Tarzán de los Monos
Curveando
Las cámaras de acción cada vez están mas de moda, han cogido un auge difícil de parar, hoy día todo el mundo graba o es grabado, ya sea con cámara de vídeo convencional, las de acción o a través de lo mas cercano y cotidiano, el móvil.
Para los que vamos en moto supone muchas cosas, por una parte está la cuestión divertimento, grabar tu salida, tu ruta y luego al llegar a casa montar estas tomas en un pequeño vídeo para mostrar a los amigos o compartirlo en redes sociales.
También está el aspecto de seguridad, todos hemos visto alguno de esos vídeos que gracias a otro piloto han grabado por desgracia un accidente, pero que en algunos casos sirven para esclarecer los hechos y buscar responsables.
Por otro lado algo obvio y evidente, la atención que le prestas al dispositivo en sí, pues dejas de prestar atención al mismo tiempo a la carretera por fijarte si la cámara va grabando o no.
Son algunas de las circunstancias que pueden darse, pero lejos de esto, que a buen seguro lo anterior da para otro hilo, aquí lo que planteo es el hecho de ser grabado y el desconocimiento del uso que se harán de esas imágenes.
Particularmente me da igual ser grabado o aparecer en determinadas tomas de vídeo, siempre y cuando no se salgan del ámbito de lo normal. En Camino a Mongolia nos hemos propuesto tomar fotografía y vídeo de todo lo posible, eso implica estar expuesto a la opinión de mucha gente, como aquí, la diferencia es que aquí somos una gran familia, pero fuera, hay mucha mala intención.
Cuando salgo en grupo y llevo la cámara lo pregunto al grupo primero, ¿os puedo grabar y difundir las imágenes?. Imagino que esto no lo hace todo el mundo, pero lo considero importante y demuestra respeto y educación.
Nosotros, Carlos y yo, haremos muchas horas de vídeo y tomaremos mucha fotografía, para poder realizar un buen documento gráfico de todo. Logicamente no nos planteamos ir pidiendo permiso a todo el mundo, grabaremos y punto, es una acción muy extendida en todo el mundo y contamos en no tener problemas por ello y mucho menos con el Drone, sobre volando y haciendo tomas aéreas, fuera de población, claro está.
Saludos cordiales.
Para los que vamos en moto supone muchas cosas, por una parte está la cuestión divertimento, grabar tu salida, tu ruta y luego al llegar a casa montar estas tomas en un pequeño vídeo para mostrar a los amigos o compartirlo en redes sociales.
También está el aspecto de seguridad, todos hemos visto alguno de esos vídeos que gracias a otro piloto han grabado por desgracia un accidente, pero que en algunos casos sirven para esclarecer los hechos y buscar responsables.
Por otro lado algo obvio y evidente, la atención que le prestas al dispositivo en sí, pues dejas de prestar atención al mismo tiempo a la carretera por fijarte si la cámara va grabando o no.
Son algunas de las circunstancias que pueden darse, pero lejos de esto, que a buen seguro lo anterior da para otro hilo, aquí lo que planteo es el hecho de ser grabado y el desconocimiento del uso que se harán de esas imágenes.
Particularmente me da igual ser grabado o aparecer en determinadas tomas de vídeo, siempre y cuando no se salgan del ámbito de lo normal. En Camino a Mongolia nos hemos propuesto tomar fotografía y vídeo de todo lo posible, eso implica estar expuesto a la opinión de mucha gente, como aquí, la diferencia es que aquí somos una gran familia, pero fuera, hay mucha mala intención.
Cuando salgo en grupo y llevo la cámara lo pregunto al grupo primero, ¿os puedo grabar y difundir las imágenes?. Imagino que esto no lo hace todo el mundo, pero lo considero importante y demuestra respeto y educación.
Nosotros, Carlos y yo, haremos muchas horas de vídeo y tomaremos mucha fotografía, para poder realizar un buen documento gráfico de todo. Logicamente no nos planteamos ir pidiendo permiso a todo el mundo, grabaremos y punto, es una acción muy extendida en todo el mundo y contamos en no tener problemas por ello y mucho menos con el Drone, sobre volando y haciendo tomas aéreas, fuera de población, claro está.
Saludos cordiales.