Yo creo que vivimos en un pais donde nos pasamos casi todo el tiempo divagando sobre cosas con muy poca importancia (bajo mi punto de vista) como si decimos niños o niñas, miembros o miembras, etc., o si cuando haya alguien del colectivo LGTB debemos de interiorizar el artículo con @... y todo el mundo contento y liado con estos temas, mientras que nos distraemos de otros que nos afectan a todos, no solo a unas minorias con derechos, por supuesto.
Aquí primero se hacen las leyes, luego se ponen en práctica y luego vamos retocando las cosas hasta que encaje en la mayor parte de nosotros.
Ejemplo físico: Ampliación del estadio de la Peineta del Atl. de Madrid. Primer día en el que se juega allí. Un follón de tres pares de narices. La gente no puede acceder ya que el aparcamiento es mínimo. Los que van en metro se quedan a verlo en los andenes sin poder salir (menos mal que no hubo ninguna urgencia). Las carreteras de accesos colapsadas; llegaba la retención hasta el ifema. Vamos de locos. Año y medio después se ponen a hacer un acceso tipo circunvalación, para que la posible retención no afecte a la arteria principal M-40.
Si esto lo trasladamos a lo de la restricción de vehículos en el acceso a Madrid, ahí tienes las consecuencias. Aumento muy significativo de la contaminación en barrios de la periferia que antes no tenían problemas de ese sentido. Esos mismos barrios donde costaba a los residentes poder estacionar el vehículo, ahora es misión imposible, ya que "los que vienen de fuera" estacionan allí, porque no pueden acceder con su coche; cinco o seis puntos de recarga para vehículos eléctricos; misma cantidad de autobuses y de metro, etc., etc.
Pero , digo yo, ¡Qué esperábamos de la Sra. Carmena y adláteres!. Una señora, cuya primera idea al llegar al ayuntamiento fue que las madres de los niños de primaria fueran las que se tuvieran que hacer cargo de la limpieza de los centros educativos para ahorrar en los presupuestos (y dijo las madres, no los padres en general; y nadie dijo que era una idea machista y al paro con las señoras de la limpieza, claro está), cuya tercera o cuarta idea fue que los niños, cuando jugaran en los parques, deberían de recoger las colillas que se encontraran, para enseñarles civismo ( y de paso coger alguna hepatitis o infección y así, de paso, saturamos las urgencias y pediatría), una señora cuya escusa en lo referente a la cantidad de basura y cartones existentes en las calles madrileñas es que, como el precio del cartón ha bajado mucho, los indivíduos que lo recogen para ganarse la vida, ya no lo hacen porque no les merece la pena (no tenía yo conocimiento que los indigentes eran los encargados de dejar la ciudad impoluta), que solo está pensando en hacer magdalenas o empanadillas para periodistas, futbolistas o gente representativa. Donde tiene un grupo de concejales que contratan titiriteros ambulantes para representar escenas, en la calle a los niños y viandantes, sobre como violar monjas o ahorcar guardias civiles y jueces, etc.
Donde ahora, que no se nos olvide, se une a un ex representante de podemos, para presentarse a la presidencia de la Comunidad de Madrid, que dijo y no hace más de dos meses que, en Venezuela se vivía bien ya que se podía comer tres veces al día.
Que conste que no se me malinterprete. No estoy diciendo que LOS OTROS sean mejores, sino que estoy intentando hacer una reflexión/crítica/denuncia de los que hay ahora, que tienen tela.
Y la última reflexión (por ahora): uno de los peores males de la sociedad española es, bajo mi punto de vista, la corta memoria que tenemos; por eso el asfaltado de calles o inauguración de parques o bibliotecas se hacen en los dos meses anteriores a las elecciones.
Como dijo aquel, no hay mal que cien años dure... ni cuerpo que lo resista.
Un saludo