Resulta que llego a mi destino y aparco la moto. Cuando me he apeado y me estoy quitando los guantes, veo por el rabillo del ojo que la moto se mueve. Al principio pienso que me está dando un mareo, porque bajo ningún concepto esperaba que la moto se moviera. Pero no. Veo como la pata de cabra se estaba plegando y, listo de mi, con la moto ya en caída, solo se me ocurre meterle el cuerpo -con la pierna derecha y su rodilla al frente- e intentar pararla. Lo jodío es que lo he conseguido, pero tengo un pedazo de cardenal en la pierna que más parece el mismo Papa. Además de pararla antes de que llegue al suelo, la he puesto derecha del tirón, y a resultas de eso me duele la zona dorsal derecha un bebo -contractura al canto-.
Si lo llego a saber dejo que se caiga y luego pido ayuda para levantarla, que es lo que haré la próxima vez.
Lo que no llego a comprender es porqué se me ha caído un ratillo después de apearme. ¿No habré puesto bien la pata de cabra? Había una ligera cuesta abajo, pero nada exagerada. ¿Habrá influido?
Si lo llego a saber dejo que se caiga y luego pido ayuda para levantarla, que es lo que haré la próxima vez.
Lo que no llego a comprender es porqué se me ha caído un ratillo después de apearme. ¿No habré puesto bien la pata de cabra? Había una ligera cuesta abajo, pero nada exagerada. ¿Habrá influido?