Buenas noches. Me llamo Miguel Ángel y a colación de la respuesta anterior os quiero contar mi encuentro con Miquel. El sábado trabajé por la mañana, y fué terminar, preaprar la moto y salir pitando desde Linares (Jaén), dirección Madrid, para llegar con tiempo y poder estar a las 19´00 h.(según programa de la organización), para que me firmara el libro. Mi objeto estaba claro: firma del libro, foto y vuelta a casa. LLegué sobre las 16´30 h., y el ambiente estaba muy tranquilo, con muy poca gente. Así que a ver el recinto y ver la carpa de BMW. Mi sorpresa fué ver a la moto "atrevida" en medio de la calle del evento, y al lado, pululando, a Miquel. ¡JÓDER!, cual cazador avído de capturar su presa, me dirijí a su encuentro con un vozarron en su nombre. De inmediato, se vino hacia mí, un abrazo y un rato de charla. Firma del libro, foto y compra de camiseta y pegatinas: objetivo cumplido. Pero como estaba todo muy tranquilo, pues aprovecho para hablar con él. A los pocos minutos me doy cuenta de su cansancio de estar todo el día allí a pie parado y lo que conlleva hablar y saludar a tanta gente. Asi que me dije que iba a reducir nuestro encuentro para que estuviera algo más relajado, pues es de reconocer, que todavía está asimilando el evento que ha creado. Asi que a buena hora, regreso a mi ciudad y para un poco más de las diez de la noche, ya estaba en casa sin ningún contratiempo. Total: 780 km., muy a gusto. Todo esto como primera parte de un relato de escapada de un día con muchos kilómetros. Muy fashion y ya está.
Pero lo mejor es la segunda parte. Que es la que a todos los que le seguimos desde hace un año nos tiene sumergidos. Le dije de dónde había venido y sólo era para verle (en un principio pues no sabía el contexto en el que se iba a desarrollar). Pero mi sorpresa ha sido el recibimiento por su parte, la humanidad y entrega que ha tenido a pesar de su cansancio, contestando a todas y cada una de mis preguntas y sin escatimar en tiempo ni esfuerzos. Eso disipó mis dudas de si sería rentable el viaje, gastos y obstáuclos familiares que había que superar. Sin duda, ahora con más convencimiento, lo volvería a hacer...y en cuanto pueda, iré a cualquier conferencia o evento que haga, pues si él se esfuerza, yo también. La conclusión es muy simple: la ilusión que nos mueve por algo o por alguien y que nos sentimos identificados de alguna manera. Así que muchas gracias Miquel por tu atención.
Y la tercera y última parte, es que el sábado en cuestión, además haber trabajado, kilómetros, tenía la asistencia al cumpleños de mi cuñado, con resto de familia incluida. Al decir que me voy "pá madriz", pues mi mujer.... pero al ver la cara que tenía a mi vuelta, fue comprensiva.
* nota del redactor: a mi mujer no le gustan las motos, y además es enfermera.... Saludos y si podéis ir a un encuentro con Miquel, no lo dudéis. ¡Ah!, y comprarle alguna cosilla. Saludos a todos.