
- Pero oiga, eso es imposible.
- Que si, que es cierto, examíneme.
- Pero que tontería... vamos a ver, ¿usted estará de acuerdo en que los muertos no sangran?
- Sí, claro.
- Bueno, pues le voy a pinchar un dedo con este alfiler y si usted sangra, eso significara que usted esta vivo, ¿no?
- Vale, pinche y vera como no sangro.
Entonces el medico le pincha el dedo, y obviamente saca una gotita de sangre; sonriendo, le dice al paciente:
- ¿Qué? -¿ Que me dice ahora?
- De acuerdo, yo estaba equivocado. Los muertos pueden sangrar.
