Mandalorian
Acelerando
Bueno, lo prometido es deuda y aquí estamos para saldarla. Titulo así mi crónica, con el ruego a los administradores de que la coloquen donde le corresponda dentro de este subforo, porque fue un viaje que llevaba tiempo queriendo hacer y que comenté aquí en el foro y entre mis amistades que algún día haría. Así pues, por fin sucedió.
Pongo en aviso de que algunas de mis opiniones serán controvertidas, sé que mis preferencias no coinciden a veces con otros compañeros viajeros. Como suelo hacer, se ha tratado de un viaje en solitario. Un Mandaloriano lo es por definición, ése es el camino (perdón por la frikada). En este viaje ha habido luces, muchas, y alguna sombra en forma de errores de los que he aprendido y que expondré para evitar a otros tropezar en la misma piedra.
Quiero agradecer profundamente a los dos compañeros que más me ayudaron, seguramente sin saberlo, a trazar mi ruta y a sacarle jugo a una zona privilegiada de nuestro continente. Estos son @Stelvio y @despista2. Gracias a ambos, porque al final mi planteamiento fue una fusión de sus dos propuestas.
A lo largo de las etapas, procuraré destacar lo mejor de cada una y el error que habría corregido de haberlo sabido antes de hacerla, con la idea de que quien lea esta crónica aproveche mis aciertos (que fueron los de los dos foreros citados) y eviten mis errores, que sí fueron míos y de nadie más.
En contra de mis convicciones y de mi forma habitual de viajar, esta vez decidí llevar reservados los alojamientos de antemano. Esto me ha supuesto un ahorro importante de dinero, pues al hacerlo con más de dos meses de antelación los precios fueron sensiblemente más bajos de lo que pude comprobar que lo habrían sido de haber reservado día a día. Además, me ha descargado de la tarea diaria de buscar sitio para dormir, que pudo haber sido fastidiosa por la alta demanda y los altos precios, como decía. De otro lado, esta estrategia me obligó a llegar, sí o sí, al destino previsto cada día, lloviera o no, encontrara un puerto cerrado o no, lo que tampoco supuso una gran inconveniencia en general, aunque sí en alguna etapa en particular.
Bueno, vamos a ello:
Etapa 1: Mandalore – Benicasim (Castellón) - Viernes 9
Ha habido lluvia, cayó una gran tormenta en algún tramo, pero también mucho calor cerca de Valencia, así que un poco de todo. Las más de siete horas y media estimadas por la inteligencia artificial, al final fueron 9:00h entre pitos y flautas debido a un pequeño incidente. Se me cayó el mando a distancia de la GoPro en una rotonda al salir de la gasolinera y tuve que volver atrás desde la siguiente salida de la autopista. Afortunadamente lo encontré sano y salvo, tuve suerte de que ningún coche lo pisara. Pero bueno, al llegar encontré un hotelito a pie de playa que recomiendo a quien le pille de paso, cenita mirando al mar a escasos metros de la arena y a descansar. El hotel Voramar me costó 75€ con desayuno incluido –muy bueno, variado y abundante– a la mañana siguiente.
La cena no pudo ser más placentera.
Lo mejor de la etapa: La cena mirando al mar en Benicasim.
Errores a corregir: Nada en concreto.
Etapa 2: Benicasim (ESP) – Millau (FRA) 662km - Sábado 10
El resto de España se cruzó sin mayores incidencias, pero al acercarme a la frontera francesa cayó una buena tromba de agua, de la que por suerte me libré en buena parte, porque justo estaba repostando gasolina cuando descargó lo peor. Pasados Perpignan y Narbona, a la altura de Beziers abandono la A9 en favor de la A75 con dirección a Millau. Recalé en un Ibis Budget (Millau Viaduc se llama) que resultó muy correcto y apañado. Costó 80€ con desayuno (bueno) incluido. Dos de las personas de recepción hablaban español. Amablemente me dejaron meter la moto en el garaje cubierto sin coste adicional. Desde allí había buenas vistas del viaducto de Millau, una obra de ingeniería colosal. Con paradas, descansos y esperas por la lluvia en el área de servicio de la Junquera han sido 9 horas justas de trayecto.
Desde Beziers a Millau el paisaje cambia a mejor.
Lo mejor de la etapa: El desvío desde Beziers hacia Millau es bonito y placentero. El hotel, recomendable.
Errores a corregir: Nada en concreto.
Etapa 3: Millau (FRA) – Les Houches-Chamonix (FRA) 513Km Domingo
Etapa de acercamiento hasta el pie mismo del Mont Blanc. Nada más salir muy tempranito (a las 7:00h estaba arrancando la moto), tomé la D907 hacia Le Rozier, donde empiezan las Gorges du Tarn, o Gargantas del Tarn, un recorrido placentero y bonito que vale la pena disfrutar sin demasiadas prisas. Una carretera en la que encuentro tramos con unas vistas preciosas aunque estrecha y con un asfalto algo castigado en algunos tramos (la D63). El motivo de salir hoy tan temprano es la previsión atmosférica, que amenaza fuertes lluvias a medio día en la zona de destino. En Gorges du Tarn Causses pongo rumbo a Saint-Éttiene por la N88 para luego rodear Lyon a una distancia prudencial, por la A46 primero y luego la A43 ya hacia el este. En Les Houches-Chamonix me alojé en el hotel Rockypop, muy confortable y acogedor, aunque algo bullicioso en fin de semana. Yo llegué en domingo a mediodía y ya iba saliendo la marabunta de allí. 68€ con desayuno buffet incluido, un precio excelente gracias a haber reservado con meses de antelación.
Las Gorges du Tarn
El hotel Rockypop, al pie del macizo del Mont Blanc
Lo mejor de la etapa: Las Gorges du Tarn. Vale mucho la pena desviarse un poco y disfrutarlas.
Errores a corregir: Nada, todo salió muy bien en una etapa tranquila.
En la próxima entrega, nos metemos en los Alpes "de verdad".
Pongo en aviso de que algunas de mis opiniones serán controvertidas, sé que mis preferencias no coinciden a veces con otros compañeros viajeros. Como suelo hacer, se ha tratado de un viaje en solitario. Un Mandaloriano lo es por definición, ése es el camino (perdón por la frikada). En este viaje ha habido luces, muchas, y alguna sombra en forma de errores de los que he aprendido y que expondré para evitar a otros tropezar en la misma piedra.
Quiero agradecer profundamente a los dos compañeros que más me ayudaron, seguramente sin saberlo, a trazar mi ruta y a sacarle jugo a una zona privilegiada de nuestro continente. Estos son @Stelvio y @despista2. Gracias a ambos, porque al final mi planteamiento fue una fusión de sus dos propuestas.
A lo largo de las etapas, procuraré destacar lo mejor de cada una y el error que habría corregido de haberlo sabido antes de hacerla, con la idea de que quien lea esta crónica aproveche mis aciertos (que fueron los de los dos foreros citados) y eviten mis errores, que sí fueron míos y de nadie más.
En contra de mis convicciones y de mi forma habitual de viajar, esta vez decidí llevar reservados los alojamientos de antemano. Esto me ha supuesto un ahorro importante de dinero, pues al hacerlo con más de dos meses de antelación los precios fueron sensiblemente más bajos de lo que pude comprobar que lo habrían sido de haber reservado día a día. Además, me ha descargado de la tarea diaria de buscar sitio para dormir, que pudo haber sido fastidiosa por la alta demanda y los altos precios, como decía. De otro lado, esta estrategia me obligó a llegar, sí o sí, al destino previsto cada día, lloviera o no, encontrara un puerto cerrado o no, lo que tampoco supuso una gran inconveniencia en general, aunque sí en alguna etapa en particular.
Bueno, vamos a ello:
Etapa 1: Mandalore – Benicasim (Castellón) - Viernes 9
Ha habido lluvia, cayó una gran tormenta en algún tramo, pero también mucho calor cerca de Valencia, así que un poco de todo. Las más de siete horas y media estimadas por la inteligencia artificial, al final fueron 9:00h entre pitos y flautas debido a un pequeño incidente. Se me cayó el mando a distancia de la GoPro en una rotonda al salir de la gasolinera y tuve que volver atrás desde la siguiente salida de la autopista. Afortunadamente lo encontré sano y salvo, tuve suerte de que ningún coche lo pisara. Pero bueno, al llegar encontré un hotelito a pie de playa que recomiendo a quien le pille de paso, cenita mirando al mar a escasos metros de la arena y a descansar. El hotel Voramar me costó 75€ con desayuno incluido –muy bueno, variado y abundante– a la mañana siguiente.
La cena no pudo ser más placentera.
Lo mejor de la etapa: La cena mirando al mar en Benicasim.
Errores a corregir: Nada en concreto.
Etapa 2: Benicasim (ESP) – Millau (FRA) 662km - Sábado 10
El resto de España se cruzó sin mayores incidencias, pero al acercarme a la frontera francesa cayó una buena tromba de agua, de la que por suerte me libré en buena parte, porque justo estaba repostando gasolina cuando descargó lo peor. Pasados Perpignan y Narbona, a la altura de Beziers abandono la A9 en favor de la A75 con dirección a Millau. Recalé en un Ibis Budget (Millau Viaduc se llama) que resultó muy correcto y apañado. Costó 80€ con desayuno (bueno) incluido. Dos de las personas de recepción hablaban español. Amablemente me dejaron meter la moto en el garaje cubierto sin coste adicional. Desde allí había buenas vistas del viaducto de Millau, una obra de ingeniería colosal. Con paradas, descansos y esperas por la lluvia en el área de servicio de la Junquera han sido 9 horas justas de trayecto.
Desde Beziers a Millau el paisaje cambia a mejor.
Lo mejor de la etapa: El desvío desde Beziers hacia Millau es bonito y placentero. El hotel, recomendable.
Errores a corregir: Nada en concreto.
Etapa 3: Millau (FRA) – Les Houches-Chamonix (FRA) 513Km Domingo
Etapa de acercamiento hasta el pie mismo del Mont Blanc. Nada más salir muy tempranito (a las 7:00h estaba arrancando la moto), tomé la D907 hacia Le Rozier, donde empiezan las Gorges du Tarn, o Gargantas del Tarn, un recorrido placentero y bonito que vale la pena disfrutar sin demasiadas prisas. Una carretera en la que encuentro tramos con unas vistas preciosas aunque estrecha y con un asfalto algo castigado en algunos tramos (la D63). El motivo de salir hoy tan temprano es la previsión atmosférica, que amenaza fuertes lluvias a medio día en la zona de destino. En Gorges du Tarn Causses pongo rumbo a Saint-Éttiene por la N88 para luego rodear Lyon a una distancia prudencial, por la A46 primero y luego la A43 ya hacia el este. En Les Houches-Chamonix me alojé en el hotel Rockypop, muy confortable y acogedor, aunque algo bullicioso en fin de semana. Yo llegué en domingo a mediodía y ya iba saliendo la marabunta de allí. 68€ con desayuno buffet incluido, un precio excelente gracias a haber reservado con meses de antelación.
Las Gorges du Tarn
El hotel Rockypop, al pie del macizo del Mont Blanc
Lo mejor de la etapa: Las Gorges du Tarn. Vale mucho la pena desviarse un poco y disfrutarlas.
Errores a corregir: Nada, todo salió muy bien en una etapa tranquila.
En la próxima entrega, nos metemos en los Alpes "de verdad".
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