11ª etapa: Skofja Loka - Skofja Loka (357 km)
Nuevo desayuno ligerito :

, esta vez con un "štruklji" con aspecto de donut gigante y sin agujero, relleno de mermelada. Igor nos comentó que los pasteles los hacían unos panaderos albano-kosovares especialistas en todo tipo de dulces. Como no pudimos con todos, envolvió con cariño lo que sobraba y nos pidió que lo llevásemos para tomar de postre, añadiendo también un par de plátanos.
Le comentamos nuestra experiencia del día anterior, sonrió y dijo: "- Sí hay un camino, pero sólo para bicicletas de montaña".
También nos dió el parte del tiempo: una ola de calor nos animaría el día :-/.
Salimos de nuevo dirección Austria, a través de Kranj y Jezersko (carretera muy agradable de montaña); buscábamos el camino hacia Logarska Dolina, pero como en austríaco el nombre cambia, nos pasamos el cruce y decidimos continuar por Austria para curiosear; esta vez nos acompañaron campos llenos de trigo, girasoles... y llanura, siempre con los Alpes a la derecha.
Entramos de nuevo a Eslovenia e hicimos parada en el castillo de Velenje. Allí teníamos tanta calor que nos sentamos en su patio y no nos movimos en un buen rato (tras comprar unos refrescos bien fríos

)
En la ciudad paramos en un super y compramos pan, ensaladas, agua fresca... con la intención de parar en un campo cuando pudiésemos. No tardamos mucho en encontrarlo, a orillas del río Savinja, observando a un par de pescadores en plena faena.
Allí descansamos un rato bajo los árboles, dejando el tiempo pasar plácidamente...
Ya con energías renovadas, continuamos nuestro camino por una carretera curveada y agradable, dejando el río a la izquierda y parando en uno de los numerosos puentes de madera que hay por estas latitudes, simplemente para notar el frescor del agua y hacer una foto
Ya veíamos indicado el Parque de Logarska Dolina, así que continuamos según las señales. En todo este tramo también nos encontramos con varios semáforos de obras y de repente, después de un pueblo de tres casas contadas y también en obras, la carretera se convirtió en camino de gravilla. "-Vale, pues vamos con cuidado...", peeero... un poco más adelante, la gravilla desaparecía y se convertía en camino de tierra y barro. Estaríamos a unos 12 ó 13 km. más o menos de nuestro destino y por mayoría decidimos dar marcha atrás para buscar otra alternativa :-/.
Decir que OJ "casi" salió convencido en este viaje de comprar una GS o similar ;D ;D
Tras el rodeo, al fin llegamos
El Parque Natural de Logarska Dolina es, según las malas lenguas

, uno de los valles glaciares más bellos de Europa. Hay que pagar para entrar (derecho a estacionar dentro así como mantenimiento del parque) y una vez allí hay senderos para hacer caminando, en bicicleta, en coche de caballos... algún hotel pequeño... En el fondo del valle, se encuentra la "Rinka Waterfall", de 90 metros de altura (para llegar hay que caminar cuesta arriba unos 20 ó 25 minutos):
No parece grande, pero en esta foto podéis comparar tamaños; esos dos liliputienses somos nosotros mojándonos

(recomendable acercarse si hace calor, el agua estaba fresca, fresca y la ropa secó en cinco minutos); la cabaña que se ve en la foto anterior es una especie de cafetería con menú del día:
Tocaba regresar, esta vez por el camino más corto, de nuevo por Austria (unos pocos km.) y Jezersko.
Una vez en el hotel, Nemesio y yo decidimos acercarnos a Ljubljana para cenar, mientras OJ y Trizia se quedaban en Skofja Loka.
Ljubljana estaba a unos 20 minutos de nuestra ciudad base, por carretera nacional con muy poco tráfico. Aparcamos en el centro (también calles en obras) y nos dispusimos a dar un paseo. Ya desde el principio pudimos ver lo animada que estaba a esas horas; al llegar al río nos quedamos asombrados de todo el ambiente que había, con terrazas, puestos de libros, artesanía, bicicletas, más bicicletas... nos maravilló desde el primer momento
Continuamos nuestro paseo con las últimas luces del día...
Para cenar en una terraza a base de ensaladas (o mejor dicho, platos combinados servidos en cuencos de ensalada, especialmente consistentes, tanto que no fuimos capaces de terminarlas :-?).
Había que bajar la cena, así que seguimos caminando...
Un espectáculo en la calle atraía a la gente:
Y la ciudad tomaba un color y un ambiente mágicos:
Cuando llegamos a la Plaza del Ayuntamiento, nos decidimos por tomar algo en una terraza...
Nos sentamos en un bar llamado "HdP", ojeamos la carta y las camisetas de los camareros y descubrimos divertidos el nombre completo ;D ;D:
Cuando el camarero supo que éramos españoles, nos pidió disculpas por el nombre del local, explicando que allí era como una broma y que se lo había puesto un italiano. Nos reímos un buen rato tomando unos estupendos combinados sin alcohol elegidos por el chico.
Así se acababa el día y nuestra visita a la ciudad, pasando de nuevo por el río en nuestra retirada, con las terrazas llenas de gente, de bicicletas, de animación, las calles cercanas lo mismo... si volvemos otra vez, este será nuestro campamento base
Ultima noche en Eslovenia con una despedida así de agradable...