Pues siguiendo con el hilo, precisamente esta mañana he tomado la decisión de ir a otro concesionario de marca de "prestigio", pero antes de eso he querido anular ciertas variables por mi parte: me he duchado, afeitado engalanado, he lavado el coche a conciencia, y he entrado al concesionario tranquilo. Me he dirigido a la primera mesa donde hay una persona de unos 30 años, el cual sólo tenía ojos para el ordnador, no tenía montañas de papeles ni se le notaba estresado. Digo "buenos días, estoy intersado en el coche de tal marca y modelo, ¿quien me puede atender?", a lo que dicha persona, sin levantar la cara me dice que me dirija al despacho de al lado, y levanta su brazo izquierdo señalando el lugar. No me contesta con "buenos días" ni nada. Me sigo diciendo que tranquilo, me propongo hablar en tono normal, sin gesticular y tomar una posición de sentado normal. Me acerco al despacho donde hay una chica muy mona hablando por el teléfono de asuntos particulares ( si su niño...). Le pregunto sobre el modelo que quiero y lo que hace es preguntarme mis datos personales y de mi coche, a lo que que le interrumpo diciendo que primero me explique y asesore sobre el coche que estoy interessado y luego ya rellenaremos los documentos que sean necesarios, y su respuesta es negativa, que es imprescindible rellenar esos datos. Está quince minutos de reloj con el dichoso interrogatorio, lo imprime y a continuación me dedica dos minutos y algo en darme unos folletos publicitarios y su tarjeta de comercial. Y ante esto no he podido aguantar más, y le he dicho mi descontento con su actitud, la de su compañero y la falta de interés en vender un coche, pues para rellenar ese formulario lo podría haber hecho por internet, a lo que immediatamente me contestó que sí que es lo que tendría que haber hecho. Me despido con un adiós y salí con la misma tranquilidad con la que entré. Asi que si alguien me dice que las ventas de coches es por la crisis, le daré el ochenta por ciento de la razón. Si alguien habla de la profesionalidad de ese gremio en la provincia que habito, le diré que "tururú", y si alquien me pide opinión sobre los conesionarios que he visitado, les diré claramente que a partir de hoy no los volveré a visitar bajo ningún concepto. Y la culpa para que no se vendan los coches que en teoría se debería vender con estos tiempos, primero es por los comerciales y segundo por sus responsables que no les exigen las profesionalidad necesaria, sin dejar atrás a la propia marca que no establece unos cánones ni cursillos de reciclaje para esas personas. He tratado de ser correcto tanto en persona como en este foro, pero os aseguro que dan ganas de decir lo que pienso con otras palabras más llanas y claras. Saludos.