Aquí esta una parte de mi historia. He omitido el principio, ya que aun no lo tengo escrito por que son un cúmulo de buenos y malos recuerdos, que hoy por hoy no me apetecen recordar. Me recreo en esta última moto.
Como toda "pequeña" historia necesita un preámbulo, aquí va el mío.
El principio de los tiempos
Desde los 14 años soy motero … aún me acuerdo del día que aprendí como se arrancaba la Vespino negra que había en la cochera de mi padre.
Desde entonces, siempre pensando en moto.
Me casé hace 17 años, y como a ella no le gustaban las motos, teníamos un pacto: tres fines de semana eran para ella y el cuarto para la moto (si las circunstancias económicas lo permitían).
Llegue a tener tres motos en el garaje: Una Vespa Primavera 125, una Montesa Enduro H6 250, y la de carretera que fue variando desde la Yamaha XL 600 a la Kawa ZZR 750.
A los 7 años de casados, una circunstancia personal que ahora no viene a cuento, y que quizás otro día cuente, hizo que me vendiera las motos y me trasladará a vivir a Lucena (Córdoba).
10 años después
Después de 10 años sin moto, llega la estabilidad económica y familiar y veo la posibilidad de comprar una moto.
Así se lo hago saber a mi señora, que para mi sorpresa, me anima a comprar la moto. Pero claro, ella, desconocedora del mercado se cree que lo que busco es una scooter o similar.
Después de hacerme con un catálogo de Solo Moto, empiezo a mirar modelos, precios, potencias, pesos, marcas coreanas desconocidas, etc. La cuestión es que descarto la máquina nueva y me pongo a buscar en el mercado de ocasión, pero aún mantenía muchas dudas sobre el tipo, modelo y marca de moto que deseaba.
Aparco durante unos días la moto de la cabeza y me dedico a mi otra gran afición: la lectura. Especialmente los libros de historia medieval, templarios, cruzadas, aventuras, etc.
Y llegó la iluminación, de repente, sin avisar, leyendo “El Cruzado”. SIIII, y por que no, una turing pura y dura, y poder hacer largos viajes y visitar aquellos lugares que estoy leyendo y arto de imaginarme. Los pelos de punta, lo juro, que me veía en Ponferrada, visitando su famoso castillo templario, por el norte de Catalaunya y el sur de Francia … Genial… (Por cierto, que bonito es soñar….)
De nuevo, catálogo de Solo Moto en mano. Se inicia la operación “Búsqueda de moto para Sir Julián, Caballero del Sur”
Lista de aspirantes:
Pan, Goldwind, LT, R1150RT, R1150R
Y de nuevo al mercado de ocasión: Busco moto semi-nueva, pocos kilómetros y económica. Las motos que a duras penas llegan a mi presupuesto o son muy viejas o tienen muchos, muchísimos kilómetros …. Y encima que la moto es vieja o esta muy usada, cómprala en vete a saber donde … Desanimo total.
Pero el cerebro, que es un ente independiente e inteligente donde los haya, sabe hacer su trabajo en el silencio de su soledad … Y un día, delante del colegio de hija pequeña (Sandra) hay un taller que lo veo cada día dos veces como mínimo, lleno de motos destartaladas en la puerta, entre ellas algunas BMW R del año de la picor, una Goldwind que me han asegura es de las primeras (prometo foto), y bastante más leña … Pero entro, y le pregunto al chaval: ¿Qué tienes de segunda mano que este bien?
¿Qué buscas?
Y mira, como a mi, pedir por pedir no me importa, le digo la verdad, pues una turismo semi-nueva. BMW u Honda.
Pues uno que es de Málaga pero tiene una empresa en el polígono se vende una RT, con muy pocos kilómetros, pero creo que es un poco carilla…. Si quieres le llamo y esta tarde pasas a verla.
Pues paso por la tarde y la veo. BMW R-1150RT, dos años, carenado moderno, puños, maletas y baúl del color de la moto, gris titanio metalizado, o como se diga, radio CD, antenita delante, nueva, nueva, nueva, preciosa, preciosa, preciosa … 12.500 euros.
- Bueno, vale, ya te diré algo, tengo que consultar con la señora, ya hablaré con el banco, etc.
Esa noche hablo con mi mujer, le digo como el que no quiere la cosa, que he visto una motillo, que esta muy bien, pero es un pelín carilla.
Le digo donde la tienen y resulta que el taller oscuro lleno de motos oxidadas es un cliente de la gestaría donde trabaja ella.
- Pues mañana me acompañas, que tengo que llevar una papeles y vemos la moto.
En fin, me automentalizo para el autobloqueo neuronal (consiste en no escuchar a la parienta cuando te dice que estas loco, y contestar de forma automática si mi vida, si mi amor)
Llegamos al taller y la moto no estaba:
- No hombre, como la moto esta tan bien, la guardo en la cochera de enfrente, no se vaya a rayar al guardar las motos por la noche.
Llama al dueño, y se va para la cochera.
Minutos de tensa espera. Sinceramente, no que se que pensaba ella que vería, pero cuando sonó el arranque se me quedo mirando de forma extraña, cuando salio el morro, dio paso a tras, cuando salio la moto entera, me subió un calorcillo para arriba y pensé que me desmayaba…
¿A dónde vas con “eso tan grande”? en clara referencia a la moto, mal pensados. Llega el dueño y empieza contarnos las virtudes de la moto, me subo, apenas llego de puntillas, la arranco, acelero….
Arrrrrhhhjjjjj …. (Babeo intenso)….
No se que cara me vería, pero de repente sonó un: Bueno si te gusta y la podemos pagar …
Y el exdueño de la moto, persona insensible y poco acostumbrado a tratar con mujeres suelta: 12.500 eurillos de nada …
Y ella, que me mira. Pero no me mira de esa forma normal, sino esa otra mirada de te voy a matar, descuartizar, degollar, quemar, etc.
Nada, para casa con la promesa de decir algo durante esa semana.
Una vez en nuestra humilde morada, se desató la madre de todas las tormentas, primero en el comedor, después en la cocina, y finalmente en el dormitorio, donde, como pasa en las películas, se calmo la fiera…, se quedó dormida.
El tema es que salio de ella hacer los números, que si un préstamo por aquí, que si ponemos tanto por allá, que si cuando se firme la hipoteca ponemos un poco más, que si dejas de comprar libros, que si …. Dice mi madre que te paga media moto.
Coño. Mi suegra. Mi querida, apreciable y estimada suegra, me paga media moto. Aquí hay gato encerrado. Esto es una trampa. Pero estoy ciego, solo veo moto, moto y moto, carreteras, castillos, piedras antiguas, … salto de alegría, promesa de un noche inolvidable, nena esta noche mínimo 4,.. Tranqui fiera, que hay visita…, Venga, vale, te los debo, donde firmo…
Mi estreno con la RT
Finalmente, un miércoles, a las 21:00, en medio de una lluvia intensa se me hace entrega de tan ansiada montura. Con mi casco recién comprado, una chaqueta ¾ roja que calaba hasta el agua que aún no había caído, sin guantes (llegue tarde a la tienda para comprarlos), Y el exdueño que, amablemente me pone los puños con la calefacción a tope. Sin más explicaciones que toma tu dinero y dame miiiiii moto, mi tesoro …
Lloviendo, de noche, acojonado hasta la médula, pedazo trasto, meto primera, soltamos embrague, salimos, despacito, mierda, semáforo en rojo, baja un pie, el otro pie, como se me caiga a los 50 metros de cogerla me suicido.
Semáforo en verde, giro 90º a la izquierda, me falta calle, sigo avanzando, meto segunda, suave Julián, que es una 1150 y pesa casi 300 kilos, no, más mi peso 370 kilos.
STOP. Tranquilo chaval que llevas ABS, venga empiezo a relajarme. Giro a la derecha, ya estoy en la ronda, bien chaval, bien.
Coño, me estoy quemando las manos, como leches se quita la calefacción de los puños... la visera llena de agua, joder, que me quemo de verdad, debería haber escuchado las instrucciones, toco un botón, mira que guapo, la cúpula que sube, la leche ya no me mojo la visera, pero me sigo quemando las manos, suelto el gas, retener retiene la muy jodida. Cambio de mano, semáforo en ámbar, frenando, sigo buscado como quitar la calefacción, veo un botón rojo, ese debe de ser, lo pulso , bocinazo de camión, coño que me atropellan, me acerco lo posible al bordillo, con los ojos cerrados adiós mundo cruel, no hay frenazo, recupero la compostura, me giro, y estoy solo. Pulso de nuevo el botón rojo, pedazo bocina tiene la RT.
En ese momento me doy cuenta de que si llego a la cochera sin besar el suelo y sin sufrir un infarto me merezco el carné de puro macho ibérico.
Sin más contratiempos que las manos escaldadas llego a la cochera. Pongo punto muerto, suelto el embrague, despacito, bien, conseguido, ya estoy en casa. Levanto mi pierna izquierda, al más puro estilo policía americano, buscando la pata de cabra, Dioosss, meto la primera, salto para adelante, no nos caemos de casualidad.
Intento asomar la cabeza por entre la pierna y la moto, y al fondo veo un hierro, vale eso debe ser la puta pata de cabra. Levanto el pie lentamente, joder, que se me viene el peso para la derecha. Tranquilo, es el suelo mojado, tu puedes con esto. Por fin, saco la pata de cabra, apoyo la moto. Bien, se aguanta sola, yo me bajo.
Las manos me duelen, estoy mojado, tiemblo de los pies a la cabeza. Consigo abrir la cochera, y ahí, al final de esa imponente rampa, justo al lado del pilar mi señora con las niñas, gritos de alegría, corre papa, corre, que te mojas…
La rampa, que no me acordaba de ella... No pasa nada, el ABS se encarga de todo. Vuelvo a la moto, me subo, como se había calado todo son lucecitas en el cuadro de mandos. Giro la llave y lo apago todo. Otro giro y se enciende de nuevo, pulso el botón de arranque y nada. Coño le pasa, muevo una palanquita roja, junto al botón y nada que la muy jodida no arranca.
Sigue lloviendo, me bajo, intento empujar la moto para subir el bordillo, JAJA, que risa me da. Este tanque no hay Dios que lo mueva. Burro, si tienes puesta la primera.
Subo a la moto, giro llave, pillo el embrague y que no arranca. A mi me da algo. Subido intento empujar con las dos piernas, me atasco con la pata de cabra. Me estoy haciendo la picha un lío. Sigo empujando, llego, con un esfuerzo sobre humano al inicio de la rampa.
El casco, la chaqueta, no se si es sudor o agua de lluvia. Y la dejo caer por la rampa, toco el freno, mierda, esto no frena, la niña al final de la rampa corre papa que quiero verla, y yo pensando, como no te apartes si que la veras y bien vista, desesperado, pies al suelo intento de frenar pero nada, me da por tocar el botón de arranque y si, arranca, maneta de freno a tope, mal pero frena, subo el pie derecho a la estribera, piso el freno, mejora la frenada, esquivo a la niña, rozo el pilar y giro 90º a la derecha. Me paro justo en mi plaza.
Anda papa, que control tienes con la moto…
La mato, yo la mato.
En fin, yo me divertido mucho escribiendo esto, espero que sea de vuestro agrado.
Saludos.