Buenas tardes moteros:
Por fin tengo un ratico para escribiros algunos detallicos de la Rutica Panera Temprana de Busman.
Parezco maño.
Jajajajajajajajajajajaajajajajajajajajajaajajajajaja.
Qué pesao el tipo ese, el Pampero, que casi no me deja salir de casa, pero conseguí darle esquinazo.
Otro día más amaneciendo en la Farmacia que todo lo cura, especialmente si se llega allí con la mejor de las medicinas, es decir, con una moto.
Comprobado, no es roja, si no que es increíblemente naranja.
Es el
Mejillón:
A mí me habría gustado más la Jirafa Mecánica, pero lo de Mejillón le hace tilín a su dueño, así que no se hable más.
El Mejillón Naranja, el cual era hoy la estrella invitada, era adorada por todos los PanerosTempraneros:
¿Menos Tino?...
Jajajajajajajajajajajajaajjaa.
Busman estaba que se salía de contento, claro, otra KeTeMeto en la pandimoto:
Al final, hasta Tino parecía estar interesado.
Pero claro, es que hoy venía con la Gatita Encarná de Kamotillo, y eso son palabras mayores.
Enseguida se presentó Granadino y ya estábamos todos, pero no, no nos íbamos a marchar todavía.
Moto nueva...
Efectivamente faltaba el desvirgue de Ansia Viva.
Bueno, me refiero a que Ansia Viva desflore al Mejillón.
Qué mal suena.
Jajajajajajajajajaajajjajaja.
Y raudo se marchó a probarla.
La Super Adventure tiene un control anticaballito que no se puede desconectar, por lo que no estuve pendiente de su vuleta ya que intuía que no iba a haber espectáculo.
El caso es, que al volver, y después de terminar la rotonda se marcó un jaco, bueno, tirando a poni, pero jaco al fin y al cabo.
Tanto empeño puso en ello que se pasó la entrada y tuvo que volver.
Jajajajajajajajajaa.
Y ahora sí, con este simpático primer plano, nos marchamos.
Nos dirigía Busman hacia Robledo de Chavela, pero antes de llegar a esa población, AV1000 tomaba las riendas de abrir ruta.
Enseguida girábamos a la derecha en dirección a Cebreros.
La Gacela, que iba la tercera, dejó pasar al Mejillón, para que así estuvieran juntas toda la fauna de Ansias.
El primer tramo es muy rápido, pero enseguida llegó lo bueno cuando empezamos a negociar las curvas más ratoneras y bien pronto empecé a no dar crédito a lo que veía y escuchaba.
Como ya comentaba, iba detrás de Sboard2001, y cuando llegaron los tramos revirados empezó a descolgarse como si no hubiera un mañana y sin podermelo creer, me pareció escuchar el típico sonido que hace una deslizadera de rodilla cuando entra en contacto con el asfalto.
Sí amigos, Sboard es capaz de arrastrar rodilla subido en semejante Jirafón.
Pero a la salida de una de esas cerradas curvas de izquierda, deslizó la rueda trasera, aunque con elegancia y sin peligro alguno, pero que le causaría cierta intranquilidad en algunos tramos.
En todos no, desde luego.
No estaba muy convencido del neumático que lleva, ni de las presiones que le indicaba la pantalla.
Si es que estos artilugios modernos tienen más caballos que la cuadra Rosales, en sus cuarenta años de historia, y la Romería del Rocío, juntos.
Jajajajajajajaajajajajajaja.
Bendito control de tracción, aunque yo no lo tengo.
Claro que con los caballos que tiene la Gacela igual no hace falta.
Llegábamos a Cebreros y a Anvia Viva nos dirigió por esa carrteera ondulada, irregular, estrecha, qué maravilla, en dirección al Embalse de El Burguillo.
El embalse era historia y enseguida estábamos negociando el tramo de las Calas de Guisando, el cual disfrutamos a tope con su trazado ratonero pero de firme perfecto y calzada con una muy buena anchura.
Cuando llegamos a Navaluenga, giramos a la derecha en dirección a San Juan de la Nava, a través de una carretera de buena anchura pero que está también muy irregular con algunos tramos un poco descarnados.
Claro que al llegar a San Juan de la Nava, no hubo más remedio que dirigirse hacia Navalmoral y una vez allí, a ver quién es el guapoooorrr que se resiste a subir el magnífico puerto de igual nombre.
Y yo detrás de AV1000 y de Busman.
Y mi Gacela, que hay veces que debería llamarse el Enigma Azul por cómo persigue a sus amigas, no se despegaba de ellas.
Pero claro, todo tiene su truco, y es que sus pilotos controlan las subidas de régimen para ayudar a los que no disponemos de escalas tan elevadas en nuestros cuentarrevoluciones.
Jajajajajajaajajajajajajajajajajajaja.
Estábamos muy cerca de Ávila, cuando alguien dijo que volviéramos para acortar por Riofrío, a lo que se ofreció Tino.
Estábamos ya en la desviación, cuando le dio por retorcerle la oreja a la Gatita Encarná y allá que nos fuimos todos detrás para negociar el magnifico puerto de igual nombre, pero de bajada.
Si glorioso es de subida, ni te cuento de bajada, con esos curvones en cuesta abajo.
Es una pasada, y con unos paisajes fabulosos.
En estos tramos de bajada era donde Sboard no se encontraba a gusto y me dejó adelantarle, pero ya se vengaría, ya.
Llegábamos de nuevo a Navalmoral y nos dirigimos hacia la Venta del Obispo, pero Tino, que volvió a tomar el mando, nos metió por la carretera que va a Navalacruz.
Carretera estrecha, rota, irregular, entre árboles, pues una maravilla para las patas largas de las maxitrail.
Llegábamos a la N-502 y no, no giramos hacia la izquierda para el puerto del Pico, si no que nos dirigimos de nuevo hacia Ávila, para, enseguida, girar a la izquierda hacia Cepeda la Mora, Garganta del Villar, San Martín del Alberche y Barajas.
Esta carretera ya fue el regodeo padre, pero por lo mala, pero qué bien me lo paso en estos tramos tan destrozados..
Al llegar a la AV-941 nos dirigimos a la izquierda hacia San Martín del Pimpollar con unos curvones de todo tipo dignos de negociarlos.
Enseguida M-502, giro a la izquierda y en un momento estábamos en la Venta del Obispo.
Ya sabéis qué venimos a hacer aquí, no es ningún secreto, pero lo veremos más tarde.
Cupo máximo de archivos.
Continuará.....
V'sssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss