costa mediterránea ya lejos del Cantábrico y el Atlántico, y por fin, por la tarde
llegan a Cambrils.
Encuentran un hotel donde las habitaciones no tienen armario, pero tienen un gran espejo frente a la cama con dosel y se acomodan en él, en el hotel digo, no en el dosel.
Las habitaciones también disponen de una discreta puerta que da acceso al aparcamiento privado del establecimiento. Es temporada alta y es lo que hay....
Cenan estupendamente en Cambrils, pasean un rato, miran una chuches para sus familiares y a dormir. Mañana será un día muy significativo para ellos.
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Día 8º Cambrils-Cap de Creus-Manresa
06/08/2016

Otra nueva mañana y otro nuevo destino. En Barcelona y sus alrededores los están esperando unos cuantos amigos. El primero al que encontraran será Pep en
Altafulla, gran motero que ya ha hecho el reto que intentan conseguir Poliki, Chema y Júcar. El de Chema es distinto, pero no deja de tener un gran mérito. Al
final de su ruta, habrá hecho más de tres mil kilómetros, muchos de ellos en solitario.
Después de Pep, se unirán al grupo Goyo, Tranquilillo y Gabi en Vilafranca del Penedes y juntos rodarán gran parte del camino hacia el destino del día.
Habrá almuerzo en Manresa (Bar Bonaplata) y luego todos juntos rodarán por las carreteras catalanas. También sufrirán una retención debido a un accidente. La
carretera tiene estas cosas, desgraciadamente.
El grupo ya es más pequeño y solo Pep acompaña a los aventureros ahora. De hecho, les guía hacia su nuevo hito. Curvas cerradas, curvas abiertas, más curvas
cerradas, vueltas y revueltas y por fin llegan a su destino. ¡Cabo de Creus! El punto más oriental de la península.
Ahora por fin sienten que el reto esta conseguido, aunque aún faltan muchos kilómetros para llegar a casa. Es un momento emocionante.
¡¡¡Cuatro mil kilómetros en una semana para llegar aquí!!!
Y además está la belleza del lugar. Es distinto a Finisterre, y es distinto a San Vicente. Y sin embargo los tres comparten el hecho de ser lugares de difícil acceso,
naturaleza salvaje (a pesar de los muchos visitantes que por allí pasamos), y una belleza exquisita.
Habrá apretones de manos, (con alguna lágrima), abrazos, felicitaciones, fotos, algo que comer y una cerveza con la que brindar. Pero sobre todo habrá un
recuerdo muy querido del Cabo De Creus. Seguramente, Poliki y Júcar harán un hueco muy especial en su memoria para guardar este momento.
El momento en el que completaron su periferia por las costas de la península Ibérica. Cuando lleguen esta tarde a su hotel de Manresa, ya no volverán a ver el mar en
su camino a casa.
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Día 9º Manresa-Andorra-Pamplona
07/08/2016

Amanece en Manresa y nuestros amigos dan el contacto de sus motos.
El sábado pasado salieron de Pamplona Poliki y Júcar a las nueve de la mañana, y hoy domingo se disponen a volver a casa. Pero no sin antes cerrar el circulo.
La península Ibérica está rodeada de agua, lógicamente. El Cantábrico, el Atlántico y el Mediterráneo. Supongo que no muchas penínsulas pueden decir que están
rodeadas por tres mares diferentes. Pero todas la penínsulas están limitadas por tierra. La nuestra, por los Pirineos. Así que nuestros moteros comienzan su ultima
ruta en dirección a Andorra, ese bonito centro comercial enclavado en medio de los Pirineos.
La ruta es divertida y en paisaje muy bonito. También encontrarán una retención debida a un accidente. Pero a media mañana llegarán a Andorra sin mas contratiempos.
A Poliki le vienen bien las tiendas de equipamiento motero para comprar una bombilla para su RT y cambiarla.
Desde Andorra, todo será cuesta abajo hasta Huesca. Son ya las seis de la tarde pasadas cuando llegan. Hay que parar, tomar algo fresco, inmortalizar el momento
y despedirse de Chema. Casi mil kilómetros en solitario y más de dos mil juntos hermana mucho. Si ya eran amigos, ahora lo son más. ¡Pásalo bien en fiestas de
Huesca Chema!. Te lo tienes merecido.
El sol de Agosto aun está alto, pero pronto bajará. Así es como el último tramo para llegar a casa de Poliki y Júcar comienza. No se dan prisa. Van despacio,
mucho más de lo habitual. Pasan por Riglos, el pantano de la Peña, Puente la Reina de Jaca y por fin, por Yesa, entran en Navarra. Son las ocho de la tarde
y faltan apenas cuarenta kilómetros para llegar a Pamplona pero se detienen en Liédena, en el bar del hotel en el que tantas mañanas moteras han comido un
pintxo. Asi que... hacen un alto, y se comen el pintxo, como si fuera una de esas mañanas en las que hacen doscientos kilómetros de paseo en moto.
Aunque esta vez es distinto. Esta vez están más orgullosos de sí mismos por lo conseguido, y a la vez un poco tristes. Quizá ya echen de menos el reto
que rompe la rutina. Por fin, montan en sus motos, arrancan y dan gas. No toman la autovía. Van por las viejas carreteras nacionales disfrutando del atardecer.
Con calma regresan a casa. Saben que son una semana más viejos, y mil años más jóvenes.
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Agradecimientos:
Gracias a Gudari, Ferdi, Tonippoter, Alsauto, Joedefoul, Pep, Onix, Gabi y Tranquilillo por la compañía, la guía y los consejos.
Por la cena Alsauto, todo riquísimo.
Y muy especialmente a nuestras familias, que no solo nos permitieron realizar este reto, también nos animaron a seguir nuestro sueño.
 
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