ovejanegra
Curveando
Este fin de semana me he escapado una mañana para un paseo de unos 300 Km. Una ruta conocida porque no tenía tiempo para más, como suele ser habitual.
En un momento de mi itinerario, he cogido la C-12, una carretera nacional amplia, con curvas abiertas, que bordea el Ebro en algunos tramos antes de llegar a Tortosa. Hace años era una carretera estupenda, pero en los últimos tiempos el asfalto ha empeorado un poco y se nota la falta de mantenimiento. De todas formas, es una carretera segura en la que se puede ir a 120 de media sin ningún problema, aunque está limitada a 100.
Rulando por la C-12 alcanzo a un monovolumen blanco que lleva un buen ritmo. Se pone a 120 en las rectas y a unos 100 en las curvas. Me parece el ritmo perfecto y estoy un tiempo detrás de él hasta que decido adelantarlo. Para ello acelero un poco y me voy despegando entre 120 y 140. Antes de adelantar detecto una moto que se acerca. Oigo un escape libre y le pierdo cuando adelanto al monovolumen. Poco después, en una recta me pasa el colega de la moto ruidosa: un tipo con un tres cuartos, tejanos y zapatillas deportivas. Japonesa, naked semideportiva diría que de 600 u 800 cc. Yo llevo un ritmo para mí ligero en una nacional, entre 120 y 140. Sigo al tipo, y supone ponerme en las rectas entre 160 y 180, y a lo mejor en las curvas a 120-140.
No me siento cómodo en una nacional con tráfico, cruces, incorporaciones a esas velocidades. Amén de los radares móviles que he visto alguna vez. Renuncio a seguir al amigo y lo pierdo de vista preguntándome si me hago viejo y debería pasarme al scooter. ¿Seré yo el raro?
En un momento de mi itinerario, he cogido la C-12, una carretera nacional amplia, con curvas abiertas, que bordea el Ebro en algunos tramos antes de llegar a Tortosa. Hace años era una carretera estupenda, pero en los últimos tiempos el asfalto ha empeorado un poco y se nota la falta de mantenimiento. De todas formas, es una carretera segura en la que se puede ir a 120 de media sin ningún problema, aunque está limitada a 100.
Rulando por la C-12 alcanzo a un monovolumen blanco que lleva un buen ritmo. Se pone a 120 en las rectas y a unos 100 en las curvas. Me parece el ritmo perfecto y estoy un tiempo detrás de él hasta que decido adelantarlo. Para ello acelero un poco y me voy despegando entre 120 y 140. Antes de adelantar detecto una moto que se acerca. Oigo un escape libre y le pierdo cuando adelanto al monovolumen. Poco después, en una recta me pasa el colega de la moto ruidosa: un tipo con un tres cuartos, tejanos y zapatillas deportivas. Japonesa, naked semideportiva diría que de 600 u 800 cc. Yo llevo un ritmo para mí ligero en una nacional, entre 120 y 140. Sigo al tipo, y supone ponerme en las rectas entre 160 y 180, y a lo mejor en las curvas a 120-140.
No me siento cómodo en una nacional con tráfico, cruces, incorporaciones a esas velocidades. Amén de los radares móviles que he visto alguna vez. Renuncio a seguir al amigo y lo pierdo de vista preguntándome si me hago viejo y debería pasarme al scooter. ¿Seré yo el raro?